𝑩𝒐𝒔𝒒𝒖𝒆

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Narra Lily:

Me estaba arriesgando demasiado pero no me quedaría de brazos cruzados a esperar cómo un hombre anciano viole de mí y luego me deje tirada por ahí. Con las manos aún atadas intente zafar el seguro sin que lo notara, sorprendentemente no lo hizo ya que iba muy atento al camino.

La luz cada vez era mayor por lo que tenía más posibilidades de que haya gente cerca del lugar aunque era algo cero certero pero debía tener fé. Pensé en tirarme del carro pero no llegaría a correr tan rápido y me agarraría o lastimaría con la pistola. Pase mis manos en un movimiento rápido por arriba de su cabeza, tiré para atrás haciendo que comenzará a quedar sin aire y soltara el volante.

Soltaba maldiciones las cuales no se oían bien por su falta de aire y la presión que yo ejercía en su garganta con las sogas. Cuando vi que se estaba quedando sin oxígeno y que en cualquier momento estaría inconciente quite mis manos. Aún con el auto en movimiento, yendo a toda velocidad y desviados del carril tome el arma y abrí la puerta.

Cubrí mí cabeza al caer para no lastimarme más de lo que ya lo había hecho. A un lado mío había un bosque, antes de que ese hombre volviera por mí corrí a toda velocidad. No sé cuántos kilómetros corrí pero llegó un punto en el que mí oxígeno era escaso y sentía que en cualquier momento moriría de un paro cardíaco si no me detenía.

Me encontraba totalmente perdida, sin señal en el celular, con poca batería y sin ningún rastro de algún ser humano. Decidí usar mí celular y ver a quien podría llamar para que vinieran a rescatarme.

Joseph...

No lo haría, seguramente él ya se habría ido del país o estaría trabajando. Sin saber que hacer y desesperada comencé a llorar en un ataque de pánico.

Narra Joseph:

Mí vuelo para ir a Estados Unidos se había adelantado por lo que hoy a las 15:00 pm tendría que estar en el avión. Nuevamente volvería a lo que hace unos meses se volvió lo más importante de toda mí carrera. Estaba bastante ansioso y quería usar mí celular pero sabia perfectamente que si lo agarraba sería mí perdición total ya que solo abriría el contacto de Lily.

Me quedé esperando a mí mánager y cuando eran aproximadamente las doce me mandó un mensaje avisando que ya había llegado por mí. Baje con mis dos maletas ya que la mayoría de la ropa que usaba me la daba mí mánager así que yo no tendría que llevar mucha.

El viaje hasta el aeropuerto fue bastante incómodo y apenas llegamos fui directo al baño para no tener que estar cerca de Jean ni para que me reconocieran. Amo a mis fans pero hoy no estaba de ánimos, no pude despedirme de Lily y realmente me hubiera gustado hacerlo.

Entré mil veces al chat de Lily para mándale aunque sea un "hasta luego" o alguna señal de que me iría.

Tal vez así es mejor para los dos

Lo pensé bien todo el vuelo pero lo que se me hizo más extraño fue que no se conectara en todo el día. Se hicieron la una, las dos, las tres y nada. Incluso le pregunté a Jean si sabía algo de ella pero él me comentó que luego de la vuelta a Brasil no habían hablado más e incluso ella había borrado su número telefónico.

Me tocaba esperar mínimo que se conectara para luego poder hablar con ella si me respondía.

Narra Lily:

Desperté confundida, tenía hojas arriba de mí cuerpo y algunas enredadas en mí cabello. Tenía las piernas con picaduras de mosquitos e incluso mí ropa estaba sucia ya que me había dormido en el suelo. Era de noche, se escuchaba el ruido de algún que otro grillo y los árboles ya que con el viento del bosque las hojas se movían de un lado para otro.

Todo estaba obscuro y estaba muerta de miedo. Mí celular ya no tenía carga por lo que se apagó y no podría ni siquiera usar la linterna. Comencé a tantear en el suelo alguna rama larga para poder usarlo de bastón y así no pisar o tocar nada lo cual me pueda poner en peligro. Logré agarrar una rama bastante larga y me pare de mí lugar.

Di un gran suspiro y comencé a caminar en una dirección totalmente desconcertada y desorientada. No sabía realmente a dónde me estaba dirigiendo así que camine. No sabía cuánto tiempo aproximadamente había dormido pero yo supongo que fueron unas largas diesciete horas.

No fue muy inteligente de mí parte dormir cuando tenía luz del día para poder salir de este inmenso laberinto llamado bosque, el cual parecía pequeño cuando corría pero caminando era eterno. Llegué hasta un área en el que habia cada vez menos árboles así que supuse que estaba cerca o por lo menos ya no me encontraba tan perdida porque tenía un campo visual más amplio que antes.

Cuando por fin vi la calle cerca no lo pensé más, tiré la rama que había agarrado y salí corriendo para llegar lo antes posible y pedir ayuda si alguien pasaba. Cuando llegue sentí como mí cuerpo se relajo y porfin ya no estaba tan perdida. Ahora lo siguiente era encontrar la dirección correcta para volver a casa.

Mientras iba en una dirección al azar vi un carro color negro, vidrios polarizados y un poco viejo acercándose hacia mí. Para prevenir más accidentes decidí correrme del camino y extender mí mano para que se detuviera. En Argentina es muy común que si estás perdido hay gente que te lleva y se le llama "hacer dedo" ya que levantas un dedo y paran, obviamente no todos son amables y aceptan.

El auto fue disminuyendo la velocidad y cada vez veía más las posibilidades de que si quisiera llevarme o aunque sea darme una indicación. Llegó con una velocidad demasiado lenta, una vez al lado mío bajo la ventanilla, me quedé analizando su rostro, se me hacía familiar. Sacó los lentes de sol que llevaba puestos y ahí fue cuando pude reconocerlo...




























Un capítulo bastante corto pero ahora empieza lo bueno. Se podrán dar cuenta que me encanta el suspenso jaksks. Que tengan linda noche <3.
(seguime en mis redes sociales, en mí descripción están los nombres 😉)

𝑴𝒚 𝑫𝒂𝒓𝒍𝒊𝒏𝒈  - 𝑱𝒐𝒔𝒆𝒑𝒉 𝑸𝒖𝒊𝒏𝒏 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora