Enamorándome de mi bully ⟦ Luckity ⟧

Capítulo III - Lo que me espera

Advertencia: Agresión física

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El pequeño grupo de amigos se la pasó riendo casi toda la hora libre, el menor estaba feliz, se sentía suficientemente cómodo como para poder mostrar como era en realidad.

-¡Que no se la chupe al director, pendejo!- sus compañeros reían sin parar. -Yo no tengo la culpa de que todos se sientan inferiores a mí.- soltó riendo, pero sus amigos se callaron, este los miró extrañado. -¿Que paso?- no solo sus amigos se habían callado, también toda la cafetería, fue cuando se percató de que el castaño estaba detrás de él.

-¿Tú te crees superior a mi?- para su mala suerte, este había escuchado todo.

-¡N-No!- comenzó a temblar, recordando nuevamente todo lo que había pasado en la mañana. -¡Solo estaba bromeando!- juntó sus manos en señal de disculpa mientras cerraba fuertemente los ojos, tenía miedo.

El mayor río fuertemente. -Vaya pedazo de mierda con el que se puede encontrar uno.- jalo su silla, provocando que el pequeño cayera al suelo, este solo atino a hacerse bolita.

-Por favor Luzu, ¡no le hagas nada!- le suplico Alexby. -¡ES SOLO UN NIÑO!- pero este no le prestó atención y comenzó a jalar al menor de la camisa y arrastrarlo fuera de la cafetería.

-¡NO! ¡SUÉLTAME, POR FAVOR!- gritaba desesperado mientras comenzaba a llorar.

-Como presidente escolar, te pido que sueltes al joven Alexis.- habló seriamente el ojos violeta mientras se levantaba. -Así que...- no termino de hablar, puesto que alguien le había tapado la boca. -"¿Rubén?..."- pensó mientras lo miraba.

-Cállate un momento cariño.- lo aprisionó con su mano libre. -Y deja que se divierta con el niño.- por más que el pelinegro luchó por zafarse, no lo logró, el otro le estaba agarrando muy fuerte.

-¡Quackity!- Staxx intentó correr hacia el mencionado, pero el Willy se puso en su camino.

-Un paso más, y ya veras como te va.-

Staxx solo pudo apretar sus puños con enojo, Alexby solo atino a tapar sus oídos con sus manos, se sentía mal al no poder hacer nada por su nuevo amigo.

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El castaño seguía arrastrando al menor por toda la escuela, todos los alumnos veían con terror la escena, más nadie hacía nada. Incluso varios maestros lo miraban, pero al notar que se trataba de Luzu, desviaba la mirada y seguían con sus cosas.

-¡AYUDA, POR FAVOR!- gritaba desesperado, al ser arrastrado por tanto tiempo su uniforme comenzó a romperse por la fricción y al mismo tiempo se le estaban generando varias heridas en sus posaderas, espalda y en sus pequeñas alas.

Fue llevado hasta atrás de los edificios, donde nunca había ni un alma, el mayor término por aventarlo al piso.

-Por favor, no me hagas nada...- seguía llorando, no sabía lo que le esperaba.

-Te dije que no me estorbaras.- comenzó a patearlo en el estómago, el menor comenzó a gritar ahogadamente.

-¡P-Pero no te hice nada!...- otra patada.

-Dijiste que eras superior a todos, ¿no es así?- lo agarró de los cabellos. -¿Creías que me iba a quedar con los brazos cruzados?- el menor solo empezó a sollozar mientras cubría su rostro con sus manos. -¡Ten la decencia de mirarme cuando te estoy hablando!-

A nuestro pequeño azabache no le quedó de otra más que obedecer, quitando sus manos y levantando lentamente su rostro.

El mayor estaba furioso, estaba a punto de golpearlo en el rostro, pero fue cuando por fin cruzaron miradas, el menor tenía su rostro lleno de lágrimas, había terror, tristeza e impotencia en sus ojos, además de encontrarse agitado por los golpes.

-... ¡Deja de mirarme así, maldito niño!- terminó soltándole un puñetazo en la cara, provocando que el menor se desmayara. -...- terminó soltándolo, se le quedó mirando por unos segundos, hasta que decidió irse, dejándolo ahí tirado como si de basura se tratase.

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-¡SUÉLTAME YA!- grito el menor mientras se levantaba. -¿Eh?...- fue cuando se percató que ya no estaba en el piso, sino en una cama, además de solo estar en ropa interior y con mucho dolor en su cuerpo.

-¡Quackity!- el menor lo miró asustado. -Tranquilo... Ya estás a salvo, aquí nadie te puede hacer nada.- se acercó un poco a él, provocando un leve temblor del pequeño.

-A-Alexby...- comenzó a llorar mientras alzaba sus brazos hacia el mayor, este se sorprendió pero corrió y lo abrazó delicadamente. -¿Por qué nadie me ayudó?...- lloró tristemente mientras se aferraba a el.

Era cierto que el menor odiaba el simple hecho de que lo tocaran, pero en estos momentos necesitaba el apoyo de alguien, se sentía mal, no sabia porque le estaba pasando todo esto.

-Lamentablemente nadie puede hacerle nada a esos tres...- hablo calmadamente mientras seguía abrazando al menor. -Cuando notamos que Luzu regresaba sin ti, corrimos a buscarte, hasta que por fin te encontramos...- hizo una pausa, el menor lo miró de reojo. -Vegetta te cargo, Staxx condujo hasta mi casa y aquí adapte una habitación para ti...- el menor sonrió levemente.

-Gracias...-

-No te lo digo para que me agradezcas, tonto.- rió levemente. -Tus heridas fueron curadas, por eso te encuentras sin ropa, pero lamentablemente tu uniforme se rompió, no era posible repararlo.- suspiro. -Pero no te preocupes, te puedo regalar uno sin problemas, tengo varios guardados.- el menor asintió tímidamente.

Después de que se tranquilizara, se alejó un poco y habló mientras le miraba.

-¿Por qué me atacan de esa manera?- el mayor suspiro pesadamente.

-Veras...- aclaró su garganta. -El peliblanco se llama Guillermo, pero todos lo conocen como Willy. Tiene mucho dinero y sus padres influyen mucho en la escuela, que digo en la escuela, en toda la ciudad también... En teoría estamos jodidos.-

El menor abrió sus ojos con sorpresa, no se esperaba esa respuesta.

-El castaño es un híbrido oso, se llama Ruben, pero todos le dicen Rubius. Se hace llamar el "todos míos" ya que coquetea y acosa a todos, es la mano derecha de Willy y su familia también es adinerada.-

-Eso explica bastante...- suspiro. -P-pero...- comenzó a tartamudear. -¿Y ese tal L-Lusu?...-

-Su verdadero nombre es Borja, pero todos lo conocen como Luzu por su apellido. Normalmente él es el más tranquilo de los tres.- miro directo al menor. -Creo que si le dolió que le quitaras su puesto... Es un chico de excelencia, ademas de que su familia es muy adinerada.-

-Que tenga dinero y que le haya quitado su puesto no significa que pueda hacer lo que le plazca conmigo...-

-Es verdad... Pero finalmente su papá es el director.-

-Puta madre...-

-Lamento decírtelo compañero, pero no podemos hacer nada, más que no meternos con el.-

El menor asintió resignado, parece que lo que consideraba un gran giro en su vida iba a convertirse en una verdadera mierda.