Alycia apenas pegó ojo ese día, era la primera vez que discutía con Franco, había peleado muchas veces con Óscar, algunas con Juan, pero Franco al igual que Libia era con los que más unidos estaba, los que mejor la comprendían, nunca había peleado con ellos, y en una noche se habían gritado y causado más dolor que en toda una vida. Alycia no había podido dejar de llorar en toda la noche.
Alycia no sabía si Franco había ido a la casa a dormir, por ello no salió en toda la noche de la habitación, por miedo a encontrarlo, no tenía ni fuerzas ni ganas de seguir discutiendo.
Por la mañana Alycia salió de la habitación, era casi media mañana, pero quería evitar a su hermano el mayor tiempo posible, aparte de que tampoco tenía trabajo ni nada mejor que hacer. Se sorprendió al ver en la sala a Jimena
-¿Qué ocurre? -preguntó al ver una maleta en la sala
-Jimena va a vivir a partir de hoy con nosotros -dijo Óscar-. ¿Podemos hablar un momento a solas? -Óscar la agarró y la apartó de los demás-. ¿Nos dejarías tu habitación? Doña Gabriela la ha echado y va a vivir con nosotros, pero en mi habitación está Juan y Franco, si pudieras irte con ellos...
-Deja que saque mis cosas -dijo Alycia volviendo a entrar en su habitación
Una vez a solas, Alycia respiró hondo, no le importaba dormir con sus hermanos, pero sabía que ahora estaría más controlada, Juan sabría a las horas que llegaba, aparte de tener que dormir en la misma habitación que Franco tal y como estaban las cosas entre ellos. Comenzó a sacar todas sus cosas y a llevarlas encima de la cama que fue de Óscar
-No quería echarte de tu habitación... -dijo Jimena apenada
-No me importa, además lo normal es que el matrimonio quiera tener una habitación para ellos solos -Alycia soltó las cosas y miró a Jimena-. ¿Estás segura de lo que estás haciendo? Has dejado las comodidades de tu hogar por esto
-Es un gran cambio, y necesitaré tiempo para acostumbrarme, pero ahora mismo lo único que quiero es estar con Óscar
-Si necesitas cualquier cosa, ya sabes donde encontrarme -dijo Alycia apretando su mano cariñosamente, cogió sus cosas y las acomodó en la que iba a ser su nuevo hogar.
***
Alycia fue antes a trabajar, le faltaba una hora para empezar, pero había intentado en vano que su jefe la contratara también por las tardes, pero no había presupuesto para poder pagarle tantas horas. De algún modo Alycia tendría que encontrar otro trabajo, cada vez eran más en la casa, necesitaba ayudar a sus hermanos con los ingresos y encontrar algún lugar donde vivir, la convivencia con Franco era insostenible.
-Aly, llegas temprano -dijo una de las camareras mientras acomodaba las bebidas
-Lo sé, pero tenía que salir de mi casa -comentó Alycia-, pensé en ensayar mientras
-Hay alguien que te busca -dijo señalando con la cabeza a una mujer sentada en una mesa
Alycia se giró para mirar en la dirección en la que su compañera le había indicado, allí sentada vio a una mujer mayor con varias joyas y vestida con ropas elegantes, su peinado era atrevido, con el pelo rubio platino, muy excéntrico, Alycia no necesitaba preguntar quién era, su reputación era muy conocida: Eduvina Trueba. Aquella mujer se había ganado una no muy buena reputación al cortejar a jóvenes, al parecer era del tipo de persona que pensaba que podía conseguir cualquier cosa gracias a su dinero.
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Pasión de Gavilanes
FanfictionLos Reyes, Juan, Oscar, Franco y Alycia tras la muerte de su hermana Libia deciden ir a ajustar cuentas con las últimas personas que vieron a su hermana con vida, y las culpables de que ésta se suicidase, los Elizondo. Lo que nadie iba a imaginar es...