Día De La Familia Parte 2.

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POV'S LILITH.

¿Alguna vez han sentido que no son suficientes para su familia?

Bueno, así me sentía mientras veía a los "Adultos" llegar.

Durante varias semanas Tom y Charles me han hecho saber que ser una Shelby no es nada sencillo, ya que nuestra familia tiene la capacidad de ser el centro de atención, pero a la vez estar entre las sombras.

Es por ello que luego de haber ensayado una presentación para este día, ahora mismo me siento patética, mis hermanos ponen en alto el apellido destacando en cosas intelectuales y claramente Mattheo es el deportista, pero ¿Qué hago yo? Solo bailar y cantar como una "bufona".

- ¿Estás bien? –Me preguntó Azael.

-Sí.

Seis adultos se acercaron a nuestra mesa y todos nos pusimos de pie y nos saludamos.

-Papá, te presento a Kira.

Ante aquel comentario pude notar cierto descontento en mi padre, pero él como todo un caballero saludó a Kira.

Pronto comenzaron a servir la comida y a pesar de que los temas de conversación comenzaron a surgir yo realmente me sentía fuera de lugar y opté por quedarme callada.

-Espero que todos estén disfrutando de este grato de día –Comenzó la profesora McGonagall –A continuación, daremos inicio a las presentaciones que los chicos de intercambio han preparado para todos nosotros.

Bajó del escenario y poco a poco cada presentación fue recibida por las miles de familias que había presentes.

Los comentarios burlescos hechos por los Parkinson no se hicieron esperar, haciendo que cada vez me pusiera más nerviosa y sin darme cuenta comencé a mover mi pierna desesperadamente.

Azael se levantó llamando la atención de todos, pero lo extraño fue que me extendió la mano.

-Por favor discúlpenos, pero necesito que mi hermana me acompañe un momento.

Sin pensarlo tomé su mano y ambos caminamos lejos de la aquella "fiesta", caminamos en silencio un buen rato hasta que llegamos a la fuente en la que alguna vez aventó a Cedric.

Nos sentamos en la orilla y me sonrió.

- ¿Qué hacemos aquí? –Pregunté.

-Despejamos tu mente –Respondió con una sonrisa - ¿Qué tienes chaneke?

-Ya le estoy tomando un amor odio a ese apodo.

-Vamos, dime.

-Tengo miedo de decepcionar a papá –Confesé –A la familia en general.

-Si te sirve de consuelo, en cuanto papá vea mi tatuaje probablemente me vaya a desheredar.

- ¿Te tatuaste? ¿Dónde carajo has estado?

-El punto aquí es que tú no puedes decepcionar a la familia, ese puesto es mío.

-Azael...

-Habló en serio, para empezar, soy el de en medio, prácticamente soy el más enfermo mentalmente y para colmo me cambié de carrera a mitad de una, no creo que papá se desilusione de ti tan fácil.

-Sé sincero conmigo, ¿Solo soy una cara bonita que sabe entretener?

- ¿A qué te refieres?

-A que últimamente me han dado entender que solo sirvo para bailar y cantar como si de una bufona se tratara.

- ¿Y? ¿Qué más da si es así?

-Pues que no aporto nada productivo.

-Siento que te estás presionando mucho, aún no cumples ni la mayoría de edad, créeme aún tienes demasiado tiempo para ser productiva.

- ¿Pero no avergüenzo así a la familia? ¿No bajo su prestigio?

-Yo diría que lo subes, la familia jamás había tenido una artista, pero desde que llegaste tú haces que los reflectores se centren en los Shelby, eres nuestra estrella –Me abrazó y las ganas de llorar me invadieron –Y eres la estrella más brillante, además tu amas esto, disfrútalo lo más que puedas ¿Sí? –Asentí aún en su pecho y luego rompimos el abrazo, me acomodo el cabello y se puso de pie para luego ofrecerme su mano –Sea lo que sea que vayas a hacer, hazlo con amor.

-Eso es lo que decía mamá.

-Con mayor razón debemos seguir ese consejo ¿No crees?

-Te extrañé mucho hermano.

-Y yo a ti, mi chaneke.

Reí y ambos volvimos a la mesa.

POV'S AZAEL.

- ¿Todo bien? –Me preguntó Kira.

-Sí, nada de qué preocuparse, ¿Qué hay de ti? ¿Cómo te trata la alta sociedad?

-Imbécil.

Reí ante su respuesta y seguimos comiendo y de vez en cuando opinando en los diversos temas de conversación.

-Y dinos Azael, ¿Dónde te habías metido? –Preguntó Grace.

-En donde tú no sabes, sus propios asuntos –Dijo Lilith mientras inocentemente cortaba un pedazo de pastel.

La señora Malfoy y la señora Parkinson no supieron disimular las sonrisas al notar que Grace realmente no tiene peso en la familia.

-Parece ser que la señora Shelby no recibe el debido respeto –Comentó el señor Parkinson.

-Es que ella no se encuentra aquí –Respondió Tom –Nuestra tía Polly no pudo venir.

-Esa es la gran cualidad de mi madre, no tiene el apellido, pero tiene el respeto de una Shelby.

Grace sonrió y apretó la mano de su hijo por encima de la mesa.

-A continuación, alumnos de nuestra propia escuela tendrán una presentación que prepararon con mucho esmero –Anunció McGonagall y mi hermana se tensó.

POV'S LILITH.

Cuando planeé aquella presentación realmente estaba emocionada, pero anoche cambié de opinión y a pesar de que Blaise y Theo me dijeron que podía unirme a ellos si cambiaba de opinión, no sé si seré capaz de hacerlo.

Miré atentamente como se colocaban en sus lugares y la presentación comenzó.

Theo comenzó impresionando a todos y Blaise no tardó en unirse.

-Hora de brillar –Me susurró Azael.

A la mierda todo, yo podía hacer lo que quisiera.

Me levanté de mi asiento y caminé hasta llegar al centro justo a tiempo para el coro y rápidamente el staff me dio un micrófono.

POV'S THOMAS.

Negocios y presunción es lo único que este tipo de festivales escolares provoca.

Luego de la partida de May no había vuelto a asistir, la única que venía era Grace por Charles, hasta que Tom un fin de semana entró a mi oficina y me dijo que era el primer festival de Lilith y que lo hiciera al menos por ella.

Es así que terminé en un lugar con demasiada gente para mi gusto y en una mesa donde el tema principal era los eventos próximos al verano.

Azael nuevamente me sorprendió que sabía que me rendiría cuentas en la casa.

Yo realmente no estaba ahí con intenciones de socializar y por ello me mantuve siempre al margen, hasta que mi hija se levantó a cantar y la imagen de su madre volvió a mí.

May solía cantar en la mayoría de las reuniones que organizábamos, su voz y su habilidad en el piano la hacían única y a decir verdad siempre admiré el hecho de que el arte la hiciera resaltar por encima de todos los demás.

Mi pequeña era como su madre y estaba muy agradecido por ello.

La Quinta Shelby: Secretos y MentirasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora