Capítulo 30

4.3K 526 10
                                    

Aemond vio como Alys bajaba del caballo con un bebé atado a su pecho. Una larga capa de la cubría a ella y al bebé del frío y la nevada.

—Mi príncipe — le sonrió algo cansada. Un viaje de toda la madrugada desde Winterfell hasta el río de las lágrimas.

Alys desató de su pecho al bebé y con cuidado se lo extendió. Aemond recibió en brazos al cachorro Stark.

El bebé estaba dormido, lo que permitió a Aemond ver las facciones del bebé. Ese castaño no era similar a ninguno de los cachorros de Rhaenyra, así que era de su sangre Stark, pero la pequeña nariz respingada era la de Lucenys.

Aemond le devolvió al bebé a Alys para que lo volviera a atar a su pecho y ambos se subieron en Vhagar para marchar a Harrenhal.

En pocas horas Lucenys despertará y se dará cuenta que él tenía a su preciado bebé.

──── ∗ ⋅✧⋅ ∗ ────

Lucenys despertó de un pesado sueño, su mente se sentía cubierta por una bruma. Con cuidado se levantó y sus ojos se abrieron del horror al ver el cuerpo desangrado a los pies de su cama.

Lucenys gritó horrorizada, sus manos apretaron sus mejillas mientras las lágrimas fluían silenciosamente hacia su rostros.

—¡Yunet! — Lucenys arrodilló junto al cuerpo de su querida Septa. Con cuidado la abrazó, sosteniéndola. —Yunet, Yunet. ¡Ayuda!

A las afueras de su habitación se escuchaba un completo caos. Lucenys miró hacia la cuna, no veía a Rickon.

¿Dónde estaba Rickon?

—¡Ayuda! ¡Ayuda!

La puerta se abrió dejando ver a Sara con el rostro preocupado y a Lady Mormont.

Dos guardias entraron y trataron de separarla de su Septa pero Lucenys los arañó.

—Lucenys — dijo Sara tomándola de los hombros. Los guardias se llevaron el cuerpo de Yunet mientras Lucenys aún seguía llorando — Un caballo falta en los establos. Todos en Winterfell fueron drogados con algo del sueño. El Maestre está atendiendo a unos guardias.

Lucenys se puso de pie y miró la cuna de su hijo vacía.

—¿Dónde está Rickon?— miró a las damas — ¿Dónde está Alys? ¡¿Dónde está mi hijo?! ¡BÚSQUENLOS POR TODO WINTERFELL!

Lucenys empezó a caminar nerviosa hasta que vio a Sara tomar un pergamino que estaba en su velador. Lucenys se lo arrebató abriendo la carta.

"Mi querida Lucenys

Te ha servido la nodriza que te envié. Espero que sí.

Tengo a tu hijo en sus brazos, en estos momentos debemos estar volando hacia Harrenhal. Te ordeno que vengas por tu cachorro, ven sin compañía.

Te estaré esperando

Aemond Targaryen."

—Aemond — Lucenys dejó caer la carta, sentía que el mundo le daba vueltas —Tiene a mi bebé. Matara a mi bebé.

Lucenys se empezó a sentir debilitada, sus piernas temblaron y sus rodillas se doblaron, sintiendo que se caía detrás. Podía sentir como Sara y Alyssa la sujetaron.

—Lady Stark — Lady Mormont la tomó del rostro para luego mirar hacia arriba — ¡¿Que esperas muchacha?! ¡Ve por el Maestre Leigh!

La mente de Lucenys estaba cubierta por una bruma. Alys mató a Yunet para llevarse a Rickon.

Eternal Eternity   [Cregan Stark]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora