—Nae, podrías ayudarme con esta bolsa.
Taehyung y la pequeña Naeun se encontraban en el estacionamiento del complejo de apartamentos donde ahora vivían los tres, ambos habían terminado de realizar las compras del mes juntos, mientras Yurim esperaba en casa a causa de un fuerte resfriado que la había dejado en reposo.
La pequeña corrió en auxilio del mayor, quien luchaba por cargar todas las bolsas pesadas de la cajuela, entonces, Naeun tomó la más ligera, así, ambos comenzaron adentrarse a la extensa edificación.
Sin embargo, Taehyung paró de golpe logrando que todas las bolsas cayeran al suelo cuando logró divisar a una figura que había dejado de ver por mucho tiempo.
La pequeña Naeun le preguntó cuál fue el motivo por el que abruptamente se detuvo y la razón por la que aquel misterioso hombre lo dejó helado, pero Taehyung se encontraba tan confundido que ni siquiera le prestó atención a la menor.
Park Jimin
Susurró así mismo.
Entonces, el mismo Park Jimin les sonrió a ambos, en especial a la pequeña de ojos traviesos a la que le encontraba un ligero parecido así mismo, que no había duda de su paternidad.
—Taehyung, andando.—la niña al ignorar la existencia de Jimin, animó a su acompañante para entrar.
—Podrías adelantarte. Hay algo que necesito hacer.
La niña con obediencia corrió a la edificación perdiéndose entre los pasillos con simples gestos que lograron sacarle una risilla a Jimin.
—Hermosa familia, Taehyung.
A pesar de que Taehyung se consideraba un tipo paciente, Jimin estaba consiguiendo provocarlo con palabrerías sin sentido. Al final, cualquiera de los dos terminaría perdiendo si dejaban llevarse por sus emociones.
—Te arriesgaste y eso es lo que estás cosechando.—Taehyung se defendió tan pronto.
—Solo vengo advertir una cosa y quiero que se la hagas saber a Yurim.
—Puedes decírmela. Aquí estoy.
Ambos hombres voltearon hacia la figura femenina que había llegado tan pronto como la pequeña Naeun le alertó.
La niña ni siquiera sabía de quién se trataba y le preocupaba que Taehyung corriera peligro, entonces, Yurim corrió diez pisos abajo para encontrarse con eso que quería evitar el resto de su vida, pero era casi inevitable.
Y podía deducir con exactitud qué es lo que buscaba, su hija.
—Yuri, cuánto tiempo.—Jimin le regaló una falsa sonrisa que inmediatamente se volvió sombría y amarga, al grado de que Yurim logró sentir la hostilidad del hombre hacia ella.—Tienes algo que me pertenece.
Después de un largo tiempo de reflexión que Yurim se tomó para aceptar a Naeun en su vida, tenía muy claro que todo era temporal y que no podía privarla de estar con su padre, sería injusto para la pequeña y por compasivo que resultara, para también Jimin.
—La niña no es un objeto y debes estar consciente de que no tiene ni la mínima idea de quién eres.
—Y no voy a dejar que te sigas aprovechando de eso ¿Qué sigue, qué llame papá a Taehyung?
Yurim tenía el destino de Naeun y Jimin en sus manos, tan fácil podía responder que sí, que no era una mala idea registrar a la niña con otros apellidos, pero no se consideraba esa clase de personas como para arruinarle la vida a padre e hija.
También pensó tantas veces el día en que la pequeña conozca la historia y pase de ser su protectora, a la mala de la historia por el destino que tuvo su verdadera madre. Y estaba preparada para recibir el odio de Naeun, aunque en el fondo Yurim también haya sido otra víctima más, pero estaba dispuesta a asumir la culpa.
Le tomó cariño a la menor que lo único que le importaba era su bienestar. Pero el hecho de que Jimin esté en libertad, significaba que el hombre estaría listo a luchar por su paternidad.
[••••]
Yurim optó esa noche por echar andar sus pensamientos para encontrar la decisión final, en compañía de Taehyung, quien se dedicó a observar aquel afligido rostro y al mismo tiempo logró transmitirle esa angustia.
—Yurim, conmigo no puedes fingir, sé que esa niña ahora significa mucho para ti. Pero no tienes que ser tan dura contigo y creer que no mereces su cariño. Naeun te adora.
Yurim volteó a ver a su compañero sorprendida por el repentino comentario.
—Creí que estabas dormido.
—No puedo hacerlo si estás así. Tus problemas son míos ahora.
Taehyung rodeó la cintura de Yurim recostándose sobre el vientre de ésta, adoraba hacerlo mientras la chica acariciaba sus cabellos con delicadeza hasta que él pudiera conciliar el sueño, regularmente lo conseguía muy rápido, pero esta vez estaba dispuesto a correr el riesgo y acompañar a la mujer toda la noche de ser posible, no quería dejarla sola, nunca lo haría aún si ella se negaba.
—Si decido quedarme con Naeun, es como dejar que Jimin se quede en mi vida. Sé que de momento acepté que la niña se quedara conmigo porque no tenía a nadie y siempre me termino preocupando por todos, pero creo que es tiempo de que comience a preocuparme por mi. Tal vez, sea un poco egoísta de mi parte, pero estoy agotada y ya me cansé de fingir que soy fuerte.
—Cual sea tu decisión, siempre la apoyaré. Y no necesitas ser fuerte, no conmigo, porque yo seré fuerte por los dos.
Haerin se recostó a la altura de Taehyung, con ambas manos acunó el rostro de éste completamente fascinada por el masculino que estaba dispuesto asumir todos los retos por ella misma, ni siquiera tenía que decirlo, porque a través del tiempo que ha compartido a su lado, Taehyung ha demostrado ser la única persona que merecía su corazón, y con ternura terminó por besar su coronilla.
—Dices que asumirás la responsabilidad por los dos y yo definitivamente sería una tonta si te dejo ir.
—Y yo definitivamente no me cansaría de decirte siempre que eres tan preciosa en mi vida.
ESTÁS LEYENDO
Love Affair
FanficSu gloriosa voz y su esposo eran aquello que le daban un sentido de pertenencia en este mundo a la prima donna coreana, pero un día aquel recital en el que estuvo atrapada toda su vida se desvenece frente a sus ojos cuando el amor de su vida dice es...