Capítulo 50

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Las hermanas Elizondo habían conseguido convencer a Jimena de que dejara la hacienda Elizondo y se fuera con Óscar, ya que no merecía la pena perder al hombre que amaba por orgullo. Jimena pareció entrar en razón, pues recogió todas sus cosas y dejó que Sara la llevara a la hacienda de los Reyes.

Sara vio como Lena desaparecía escaleras arriba, suponía que iba a avisar a Alycia, como muchas otras veces hacía cuando ella llegaba, pero por más que esperó, Alycia no bajó.

-¿Por qué no quieres bajar? -preguntó Lena

-Porque si bajo ahora voy a discutir con ella. Este momento es de felicidad, Jimena se ha decidido a venir a vivir con Óscar, no quiero que nada empañe esa felicidad

-¿Por qué ibas a discutir con Sara?

-No importa, por favor, Lena, baja y disfruta de la bienvenida de Jimena

-Pero...

-Estoy bien -le aseguró Alycia.

Lena bajó la escalera, tanto Franco como Sara miraron hacia ella, los demás estaban celebrando la llegada de Jimena.

-¿Y Aly? -preguntó Franco

-Está dormida ya -mintió Lena

-¿Tan temprano? -preguntó Franco extrañado-. ¿Se encuentra bien?

-Sí, ha sido un día largo -dijo Lena-. Ven, vamos con los demás -empujó a Franco para que no le hiciera más preguntas que no podía responder en ese momento

Sara miró las escaleras, estuvo tentada a subir y buscar a Alycia, pero no quería ser grosera, ya que no era su casa y era evidente que Alycia no deseaba verla. ¿Y si había pasado algo entre Rosario y ella y ahora quería romper su relación? ¿Y si tenía dudas y por eso la evitaba?

***

Los Reyes habían montado una gran fiesta de bienvenida a Jimena, habían corrido la voz e invitado a muchas personas, todos lo sentían como si fuera la fiesta de boda que Jimena y Óscar nunca tuvieron.

Sara estaba inquieta, no había podido dormir la noche anterior, cada vez que cerraba los ojos se imaginaba a Rosario y Alycia juntas y hacía que tuviera ganas de llorar y vomitar al mismo tiempo. ¿Qué pasaría si Alycia había invitado a Rosario a la fiesta? ¿Y si cuando la viera rompía con ella? Odiaba sentirse así. Odiaba la idea de perder a Alycia.

Finalmente, Sara llegó a la hacienda de los Reyes junto a Norma, su sobrino y su abuelo. En la entrada pudo ver a Alycia con el pelo suelto y un vestido corto, Sara no pudo evitar recorrer con su mirada las piernas de Alycia, subiendo hasta llegar a su pronunciado escote. Era tan pocas veces que Alycia usaba vestido y se soltaba el cabello, que cada vez que la veía así le costaba respirar.

Cuando Sara alzó la mirada para mirar a Alycia, vio que ésta la miraba con una ceja alzada, evidentemente, la había visto recorrer su cuerpo con la mirada. Pero en vez de la sonrisa coqueta que normalmente se le ponía, Alycia simplemente se alejó hacia la parte de atrás del jardín.

Sara aprovechó que Óscar y Jimena saludaban a su abuelo, y que Juan hacia lo mismo con Norma y su hijo, y se alejó de ellos, siguiendo a Alycia hacia la parte trasera. Por un momento, temió haberla perdido, ya que estaba bastante oscuro, pero vio una silueta cerca del lago, exactamente donde Alycia solía ir cuando quería pensar. Sara se encaminó hacia allí nerviosa, que estuviera allí no sabía si era buena señal o no.

-¿La anfitriona de la fiesta no debería estar en la fiesta? -bromeó Sara nerviosa intentando romper el hielo

-La anfitriona es Jimena, es su fiesta de bienvenida

Pasión de GavilanesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora