La Quinta Shelby: Secretos y Mentiras

Perdida.

POV'S MATTHEO.

Definitivamente estaba muerto, nada me iba a salvar de esta.

Entré nervioso al pasillo de habitaciones familiares.

Todo por consentir a esa chaneke, seguramente me quedaría sin auto o aún peor, me iban a desheredar, ¿En qué carajo estaba pensando?

<<En la rubia que se te atravesó>> Respondió mi subconsciente.

Abrí la puerta de nuestra habitación y Lizzie se acercó.

-Qué bueno que por fin llegaron, tienen suerte que su padre aún no lo hace, ¿Dónde está Lilith? Tiene que cambiarse.

-Hay un pequeño problema –Confesé.

-¿Qué clase de problema? –Preguntó Tom al tiempo que bajaba el libro que leía.

-Perdí a Lilith.

-Estás muerto –Siguió Azael.

Miré a Lizzie y parecía que su cerebro estaba trabajando a máxima velocidad.

-Aún faltan tres horas para que el evento empiece, por lo que tenemos cerca de cinco horas para su presentación, seguramente llegara a tiempo.

-Olvidas un pequeño inconveniente –Dijo Tom –Lilith jamás había estado en Liverpool, no conoce las calles y jamás le dijimos donde sería el evento.

-Okey eso lo complica mucho –Siguió Lizzie –Bien, yo sé que podremos encontrarla, hasta entonces, su padre no puede enterarse de esto.

-¿De qué no me puedo enterar?

Si, definitivamente estaba muerto.

-El irresponsable perdió a tu bebé –Confesó rápidamente la abuela de Charles.

Maldita vieja, metiche.

-¿Qué? –Preguntó mi padre.

-Mattheo llevo a Lilith a pasear, pero solo regresó él –Aclaró Grace.

-Marcus –Masculló mi padre.

-Calumnias, esas mujeres entendieron mal –Comencé –Yo solo dije que Lilith encontró a sus amigas en el centro comercial y me pidió recogerla más tarde.

-¿A sí?

-Sí.

-Bien, te daré el beneficio de la duda y tienes dos horas para traerla de regreso o habrá consecuencias graves, ustedes dos –Señaló a mis hermanos –Más les vale quedarse donde pueda verlos en las siguientes dos horas.

Salí de la habitación y solo pedía encontrarla pronto.

Por favor, Dios, sí me ayudas a encontrarla prometo ir a la iglesia un mes entero y darle dinero a Linda para una misión.

POV'S LILITH.

Una hora antes.

-¿Qué pasa? Te vez "awitada" –Me dijo Mattheo cuando llegamos al restaurante en el que almorzaríamos.

-Veo que tu mexicano va mejorando –Bromee.

-Ya en serio, ¿Qué tienes?

-Estoy un poco nerviosa por mi presentación de hoy.

-¿Tu? ¿Nerviosa por cantar? ¿Qué sigue, yo con pareja estable?

-Idiota.

-¿Por qué no damos un paseo por la ciudad solo tú y yo para que despejes tu mente?

-¿De verdad?

-Sí, además ¿Qué mejor que conocer la ciudad con tu hermano favorito?

-Está bien, acepto.

-Perfecto, le avisaré a los chicos.

Asentí y fue con ellos.

Al final Lizzie solo nos pidió estar al menos una hora antes para que pudiera cambiarme y al final del almuerzo, Mattheo me llevo a los puertos e inclusive me explico algunas cosas relacionadas al negocio familiar.

Seguimos caminando y tal como si fuera una niña pequeña, entramos a una heladería y me pidió un helado de chocolate.

Caminamos por algunas calles y nos sentamos en la banca de un pequeño parque.

-¿Ya estás menos nerviosa?

-Sí, gracias.

Seguimos disfrutando de nuestra compañía y él me contó muchas historias de sus aventuras, como la vez que accidentalmente terminó en un barco pesquero a causa de una borrachera o cuando una vez tuvo que caminar vestido de sirena por todo un puerto ya que perdió una apuesta contra Azael.

-Mattheo.

-Sí.

-¿Por qué no quieres una relación seria?

-Tengo mommy issues, no esperes mucho de mí, prefiero ser de todas a ser como Azael y encapricharme solo con una.

-¿En serio no hay nadie que te haga cambiar de opinión?

-Solo hubo una –Confesó con melancolía –Pero la enterré cuando tenía diez.

-Mi madre...

-Nuestra, por Dios Lilith, comparte no seas egoísta.

Aquel comentario me hizo reír y me abrazó.

-Gracias hermano.

-De nada pequeña, por cierto, sé que me vas a odiar pero en serio quiero saber el nombre de aquella rubia.

-Mattheo.

-Será rápido, lo prometo, luego nos iremos ¿Sí?

-Está bien –Resoplé y él sonrió.

Se levantó de la banca y yo comencé a divagar en mis pensamientos y tal como si fuera una revelación astral, pensé en las canciones que presentaría.

Me terminé el helado y me levanté para tirar la servilleta, sin embargo, cuando regresé a la banca ya no vi a Mattheo por ninguna parte, pero a lo lejos reconocí su abrigo y tuve que apresurarme para alcanzarlo.

-¿A caso querías dejarme? –Dije cuando le di la vuelta a aquella persona, pero me llevé una gran sorpresa.

-¿Disculpa? –Preguntó aquel hombre que claramente no era mi hermano –Loca –Pronunció y se zafó de mi agarre.

Quise regresar a la banca, pero no me había dado cuenta de que me había alejado mucho, ¿Qué camino debía tomar?

Carajo, estaba perdida.

POV'S MATTHEO.

-Resulta que la chica era camarera, pero ahora tengo cupones –Dije al aire ya que mi hermana no estaba donde la dejé.

Mire a los alrededores, pero no aparecía.

Caminé un poco por el parque y nada, comencé a preocuparme y realmente esperaba que todo fuera una broma por parte de ella.