11. Me lo pensaré

1.9K 148 17
                                    

ᴄᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ 11
ᴍᴇ ʟᴏ ᴘᴇɴꜱᴀʀᴇ

ᴄᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ 11ᴍᴇ ʟᴏ ᴘᴇɴꜱᴀʀᴇ

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Narra Sadie

Me encontraba en la biblioteca junto a Millie y Noah. Ellos estaban hablando en susurros fuertes para mi oído y riéndose de sus tonterías. Yo, en cambio, intentaba estudiar para el examen del lunes. Una risa fuerte hizo que cerrara los ojos del enojo.

―¿Podéis dejar de hablar, por favor? ―les pedí lo más amable que pude y ellos me miraron―. Estamos en un biblioteca y, por si no sabéis que es, es un lugar para leer y estudiar, no para charlar ―les expliqué―. Al menos bajar un poquito la voz... Intento concentrarme ―les supliqué y ambos me pidieron perdón.

Volví a leer el mismo párrafo del texto, el cual había revisado ya más de veinte veces. Sin embargo, era imposible concentrarme para comprenderlo y no era por culpa de Millie y de Noah. Eso solo era una excusa. El verdadero motivo que no me dejaba estar tranquila era la pelea que antes tuvo Finn con la chica. No sé por qué, pero la muchacha parecía no querer discutir con él. La única persona que estaba hablando y reprochando barbaridades era Finn.

Además, pude notar su mirada de tristeza. No la conocía de nada, pero sí sabía cómo eran las personas como ella. Esa chica seguramente será la típica que tiene una máscara cubriendo su cara para no tener que explicar qué le pasa. Y, aunque yo no fuera partidaria de seguir ese camino, quizá las drogas era lo único que la ayudaba a olvidarse de todo.

No podía meter tampoco la mano en el fuego y apostar por esa idea loca, pero esta mañana la noté rara. No se comportaba igual que ayer. A mí antes me vacilaba a cada rato y hoy a Finn ni siquiera le dirigía la palabra, solo se mantenía con la cabeza cabizbaja o intentando evitar las miradas de los demás.

Los pensamientos me estaban provocando un dolor de cabeza. No podía estudiar de esta forma. Por tanto, decidí cerrar el libro bruscamente, llamando la atención de Noah y Millie, y meterlo en la mochila. Me levanté de la silla y salí de la biblioteca. Sentí pasos detrás de mí y unas manos me agarraron de la muñeca.

―Perdón ―Millie se disculpó de la nada mientras que intentaba recobrar el aliento.

―¿Por qué? ―fruncí el ceño sin entender nada.

―Por no dejarte estudiar ―respondió esta vez Noah, colocándose al lado de Millie. Ambos tenían la respiración acelerada por haber corrido para alcanzarme.

―Ah..., no..., ustedes no habéis tenido la culpa ―intenté tranquilizarlos y ellos se miraron confundidos―. Simplemente no me concentraba por... Nada, cosas mías.

―¿Seguro que estás bien? ―indagó Millie, preocupada, y asentí con una sonrisa.

Alguien tocó mi hombro y me giré para identificar a esa persona, encontrándome con el primo de Finn.

―Hey ―lo saludé, aturdida.

―Quisiera hablar contigo ―me pidió, confundiéndome aún más―. Bueno, ya que estáis ustedes también, con vosotros.

Stranger Feelings (Sadie Sink)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora