Cafuné | Pedri & Gavi

9.- Celos.

Cuando llegaron a la piscina, se encontraron a medio equipo ya ahí y saludaron a sus compañeros mientras se acercaban a Ansu que estaba dejando sus cosas en una tumbona.

-¿Y Ferran? - Preguntó Pedri buscando al valenciano con la mirada.

-Ha llegado Sira hoy y va a pasar el día con ella - Respondió Ansu poniendo cara de pena - Me ha dejado tirado.

Ambos soltaron una carcajada y Balde se acercó hasta ellos para rodear los hombros de Ansu con un brazo.

-No te preocupes tío, yo te hago compañía - Dijo guiñándole un ojo.

-Menos mal, sino me tocaba estar de sujetavelas con estos dos - Suspiró de forma exagerada señalándoles.

Pedri rodó los ojos y dejó su toalla en la tumbona mirando a Gavi que sonreía negando con la cabeza. Pablo se quitó la camiseta y la tiró en la toalla antes de llamar a Ansu para ir directos al agua. Pero antes de que pudiesen, Pedri les paró a ambos obligándoles a echarse crema.

-Sí, papá - Protestó Ansu rodando los ojos con una sonrisa y echándose crema rápidamente para salir corriendo - Te espero en al agua, tío.

Gavi negó con la cabeza riendo y cogió el bote de crema que le había lanzado Ansu. Se giró hacia el canario, quien también se había quitado la camiseta y estaba sentado en su tumbona, y le sonrió antes de abrir la crema y echarse un poco en la mano. Pedri no apartó la mirada en ningún momento. Tenía al sevillano en frente solo en bañador, con el sol iluminándole y el viento despeinándole. Y encima había empezado a restregarse la crema por el pecho de una forma demasiado sensual para ser normal. Eso o Pedri estaba demasiado salido ya. Subió su mirada a los ojos del menor y vio cómo este le sonreía de lado mientras bajaba sus manos llenas de crema por su abdomen. Y Pedri tuvo que morderse el labio, el calor subiendo por todo su cuerpo.

-¿Me ayudas con la espalda? - Rompió el silencio Pablo tirándole el bote de crema - Es que no llego.

Pedri sonrió alzando las cejas, sabía que era una excusa para hacer que el canario le tocase, y pensaba aprovecharlo. Se levantó de su tumbona y se colocó detrás de su amigo, echándose crema en las manos y dejándolas sobre los hombros contrarios. Miró a su alrededor y vio que la mayoría de sus compañeros estaban en el agua o tomando el sol con los ojos cerrados. Esparció la crema por sus hombros con un leve masaje y escuchó a Gavi suspirar cerrando los ojos. Bajó las manos por su espalda, recorriendo cada músculo y cada lunar, y disfrutó de cómo Pablo temblaba bajo su tacto. Inclinó la cabeza para poder acercar los labios a la oreja contraria y se quedó ahí mientras seguía masajeando su espalda, respirando contra él y provocando escalofríos en el cuerpo ajeno. Y cuando no le quedaba más piel por tocar, le cogió de la cintura y le giró en un solo movimiento, haciendo que Pablo le mirase. Se encontró con las mejillas sonrojadas del menor y una mirada que le revolvió por dentro.

-Te falta en la cara - Murmuró con la voz ronca y acarició los huesos de su cadera antes de soltarle para volver a echarse crema en las manos.

Pablo cerró los ojos cuando sintió los dedos ajenos esparcir crema en sus mejillas y sonrió cuando el canario le apartó el pelo con cariño para poder hacer lo mismo en su frente. Las manos de su amigo eran cuidadosas y suaves, haciendo que Pablo se relajase bajo sus caricias.

-Ya está - Susurró Pedri cuando terminó con la crema pero sin dejar de acariciar sus mejillas. Gavi abrió los ojos y se le cortó la respiración al encontrarle tan cerca y al ver cómo le estaba mirando. Cuando Pedri pasó la lengua por sus labios, Pablo no pudo evitar bajar su mirada a ellos y tuvo que tragar saliva para contenerse y no saltar encima suya.

-Pedri - Murmuró sin dejar de mirarle los labios y fue entonces cuando los ojos del canario bajaron también a su boca, ambos en trance y sin darse cuenta de que se estaban acercando cada vez más. Hasta que un grito proveniente del agua, probablemente de alguno de sus amigos haciendo el tonto, les hizo espabilar. ¿Habían estado a punto de besarse delante de todo el mundo?