Sapos.

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POV'S EMILY.

-¿Qué quieres que te traiga de Londres? -Me preguntó Tom mientras se abrochaba la camisa -¿Vestidos nuevos? ¿Quizá zapatos? ¿Alguna joya?

-No necesito nada de eso, solo a ti -Respondí y él rodó los ojos, yo sabía que él odiaba que yo hiciera algún comentario afectuoso -Aunque unos nuevos pendientes no me vendrían nada mal.

-Perfecto, entonces eso te traeré.

-Tom.

-¿Sí?

-Espero que tengas un buen viaje.

Él no respondió y simplemente asintió, terminó de ponerse el abrigo y salió de la habitación del hotel que últimamente habíamos estado alquilando.

Suspiré y me dejé caer en la cama, en definitiva, la extraña relación que teníamos comenzaba a agotarme mentalmente, ni siquiera sabía con exactitud que éramos, ya que a veces era cariñoso, pero a los segundos podía convertirse en el hombre más frío del mundo.

Me levanté y comencé a vestirme nuevamente, luego salí de aquel hotel y me dirigí a casa.

Entré en silencio ya que sabía que era un poco tarde y no quería que Polly, Aberama o Bonnie sospecharan algo.

-Emily, ven acá -Me habló Polly respiré hondo antes de acercarme.

-¿Sí?

Sin previo aviso, tomó mi mano y olfateó mi antebrazo, para luego tocar mi cadera.

-Espero que te estés cuidando.

-¿Qué?

-Y admito que me siento algo ofendida, luego de tanto tiempo juntas creí que ya habíamos generado un vínculo de confianza.

-No estoy entendiendo.

-No me importa con quién perdiste tu virginidad, pero más te vale cuidarte, no estás en posición de embarazarte, ¿Sabes que hacer, cierto?

Su declaración me dejó completamente impactada.

-¿Cómo lo...?

-Soy gitana, veo más allá de lo que son las cosas, pero responde ¿Te estás cuidando?

-Creo que sí.

-¿Crees?

-Bueno, él no quiere hijos, dudo que haga algo para tenerlos.

-Emily -Tomó mi mano nuevamente y me hizo sentarme a su lado -¿Sabes cómo cuidarte?

-No realmente, es decir, con mi madre jamás me atrevería a hablar de algo así y en la escuela tampoco nos enseñaron mucho acerca del tema.

-Bien, entonces yo te enseñaré.

-¿En serio?

-Sí, no puedes arriesgarte a confiar en un hombre, ellos pueden olvidarse de todo cuando piensan con su segunda cabeza, además nunca está de más ser prevenida.

-De acuerdo.

Polly pronto me explicó muchas cosas de las que yo no era consciente y que en muchas ocasiones ni siquiera se me ocurrió pensar en ellas.

Estuve atenta a todo lo que me dijo y en el interior le agradecí el hecho no me preguntara con quién era que me estaba metiendo, aunque para ser sincera, no me habría atrevido a confesarle la verdad.

POV'S LILITH.

Despedí a Tom con un abrazo y le pedí cuidarse, ya que viajaría a Londres a dejar las propuestas que la tía Ada y yo habíamos estado trabajando para las nuevas reformas de los sindicatos, así mismo, estaba muy emocionada ya que por primera vez sentía que había contribuido con algo importante.

La Quinta Shelby: Secretos y MentirasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora