Internado de Perras (P#1) (EN CORRECCIÓN)

(Borrador) Entre cielo y perras no hay nada oculto.

Cassandra.

Dicen que entre cielo y tierra no hay nada oculto, sin embargo siempre fui de la idea de que mientras más perra, ruin, y desinteresada te volvieras, podrías tener tus más oscuros secretos ocultos, debido a que aquellos secretos, son en realidad aquello que deseas olvidar, eso que te lastima y te hace volverte una mala persona, y tomas una nueva postura, creas una fantasía donde estas bien, donde nadie puede pisotearte y eres el centro del universo, y esos secretos que podrían destruir esa imagen, se convierten en inventos, falsos, difamaciones, nada es real, sólo lo que creo para que el resto del mundo vea.

Puedo hacer creer a la gente lo que quiera, puedo ser quien quiera, todas dicen envidiarme, y sienten que nunca podrán llegar a ser como yo, ¿reconozco algo? Yo me siento exactamente igual, si, porque en realidad lo que soy, no soy yo, es una fachada, una imagen que quiero mostrar y hacer creer que es, cuando en realidad no es, así que cuando me dicen que quieren ser como yo, me río, porque en realidad no quieren ser como yo, quieren ser lo que yo pretendo ser, ya que en el fondo, soy igual que el resto de personas, incluso más insignificante.

No tengo porque negarlo, no hay necesidad de mentirme, aunque me esfuerzo en creerme el papel para que los demás también crean en el, se que no soy perfecta, ni deseo ser, no desee ser quien soy, no desee pasar por lo que pase, y menos deseo hacer lo que me están obligando hacer.

Por eso me encontraba ahora, frente a Kiara, quería acabar con la farsa, nadie merecía salir lastimado, estoy cansada de lastimar a las personas que quiero, y no es que Kiara precisamente fuera alguien a quien aprecio, no, pero Santiago Pascuali si, y no me gustaba verle en el estado que estaba.

Ambos aprendimos a fingir y pretender ser quienes somos hoy día, más que yo, no había nadie quien lo conociera mejor, al igual que más que el, no había nadie que me conociera en realidad como soy, fue mi apoyo por años, y aunque hemos discutido en varias ocasiones, y al comienzo no nos lleváramos del todo bien, hoy día es una de las personas más importantes en mi vida...después de mi madre.

Todo comenzó tras la muerte de mi madre, ella tomo la decisión de suicidarse, por los constantes abusos de mi padre, no pudo soportarlo, al igual que yo aún no puedo soportar ni perdonar su pérdida.

La misma noche de su funeral, mientras caminaba por los pasillos desganada tratando de encontrar nuevamente a mi madre sentada frente al piano, tocando hermosas melodías, pero sabía que eso ya no pasaría, mi padre estaba algo alterado, debido a que por alguna razón se había detenido la producción de muebles, los trabajadores, debido a la mala paga, habían realizado una especie de huelga o paro, por lo que minutos que no se trabajaba, minutos por dinero que se perdía.

Mi padre era uno de los más grandes empresarios, del la industria de mueblería, el mejor diseñador, con la marca Valcobi, se podría decir que todos los muebles que adornaban las grandes casas, de famosos, políticos, restaurantes, entre otras, habían sido creadas gracias a su empresa, sin embargo esta venía en picada, y buscaba la forma de tapar los hoyos y que nadie lo notara.

Necesitaba ayuda, necesita crear vínculos con mayores empresas, y fuente de economía suficiente para volver a surgir, y pagar sus deudas...y es aquí donde El padre de Santiago, el Sr.Pascuali entraba en juego.

El Sr.Pascuali no sólo era el dueño de la industria hotelera más grande el mundo, si no también un gran inversionista, que apostaba a grandes proyectos exitosos y ayudaba a grandes empresas a continuar de pie, el había conseguido grandes ingresos cuando apostó por la red social Facebook, incluso estuvo involucrado también en otras redes sociales como Youtube, que hoy día sigue en marcha y muchas otras que perdieron popularidad con el tiempo sin embargo en su momento trajo varía cantidad de beneficios económicos. Sin duda alguna, una gran figura con el que todos desearías codearse.