Cafuné | Pedri & Gavi

26.- ¿La cena?

-No hagáis guarradas por la casa - Advirtió separándose y señalándole con el dedo, esquivando a Pedri con una risa cuando este fue a darle un golpe en la cabeza mientras se dirigía hacia las escaleras.

Pedri rodó los ojos con una sonrisa y supuso que su hermano había subido a su habitación a coger sus cosas antes de irse, así que fue directo al salón para buscar a Pablo. Estaba sentado en medio del sofá mirando el móvil con una sonrisa pequeña en sus labios. Se dejó caer a su lado en el sofá, apoyando la cabeza en el hombro del sevillano cuando este le miró con una sonrisa y giró el móvil hacia él para que pudiese ver el mensaje que acababa de mandarle Aurora.

Aurora
(21:36)

Gaviota ¿estás bien?

O das señales de vida o mamá va a presentarse en casa de Pedri en 10 minutos.

Pedri soltó una carcajada al leer el mote y Pablo rodó los ojos mientras abría la cámara frontal de su móvil para hacerles una foto y mandársela a Aurora. Pedri se incorporó un poco, peinándose con los dedos antes de sonreír mirando a la cámara y Pablo no pudo evitar girar la cabeza para dejar un beso en su mejilla mientras hacía la foto. Se la guardó en la galería, porque Pedri salía guapísimo y la foto era súper bonita, y se la mandó a su hermana.

Pablo
(21:40)

Foto
Estoy más que bien 🥰

Perdón por preocuparos.

Mañana os cuento todo cuando vuelva.

Aurora
(21:41)

Que guapos sois, pero Pedri más.

Mañana?? Duermes ahí?

Usad protección 😘

Los dos rieron al ver la respuesta de Aurora y Pablo se sonrojó un poco, dándose cuenta de que prácticamente le había dicho a su hermana que iba a dormir con Pedri y no quería ni saber lo que se estaba imaginando. Guardó su móvil tras reaccionar con un corazón al primer mensaje, ignorando todos los demás.

-¿Y Fer? - Dijo girándose hacia Pedri y subiendo las piernas para ponerlas encima de las del canario, llevando una mano a su nuca para pasar los dedos por el pelo corto de la parte baja de su cabeza. Aún le costaba procesar que pudiese hacer esas cosas con total libertad, que ya no tuviese que contener las ganas de nada. Su cuerpo, al contrario, parecía acostumbrado a gravitar hacia Pedri siempre que le tenía cerca.

-Cogiendo sus cosas - Contestó con una sonrisa mientras dejaba la mano sobre una de las piernas del menor. Vio cómo Pablo fruncía el ceño extrañado y le acarició la pierna despacio mientras le miraba a los ojos y añadía - No duerme aquí.

-¿Nos quedamos solos? - Preguntó mientras una sonrisa enorme se dibujaba en su cara.

Pedri rió al ver lo contento que parecía y asintió mordiéndose el labio mientras bajaba la mirada a los del menor, hipnotizado por su sonrisa. No se dio cuenta de que se estaba acercando hasta que la respiración de Pablo chocó con la suya y sintió la mano que el sevillano tenía en su nuca atraerle para terminar de unir sus labios. Se besaron despacio, los dedos de Pablo en su nuca mientras que los de Pedri acariciaban su pierna, disfrutando de los movimientos de los labios contrarios que hacían que ambos corazones se acelerasen.

-Me voy, chicos - Avisó Fer bajando las escaleras y provocando que se separasen mientras Pedri suspiraba, maldiciendo a su hermano por cortarle tantos momentos con Pablo.