[Terminada] Lo que Amo de Ti [Historia Lésbica]

Parte 48

Hola! les dejo cap 

Capítulo 47

Nora nunca fue una mujer de fiesta. Lo suyo era salir a beber, charlar sobre la vida y contemplar al vacío existencial y preguntarse cuál era el secreto para ser feliz.

Estaba aburriéndose en la cena. Apenas había tocado su comida porque no quería que sus nuevos compañeros la vieran comer boneless como un animal hambriento. Le había dado solamente dos sorbos a su cerveza, que ya estaba calentándose en su mano. Los demás parecían ocupados a sus charlas, hablando sobre temas que Nora desconocía porque eran chismes pasados y ella no tenía por qué opinar.

¿En qué momento me volví una amargada? Se preguntó, incómoda al saber que era la única que estaba acabando con el ambiente de la cena.

—¿Estás bien? —Preguntó Ximena, que estaba sentada a su lado. Ella tampoco había bebido mucho, a diferencia de Esther y Alexandra.

—Sí... eh. Es que tengo algunas cosas en la cabeza. ¿Cómo estás tú? Escuché que sales con la hija de Vanesa.

—Sí —sonrió Ximena y se apresuró a mostrarle una foto en su teléfono. Se trataba de una chica vestida con su uniforme de colegiala, y para su edad, ya era toda una belleza de mirada radiante y cabello castaño—. Se llama Mary.

—Vaya —Nora estaba auténticamente sorprendida por una relación lésbica con tanta diferencia de edad. No era algo que ella haría, pero tratándose de una lindura como aquella adolescente de la foto, tal vez valdría la pena pensárselo dos veces.

—¿Y qué hay de ti? —Preguntó Ximena—. ¿Te gusta alguien o tienes pareja?

—Uhm... no —respondió y pensó fugazmente en Audrey—. Tuve una relación muy bonita, pero terminó y apenas me estoy recuperando de eso.

—Debe ser difícil —dijo Ximena.

—Sí, lo fue —Nora desvió la atención hacia Erick y Jade, que bailaban en la pista. La mujer se movía como una diosa alrededor del profesor de educación física, que a su vez parecía engatusado como un insecto atraído por la luz—. ¿Qué onda con Jade? ¿Le gustan las mujeres o los hombres?

—Mm... —Ximena apoyó el mentón sobre la mano derecha—. Ambos. ¿Por qué? No me digas que se te ha insinuado.

—¡No! —Exclamó Nora con las mejillas abochornadas—. Solamente preguntaba porque... bueno, se nota algo en ella.

—¿Tu radar gay se activó? —Preguntó Ximena con una risita infantil—. Tranquila. Estás en confianza. ¿Te gustan las mujeres?

—Pues... sí —admitió Nora—. Supongo que una lesbiana puede reconocer a otra.

—Sí, parece —Ximena suspiró—. Como sea, Jade es buena chica. Siempre está hablando de esto y de lo otro. De no ser por ella, no estaríamos reunidos aquí. Antes, ninguno de los profesores nos llevábamos bien.

—¿Es como la alfa?

—Más o menos. Ella hace los planes y los demás la seguimos.

A Nora, de repente, aquella característica le pareció bastante atractiva. Parecía como si Jade tuviera esa seguridad que a ella tanto le faltaba. Suspiró y volvió a poner su vista en ella. Bailaba con maestría, moviendo las caderas de aquí para allá y enseñando esas fabulosas piernas debajo de su falda.

Qué mujer... pensó para sus adentros.

Estaba fantaseando con Jade, cuando su teléfono recibió una llamada que la puso nerviosa. Al ver la pantalla, se le heló la sangre y sintió como si le faltara el aire. Se disculpó con los de la mesa y se alejó a un lugar más tranquilo para contestar.