La Quinta Shelby: Secretos y Mentiras

El Cumpleaños De Thomas.

POV'S THOMAS.

Era miércoles por la tarde y me encontraba en mi oficina de Birmingham, había muchas cosas que resolver y me encontraba un tanto ansioso, el Derby de Epson sería el 6 junio, en menos de dos semanas.

Confiaba en que Tom había hecho un buen trabajo ya que el señor Brennan agregó en sus reportes varias felicitaciones a la buena administración que en poco tiempo mi hijo había logrado.

Miré una vez más mi agenda y leí los eventos marcados como IMPORTANTES.

*28 de mayo – Final de Lilith.

*2 de junio – Final de Mattheo.

*16 de julio – Graduación de Tom y Charles.

*23 de julio – Azael regresa por verano.

Sabía que si quería disfrutar las siguientes cosas debía tener el terreno limpio, así que con un poco más de motivación seguí creando el plan perfecto.

Luego de dos horas y media botella de whisky me sentía desesperado al no saber cómo lograr mi última jugada.

-Señor Shelby –Me llamó Daisy, mi asistente.

-No estoy para nadie, los regalos deben ir a caridad y recuerda mandar agradecimientos a las personas que los mandaron y de igual modo regresar una a las tarjetas.

-¿Y cómo regresas una hija? –Aquella voz me hizo levantar la mirada y mi hija me recibió con una gran sonrisa.

-Lo siento señor Shelby, la señorita Grindelwald es muy insistente –Se disculpó Daisy.

-Está bien.

-¿Gusta una taza de té señorita?

-Que sea de melisa por favor –Pidió mi hija y mi asistente salió en busca de una.

-Primero que nada, ¿Quieres explicarme cómo es que lograste estar fuera de la escuela entre semana?

-Hoy es el día Austriaco, así que solo puedo decir que tuve suerte.

-Ya lo creo.

-Sabes porque estoy aquí ¿Cierto?

-Quisiera decir que no, pero sí.

-Feliz cumpleaños papá –Se acercó y me rodeó en un abrazo.

Muchas veces la había abrazado, pero hace mucho tiempo que no recibía un abrazo de cumpleaños por parte de ella y se sentía realmente extraño y a la vez doloroso.

-Creí que tus hermanos te lo dirían –Comenté al separarnos –Yo no...

-Celebras tu cumpleaños, si lo sé, pero en serio me gustaría pasar el día contigo, ¿Sí?

-Hija yo...

-Por favor –Pidió con ojos suplicantes.

-Eso es manipulación.

-¿Y está funcionando?

-¿Qué planes tienes?

-Me apetece un recorrido en bote ¿Qué te parece?

-Fuiste primero con Charlie, ¿No es así? –Ella asintió –Bien, solo espera un poco, iré por mi abrigo.

Guardé mis cosas y pronto me encontraba saliendo de la oficina con ella a mi lado.

-Señorita, su té.

-En realidad era para ti –Respondió mi hija –Seguramente trabajar con mi padre no es cosa fácil y la melisa ayuda al estrés.