Futuro Incierto.

429 69 28
                                    

POV'S LILITH.

Por fin era lunes, para llegar a casa tuvimos que usar una silla de ruedas ya que papá seguía de paranoico.

-Al fin, ya estás aquí –Dijo Mattheo desde las escaleras y corrió para abrazarme -¿Qué tal el viaje?

-Un poco incómodo, el pie me sigue doliendo.

-Bueno, pero ya estás aquí y mira qué bonita silla tienes.

-Larissa, asegúrate de que Mattheo no conduzca la silla –Sentenció papá.

-Por supuesto señor.

-Vamos papá, yo solo quiero dar un paseo con mi hermana por una colina.

-¿Dónde está tu hermano?

-En tu oficina.

-Bien, Larissa lleva a Lilith a la sala principal, hablaré con Tom antes de que llegue el doctor Lodge y el fisioterapeuta.

-Por supuesto señor.

Ella avanzó conmigo y Mattheo me ayudó con las puertas.

-¿Cuánto tiempo crees estar así? –Me preguntó mi hermano.

-Espero que no mucho, mi abuelo viajo a Londres, dijo que me iba a comprar algo para mi pronta recuperación.

-¿Tu abuelo vendrá?

-Se quedará un par de días en la casa, por cierto ¿Y Grace? Me sorprende no haber recibido su calurosa bienvenida.

-No tengo ni idea, Aldolf dijo que ella había salido, pero no dijo a donde.

-Bueno.

Pasó media hora antes de que papá entrara con mi abuelo, el doctor Lodge y otro joven.

Mi abuelo me saludó y luego se sentó a mi lado, los demás también tomaron asiento y papá ordenó que nos llevaran algo de comer.

-Señor Shelby –Comenzó el doctor –Él es James Piterson, tiene 25 años y a pesar de que apenas lleva dos años ejerciendo le aseguro que es uno de los mejores, inclusive ha atendido lesiones de atletas olímpicos.

-Señor Shelby, es un honor trabajar para usted, verá que ayudaré a que su hija se recupere pronto.

La verdad era que el chico era muy atractivo, era alto, con piel bronceada, ojos verdes y cabello de color rubio caramelo, además se veía que hacía ejercicio.

James le presentó a papá el programa que usaría conmigo, él prometía hacerme caminar en tres semanas todo gracias a la hidroterapia en la alberca y también fisioterapia convencional.

-Obviamente también cambiaremos su alimentación, pero solo un poco –Terminó James.

-¿Está seguro de que ella caminará pronto? –Lo cuestionó mi abuelo.

-Con mi terapia y las vendas que usted ha conseguido le aseguro que así será.

-Está bien, que así sea –Dijo papá mientras firmaba algunos acuerdos.

-De ser posible me gustaría examinarla –Pidió James y papá aceptó.

Honestamente fue un poco incómodo estar en una habitación con papá, el abuelo y Mattheo vigilando todo, sentí que en cualquier momento se abalanzarían sobre mi nuevo doctor.

-Bien Lilith, comenzaré el vendaje ¿De acuerdo?

-Sí.

Tomó mi pie y no miento cuando digo que tenía manos muy suaves.

-Listo, por hoy dejaremos descansar a tu tobillo, pero mañana comenzaras a pisar.

-Está bien.

Luego de eso, papá ordenó que le mostraran la casa, James viviría con nosotros el tiempo de mi recuperación.

Terminé muy agotada así que tomé una siesta en los sillones y al despertar mi abuelo estaba a mi lado durmiendo.

-¿Lograste descansar pequeña?

-Si abuelo, gracias.

-Por cierto, llegaron tus calificaciones.

-¿En serio? –Me levanté y él me ayudó a sentarme -¿Ya las vieron?

-Espero que no te moleste, pero yo sí –De la mesa tomó una hoja y me la extendió –Mereces un premio, excelencia en todo.

-Y eso que no entré a varias clases.

-Eres astuta, a veces eso es lo que más ayuda.

-¿Qué hora es? Ya se ve oscuro.

-Son las 07:30, ¿Tienes hambre?

-Un poco, sí.

-Tu padre dijo que cenaríamos a las 08:00, así que falta poco.

-¿Y mis hermanos?

-El mayor se encerró en la oficina con tu padre, el otro creo que salió a montar.

-Ya veo.

-Lilith.

-¿Sí?

-¿Dejarías de quererme?

-¿A qué viene eso?

-Bueno, pues, en tu infancia no estuve muy presente.

-Eso está en el pasado, lo importante es el presente ¿No crees?

-Pero...

-En serio te amo abuelo, eres una persona increíble y desde siempre te he admirado, cuando estaba en mexico a veces creía que nunca te vería de nuevo, recuerdo que una vez hablaron de ti en la radio y yo me emocioné, eres uno de mis ejemplos a seguir y en serio adoro tener tu heterocromía.

-¿Lo dices en serio?

-Por supuesto –Lo abracé y él correspondió.

-¿Te puedo pedir algo?

-¿Qué cosa?

-Por favor nunca dejes de quererme –Se separó y tomó mi rostro entre sus manos –Sé que no lo digo muy seguido pero en serio eres mi mundo Lilith, para mi tú significas una segunda oportunidad, te amo y te prometo que he mejorado a como era en el pasado y sobre todo, prometo que te apoyaré en todo lo que decidas.

Gellert era una persona fría, eso lo sabía desde siempre, pero está vez vi algo que no creí que existiera dentro de él, miedo.

POV'S DRACO,

-¿Eso es lo que presentarás? –Escuché detrás de mí.

-¿Qué haces aquí? –Le pregunté a Regulus.

-Las cosas se están poniendo muy pesadas allá abajo.

-Desde que Voldemort mandó los mensajes mi casa volvió a ser casa club –Mascullé.

Tomé un trapo para limpiarme las manos y también me serví un trago de whisky.

-Creí que no ibas a presentar nada –Comentó mientras veía mi pintura recién terminada -¿De dónde te inspiraste?

-¿Por qué?

-Porque tu pintura me recuerda a Lilith.

-¿Qué?

-Si no fuera porque se la pasan peleando te aseguro que creería que fue hecha para ella.

-Grindelwald es muy ruidosa, caprichosa, escandalosa; definitivamente mi pintura no refleja eso.

-Tienes razón, tu obra transmite mucha calma, pero ¿Eso es agua?

-Sí.

-¿Y los colores?

-Dualidad, mar y tierra, contradicciones.

-Interesante.

-Chicos –Entró Arón y se veía agitado –Es hora.

Tragué duro y asentí, Regulus se aclaró la garganta y se le veía nervioso y Arón a pesar de que quería disimularlo, tenía miedo.

Tres antiguas familias, tres herederos sin opción y un futuro incierto.

La Quinta Shelby: Secretos y MentirasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora