Ya era de noche, y se podía respirar en el aire los nervios del baile y también un poco de cabello quemado, las chicas habían venido a nuestro cuarto a arreglarse, a excepción de Cassandra, que se había ido una vez terminó de organizar todo para arreglarse quien sabe donde.
Estábamos todas listas, Sussy llevaba un vestido largo de dorado con brillantinas, escotado en la espalda, su cabello rubio recogido en un moño perfectamente trenzado, unos tacones negros, y un collar de diamantes, de maquillaje no llevaba demasiado, sólo había delineado sus ojos de negro, un poco de rubor, y sus labios de un rosa pálido.
Camila, traía puesto un vestido blanco más casual dos dedos encima de la rodilla ajustado, unos tacones negros una chaqueta de cuero corta, su cabello suelto salvo por una tranza del lado derecho, y un colgante que llevaba siempre de una piedra negra y su maquillaje era algo salvaje y provocativo, sus labios de un intenso rojo, y sus ojos delineados de negro, algo de toques en polvo y bases para perfilar su nariz y aumentar sus pómulos.
Michelle iba con un vestido negro suelto dos dedos por encima de las rodillas, sin tiras, el cabello en rulos sueltos con una diadema trenzada, sus tacones blancos y accesorios nada extravagantes, muy sutiles, y de maquillaje había usado solo un brillo en los labios, algo de rubor, una sobra blanca y un delineado sutil.
Y yo iba algo simple, un vestido suelto, blanco largo, con un cinturón a la altura de la cintura, unos tacones marrón claro, mi cabello lo recogí en una coleta, delinee mis ojos, sin pasar sombras, un polvo un poco más oscuro de mi piel para verme menos pálida de lo que era, y deje mis labios sin pintura.
Estábamos listas así que salimos del cuarto y corrimos como pudimos por las pasillo, hasta bajar por las escaleras y cruzar el patio hacia el salón de eventos.
Las puertas estaban abiertas y la musica se escuchaba incluso por todo el patio, que he de mencionar que estaba repleto de chicos y chicas, el baile parecía afuera y no adentro.
Ignorando aquello decidimos entrar y lógicamente separarnos, una vez Matias cruzó su mirada con Sussy, se fueron juntos por algo de tomar, Michelle se había quedado afuera al lado de Marc que conversaba con sus amigos, y Camila había buscado un lugar donde sentarnos mientras yo buscaba algo de comer para nosotras.
Al lado de las mesas se encontraban dos profesores, el de Literatura y uno que asumía sería del otro internado porque no lograba reconocerlo, y no se veían muy contentos, claro, no creo que vigilar que los estudiantes no coloquen alcohol en las bebidas sea precisamente la cosa más divertida del mundo, me pregunto ahora, ¿que estarían haciendo en lugar de estar acá? Debe ser algo molesto tener que quedarse a trabajar incluso hasta altas horas de la noche.
Obviando aquello y mi intriga estúpida y repentina por saber de sus vidas, me acerqué a la mesa saludando al profesor Flecher, el de literatura, y agarrando un plato plástico donde empezar a tomar unos cuantos tequeños, pastelitos, queso, unas cuantas fresas bañadas en chocolate y nada mas, tenia muchas ganas de tomar todo, pero no, tenía que controlarme.
Me junté con Camila que estaba algo desganada, y no podía afirmarlo pero lograba imaginarme el porque de su mal humor, y seguro era por no ver aún a Sebastian por ninguna parte.
-Esta música tan pasada de moda, ¿quien la habrá elegido? ¿La hermana Clara? -Me reí, desde que nos habíamos sentado no había dejado de quejarse por todo.
-Puedes relajarte y pasarla bien, aparte fue tu amiga Cassandra quien la eligió, y no creo que le guste mucho escuchar tu comentario. -Dije con mi boca llena, si se que es de mala educación, pero bueno, da igual.
-¡Ay no! Dime que no está cerca, no se como lo hace pero todo lo escucha -volvi a reírme y mire hacia los lados, efectivamente ya Cassandra se encontraba dentro del salón, tomaba algo junto a Pascuali, y se reían sin parar.
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Internado de Perras (P#1) (EN CORRECCIÓN)
RomanceSer la mas perra entre todas las perras no era un trabajo fácil pero fingir ser una de ella era mucho más complicado. Lo había podido experimentar al tener que convivir con esa especie, era un ambiente hostil dónde nada era lo que parecía y nadie e...