Enamorándome de mi bully ⟦ Luckity ⟧

Capítulo XXIV - Cambios de humor

Advertencia: Golpes y sangre.

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POV QUACKITY

Después de desquitar un poco mi furia con todos seguí al profesor, no me quedaba de otra. Al llegar a la dirección me indico que me quedara hasta que el volviera con el director, fue cuando recordé que se trataba del padre de Lusu. Un escalofrío recorrió todo mi cuerpo, es verdad que lo había conocido días antes de entrar a la escuela, pero no le tome importancia a su aspecto y ahora, no sabía que podía suceder al "conocerlo" de nuevo.

-Joven Alexis.- me habló el profesor, tensándome de inmediato. -Parece que el director ya se fue.- suspire aliviado. -Pero aun así no se salvara de su castigo, debe quedarse en detención.-

-¿Cuánto tiempo?...-

-Yo decidiré cuanto tiempo.- me miró. -Además, hable por teléfono con el director y me autorizo para entregarle esto.- me dio un papel, comencé a leerlo.

-¡¿Suspensión temporal por comportamiento inapropiado?!- lo miré indignado. -¡¿Me va a suspender dos semanas solo por ser grosero?!-

-Baje su tono de voz, joven Alexis.- me miro mal.

-¿Pero por qué tanto tiempo?- trate de disipar mi volumen de la voz, a pesar de que quería gritarle todo lo que sentía.

-Porque esta es una escuela de excelencia, con alumnos de excelencia...- hizo una leve pausa, pude sentir como me juzgaba con la mirada. -Usted debería empezar a comportarse como tal.-

-"Hijo de su puta madre."- pensé mientras lo retaba con la mirada. Estos comentarios habían provocado que mi sangre hirviera, además de que mi cuerpo comenzó a dolerme. No sabía el porqué y eso solo provocaba que me enojara más. -Claro.- fue lo único que salió de mi boca.

-Bien, acompáñeme al salón de detención.- camino a la salida, apenas se giró le hice una seña con mis manos, para después seguirlo.

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Fueron las horas más aburridas de mi vida, además de estar solo todo el tiempo tuve que ponerme a hacer "tareas extras". Y para acabar con mi sufrimiento estos dolores solo iban en aumento, provocándome mucho mal humor. Solo quería llegar a casa y acostarme, no quería ver a nadie ahora.

-Hijos de su puta madre.- hablé en voz alta al darme cuenta de que ya estaba oscuro. -Deberían meterse sus castigos por el c-...-

-¡Quackity!- fue cuando pude notar que Lusu estaba todavía esperando aquí, estaba por correr a sus brazos para que me mimara y consintiera, ya que de verdad lo necesitaba. -¡Por todos los dioses! Si sigues así te van a volver a castigar.- pero me detuve, ¿De verdad este cabrón me iba a regañar? Normalmente esto me lo tomaría a broma, pero esta vez no pude soportarlo, terminé por mirarlo mal y contestarle de mala manera.