"No Pretendo Que Me Quieras"

XXIX

Llegaba con cara de pocos amigos, estaba tan estresada, con enojo, tenía de todo, perder casi 100 millones de pesos no era poco dinero. Empezaba a dudar de mis empleados, mi contador contrastaba mis balances, cuadraban, por otro lado, el administrador tenía igual la responsable de que también hiciera uno, sus balances marcaban otra cifra, dónde su área una suma de dinero equivalente a lo que faltaba. Mientras mandaba a Héctor y su equipo a averiguar sobre ese dinero, un equipo iba a la mansión a dejarme. Aún traía conmigo aquella botella de vino, para nada la había abierto, sentía que si destapaba ese delicado y fino vino, se echaría a perder. Entré directo a la cocina para dejarlo en el frigorífico, tomé un poco de zumo de naranja, el cuál acompañé con una tostada y le puse mermelada de fresa.
Ya casi nadie estaba por ahí rondando, los labores de la casa terminaban 8:30pm. Dejé limpio todo lo que había usado, subí directamente a la habitación que Karla usaba, la principal, mi antigua habitación.
Toqué la puerta y abrí.

—Hey, ¿Aún despierta?. _ Pregunté.

—Si, habías dicho que querías pasar tiempo con el bebé así que te esperamos. —"Esperamos" fue aquella palabra mágica que hizo que mi corazón se ablandara.

—Siento el retraso, estuve ocupada arreglando las cosas en la empresa. — Llegué a la enorme cama y senté del lado derecho que estaba desocupado.

—¿Cómo te fue con eso? Digo, solo si quieres compartirlo conmigo. _ Preguntó Karla, el cuál asistí, ella estaba recostada a la cabecera de la cama, mientras yo iba alzando su blusa para dejar al descubierto a mi hija.

—Todo es complicado, antes de no estar al pendiente de la empresa, unas semanas antes había notado en los balances que no concordaban los números, cuando decidí regresar me cayeron de nuevos los balances, dónde se estipulaba que habían desaparecido cien millones de pesos. _Mencioné, solo le miré de reojo y vi que su cara estaba algo asombrada. Yo le daba caricias a la bebé y besitos, ella empezó a moverse. —Pronto estarás con mamá y con mami.

—Es mucho dinero. —Asentí.

—No es que me afecte ese dinero a mi cuenta, sólo que, me están traicionando, la traiciones se pagan demasiado caras cuando me la hacen.

—¿Aún no saben quién es el responsable?.—Negué.

—Héctor y sus hombres están tratando de buscar lazos del presunto traidor. —Iba a seguir explicándole cuando me entró una llamada.

Era mi pequeña hermana.

—Hola Honey- miré la cara de Karla un poco ¿Celosa?.—No cariño, no eres inoportuna. - reí por el comentario de mi hermana — Estoy con mi esposa y la bebé... Aún no nace, quizás en estos días pueda nacer mi hija. –Karla se le miraba la cara de intriga de saber quién es. —Si dime, sabes que puedes decirme y yo siempre te voy a consentir..... Está bien,le diré a Héctor que te lo haga llegar a tu cuenta...No es nada Honey, eres mi hermanita y sabes que yo siempre te daré todo, vale, cuidate, bye.

—Me dió gusto que pudieras hacerte un tiempo para que pudiera estar con la bebé, así que bueno, iré a la habitación de a lado, si necesitas algo estaré cerca. Hasta mañana Karla. –Me acerqué por última vez a su barriga y le di un beso. —Hasta mañana pequeña princesita, te amo mucho.

***

En ese, solo en ese momento Karla se dio cuenta que Caroline hablaba enserio cuando le dijo que, la trataría cómo la madre de su bebé. De cierto modo, Caroline tenía sentimientos hacia ella, pero solo porque ella le daría a su segunda hija.
En la habitación de a lado, Caroline estaba dándose una ducha, ella no usaba el agua caliente, rara la vez que ese suceso pasaba.
Al salir sólo se colocó el pantalón de un pijama azul, sin bóxer, un top negro y se acostó, ya pronto iban a dar las 11 pm.
Despertó a las 8 de la mañana, tenía una erección matinal, se dirigió al baño, alzó la tapa del inodoro, empezó a orinar, al terminar limpió su miembro, limpio las gotas del líquido esparcidos por todo el inodoro.