In The Bleak Midwinter.

395 51 4
                                    

POV'S AZAEL.

Me sentía el hombre más feliz al saber que tenía una oportunidad con Moony, estaba listo para iniciar un nuevo capítulo en mi vida y decidí que no me daría por vencido.

Fui a un bar para celebrar y pedí algunas cervezas.

-¿Billy? –Llamé a mi primo y me impresioné al saber que no me había equivocado.

-Azael, ¿Qué haces aquí?

-Creo que puedo preguntar lo mismo.

-Estoy aquí con mi amigo, Kristin.

-Mucho gusto –Me saludó el otro chico.

-Lo mismo digo.

-Vinimos a tomar unos tragos, ¿Nos acompañas? –Preguntó mi primo y acepté.

Aunque Billy y yo éramos de la edad, rara vez llegamos a convivir, inclusive me atrevía a decir que él era lo opuesto a mí, a excepción del físico.

-Espera, ¿Eres alemán? –Le pregunté a Kristin cuando lo mencionó y asintió -¿Irás pronto?

-Me voy en un par de días, mamá me mataría si no estoy allá en año nuevo.

-Sé que nos acabamos de conocer, pero ¿Te molestaría entregar una carta por mí?

-Para nada, ¿A dónde debo llevarla?

-No tengo ni idea, pero conseguiré la dirección antes de que te vayas.

-Perfecto.

-Gracias –Sonreí y seguí bebiendo con ellos.

Unas horas más tarde y después de varios tragos, ayudé a Kristin a llevar a Billy a su habitación de hotel.

-Toma –El alemán me lanzó una llave –Quédate en mi habitación, yo me quedaré con Billy para cuidar que no se ahogue.

-Está bien –Los dejé solos y caminé a la otra puerta.

Una vez que entré caí en cuenta de que había sido muy tonto de mi parte haber salido de mi casa sin siquiera otro cambio de ropa, agradecí que al menos no fue tan descuidado y traje mi billetera.

Me dejé caer en la cama del hotel y quizá era por lo ebrio, pero seguía con la sensación de felicidad en mi pecho.

No pude quedarme acostado mucho tiempo ya que me levanté de la cama y luego comencé a buscar una hoja y pluma por toda la habitación.

En cuanto encontré las cosas necesarias me dispuse a escribir una carta para nadie más que para Moony.

Por la mañana varios golpes en mi puerta me hicieron abrir un tanto irritado y me sorprendí de encontrar a Tom del otro lado.

-Debemos irnos –Fue lo primero que dijo.

-¿De qué hablas?

-Hablo de que no tenemos tiempo, ya desperté también a Billy, cámbiate y baja.

-No tengo otra ropa.

-Entonces vámonos ya.

-Voy por mi abrigo.

Tomé mis cosas y bajé al lobby dónde también se encontraban Anastasia y Emily.

-Viajarás con nosotros –Informó mi hermano -Karl, Bradley, Billy y su amigo, irán en otro auto.

-¿Qué pasa Tom? ¿Por qué estás tan alterado?

Me tomó del brazo y me apartó un poco del resto.

-Emboscaron al tío John y su familia.

La Quinta Shelby: Secretos y MentirasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora