Narra Lily:
Estaba preparando mí maleta con ropa para irme a Argentina. A las doce de la madrugada salía mí vuelo y no me sentía lista para abordar un avión a esas horas. No dormía hace dos días y las ojeras ya empezaban a notarse debajo de mis ojos.
Me estuve quedando unos días más en el departamento de Joe ya que no tenía donde ir y necesitaba dejar mis cosas. Él en este momento se encontraba trabajando y yo luchando con mí ser por no dormirme arriba de la pila de ropa que tenía por doblar y guardar. Me tenía que llevar absolutamente todo lo que tenía ya que no quería dejar nada aquí.
Joseph me pagó el pasaje de avión y se hizo cargo de todas las cosas correspondientes que necesitaba, me ayudó tanto que no sabría cómo agradecerlo. Pasamos los últimos días juntos y para él eso era más que suficiente pero yo aún me sentía en deuda con él.
Me había brindado un hogar, comida, seguridad y encima me salvó la vida.
Joseph: ¿Ya estás terminando? - me sobresalté al escuchar su voz detrás mío.
Lily: No sabía que habías llegado - limpie mis ojos ya que tenían un par de lágrimas.
Irme lejos de él me iba a doler bastante, pero también el hecho de que volvería a mí país y tenía miedo, miedo de que no sea lo mismo. Aún tenía una carrera por estudiar y un sueño por cumplir, no me iba a dar por vencida hasta no verme en Hollywood, o al menos llegar lejos y ser reconocida por lo que más me gusta hacer.
Joseph: ¿Cómo te sientes? - preguntó cuando nos encontrabamos de frente.
Lily: Realmente no sé cómo me debería sentir - dije mirando mis manos.
Joseph: No puedo decirte como deberías sentirte, pero ponte feliz de que tu familia y amigos te están esperando - levanto mi rostro.
Lily: Pero tú... - me interrumpió.
Joseph: Esto no se trata de mí, se trata de ti, de tu salud y bienestar - mí ojos se cristalizaron - Lily, no puedes estar en un lugar donde te encuentras en peligro, este cambio será para mejor y si el destino o la vida nos quiere volver a juntar así será.
Me aferre a él en un abrazo el cual quería que durará para siempre, pero debía soltarlo si quería seguir. Odio tener que dejar ir a las personas, es algo que me cuesta horrores pero más con Joe. Él dio todo por mí en pocos meses que llevamos de conocernos y no le puedo pagar simplemente huyendo.
Lily: Lo siento - sollozaba en su pecho mientas él acariciaba mí cabello.
Joseph: Esto no es tu culpa - su voz también se quebró.
Levante mí rostro para verlo y sus mejillas estaban llenas de lágrimas y sus ojos también.
Lily: No sabes cuánto te agradezco, me salvaste de todas las maneras posibles. Eres todo lo que tengo aquí y sabes que nunca te olvidare aunque pasen años - lo tome del rostro - Te amo.
Joseph: Yo también - me dio un pequeño beso en la comisura de los labios - Sabes que te estaré esperando siempre, aquí, en la China o donde sea. Tienes mí número y si algún día lo pierdes yo me encargaré de encontrarte - sonrió.
Nos besamos, lento, tierno y dulce, como lo era él. No sabía lo que necesitaba en mí vida hasta que llegó y cambio mí pensamiento rotundamente. Aunque tal vez sea demasiado precipitado puesto el tiempo que nos llevamos conociendo, pero creo que el tiempo es algo subjetivo cuando se trata de amor. Me enamoré y no pude evitarlo, con Joe cualquier cosa es inevitable.
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𝑴𝒚 𝑫𝒂𝒓𝒍𝒊𝒏𝒈 - 𝑱𝒐𝒔𝒆𝒑𝒉 𝑸𝒖𝒊𝒏𝒏
Genç KurguJoseph: Eres tan hermosa - sentí como su mano acariciaba mi muslo acercándose lentamente hacia mí zona íntima. Al llegar su dedo comenzó trazar círculos por encima de la tela haciéndome estremecer. Lily: Porfavor - supliqué. Joseph: ¿Que quieres...