Daven es una recién graduada de la universidad que no se decide al próximo paso. En Italia, en una tarde de bares con su prima, se topa con Sasher.
Con solo mirarse ya sienten una chispa recorrerlos.
Tras algo, una aura empieza entre ellos y aventur...
Cuando tuvimos los trajes de baño puestos, me entraron las ganas de mear y sin pensarlo fui, sin darme cuenta de que Sasher seguía en el baño, poniéndose la crema solar.
— Hola solar
Me río y le devuelvo el saludo, luego de eso, se agacha y nos damos un beso, al salir me pide que no tarde mucho y se sienta en mi cama a mirar su móvil y mirando al espejo, sonrío.
— ¿Estás bella?
— ¡Ya salgo!— le respondo rápido saliendo de mi estado de dormida extraña y me levanto del váter.
Cuando bajamos, la comida está casi lista y no da tiempo a un remojón por lo que decidimos esperarnos a luego. Papá termina de trabajar y cuando guarda las cosas se coloca por detrás mía y me estruja los hombros y sonrío al mirarnos.
Luego entre los cuatro preparamos mesa y cuando mamá avisa, vamos en cola a rellenar los platos y volver para sentarnos. Comiendo sonrío varias veces y me distraigo un poco de mi cacao mental.
Tras comer, piden media hora de siesta antes de mojarse y nosotros nos subimos a jugar a la DS.
Subo animada las escaleras y resbalo casi cayéndome, pero unas manos me agarran justo a tiempo y sus brazos me rodean, dándome una vuelta con cuidado para juntar nuestros labios.
Soy la primera en decidir el juego y decido por mi favorito, el de cuidar perros, y aunque él ya juega bien, me sale sin quererlo, el guiarle, el decirle que hacer, luego decide sorprenderme y me compra un perro nuevo, eligiéndolo yo.
— Te quiero.
— Y yo a ti.
— Ay, qué bonitos— miramos a mamá y río.
— Papá ya ha salido a la terraza por si queréis bajar— asentimos y se va.
Nos miramos y decide guardar partida y cerrarla, luego se pone de pie y me coge una mano para salir de la habitación. Al bajar vuelvo a resbalar y me quejo de un mal movimiento en un tobillo de nuevo y decido que al final no me bañaré.
Pero que estaré con ellos y disfrutaré; Sasher y papá si se dan un chapuchón, pero nosotras no, nosotras nos tomamos un helado en las hamacas.
Por la tarde-noche, salimos a dar una vuelta y en bajar unas escaleras noto un punzón de dolor y no me pinta bien, pero me lo callo.
Luego de cenar, vemos una película de misterio y casi me cago viva, pero por ellos aguanto hasta tormentas torrenciales en plena oscuridad.
Al subir y acostarnos, me acurruco a él y me quedo frita.
423 palabras.
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Hola Dasher, han pasado más días de los esperados, pero me dio bloqueo... Espero que lo poquito os guste.
