C A P Í T U L O | 44

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44.- "Descubrimiento"

Aristeo Hayes

Jamás había creído que hacer notas en tabletas digitales fuese tan cómodo.
Las funciones que se descubría eran muy buenas, y tomar notas sobre las clases se volvía más agradable.

En realidad, mis clases eran muy interesantes, los días pasaban y cada vez me gustaban más.
Todos los maestros eran amables, también los alumnos, pero por supuesto, había dos de ellos que no me recibieron de la mejor manera.

Elijah y Nelly no me encontraban como la persona más agradable que se les ha cruzado.

Había intentado ignorarlos estas dos semanas, pero se notaba que ellos se esforzaban por aparecerse en mi camino y seguir derrochando su veneno.
Mi molestia no fue con todo lo que me decían sobre ser becado, entendía que eso solo era algo ridículo que ellos creían que era motivo de insulto.

Incluso alguien me ayudó a entenderlo mejor, y terminé sintiéndome halagado pues ya sabía que si yo era becado, era porque mi rendimiento académico definitivamente era muy bueno.

Lo que llegó a molestarme mucho, fue cuando esas dos escorias empezaron a inyectar su veneno sobre mi relación con Bryant.

Sus intentos eran inútiles, yo confiaba en Bryant más que en nadie, y era claro que ellos no iban a lograr perjudicar nuestra relación.
De alguna forma ni siquiera me sorprendían sus intentos, se veía venir desde que me preguntaron si tenía pareja.

Aunque sí, ese cambio radical de estar en una ciudad que conozco, con personas que conozco, a moverme a una ciudad que definitivamente nunca he explorado, y con personas nuevas; provocaba un desajuste emocional.

Yo no era el mejor manteniendo una estabilidad emocional, a veces me costaba un poco mantener mi tranquilidad, y este cambio me había vuelto más vulnerable a tener variedad de emociones y pensamientos con respecto a cualquier tema.

Sin embargo, agradecía profundamente haber aprendido al lado de Bryant a no dejar que cualquier pequeña situación me ponga mal. Podría decir que con o sin O'Donnell físicamente presente; estaré bien.

Había llegado el sábado, Kaddari decidió salir con algunas personas de sus clases e incluso me invitó, pero al momento de invitarme, yo ya tenía planes para hoy en la tarde y noche.

Terminé de vestirme antes de recibir un mensaje de Friedrich, indicando que ya estaba listo y podíamos vernos en la entrada del estacionamiento.

Despejar mi mente de toda esta semana era lo único que quería, disfrutaba mucho hablar con Bryant por la noche y que él no tuviera la mínima dificultad de hacerme olvidar todo lo malo.

No obstante, también quería salir, y la invitación de Fred a conocer la ciudad era algo perfecto.

Salí del apartamento luego de dejarle un mensaje a Kaddari, me apresuré a bajar, procurando que mi ropa esté en su lugar al igual que todo lo que debía tener para salir.

Bajé por las escaleras de todo el edificio, en la entrada de este, ya me estaba esperando el chico que al menos a mí parecer, ha sido el más amable de entre todas las nuevas personas que conocí en esta universidad.

—Hola, lamento si me tardé en bajar.

Friedrich negó simpático. —No te preocupes, no tengo mucho tiempo esperando. ¿Nos vamos?

Asentí. —Nos vamos.

Salimos del edificio caminando, evidentemente, ni él ni yo teníamos algún vehículo para ir por la ciudad.
Friedrich tenía una bicicleta, y decía que solo la usaba para ir a su trabajo, e incluso me confesó que planeaba comprar un auto o una moto, aunque se inclinaba más por una moto.

BRYANT ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora