𝑶𝒃𝒆𝒅𝒆𝒄𝒆

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⚠️ Este capítulo tiene contenido +18.
Si no es de tu agrado lo puedes saltar ya que no afecta a la trama de la historia ⚠️

Narra Joseph:

Bajamos de mí carro y nos adentramos en el edificio, una vez en el elevador no aguante más las ganas y comencé a devorar su boca. Su lengua pedía permiso para entrar a explorar mí boca y yo se lo cedí. Estábamos en una lucha con nuestras bocas hasta que el elevador se detuvo. Rápidamente abrí la puerta y salimos por el pasillo hasta mí departamento. De los nervios no podía encajar la llave en la cerradura pero logré calmarme y abrir.

Me senté en el sofá e hice palmadas en mis piernas en señal de que se sentará encima mío. Obedeció de inmediato y se colocó a horcajadas sobre mí, seguimos con el desesperado beso mientras que con mis manos agarre sus glúteos para comenzar a frotarla sobre mí erección ya bastante dura.

Jadeo sobre mí boca en señal de que estaba siendo placentero para ella, hoy quería solo darle atención a ella aunque mí polla ya estuviera dura de solo tenerla arriba. La agarre de la cintura y la lleve con sus piernas enrolladas en mis caderas hasta la habitación.

La dejé sutilmente en la cama mientras me deshacía de mí camisa, ella me observaba atentamente. Me acosté sobre su cuerpo sin aplastarla, baje hasta su cuello y comencé a besarlo lentamente pero los besos se transformaron en mordiscos, lamidas y marcas las cuales mañana serían chupetones. Ella jadeaba y enredó sus dedos en mí cabello.

Baje mis manos acariciando su pequeño cuerpo, subí lentamente su camiseta, aprecie sus pechos, sus bellos pechos redondos que estaban cubiertos por un brasier negro con encaje.

«Que sexy...»

Joseph: Son tan hermosos - susurré acercándome a ellos para besarlos.

Ella se quitó la remera y yo ayudé para quitarle el brasier, era demasiado fino pero prefería verla sin el. Mientras chupaba uno con mí mano le daba atención al otro y repetí la misma acción al contrario.

«Exquisitos»

Comencé a besar su abdomen hasta llegar al borde de su pantalón, la mire en busca de aprobación y ella asintió. Desabroché lentamente el botón y baje de igual manera la cremallera, sentí como removió sus caderas para que fuera más rápido.

«Que impaciente...»

Joseph: ¿Estás apurada? - pregunté de forma burlesca.

Lily: Que gracioso - me miró con mala cara.

Joseph: No seas irrespetuosa conmigo, daeling - tragó grueso, sabía que esa palabra provocaba algo en ella, pero quería averiguar que.

Baje sus jeans junto a sus bragas, la dejé totalmente a mí merced, ahí descubrí lo que le provocaba al hablarle así, estaba demasiado mojada, justo como lo necesitaba. Yo todavía tenía mis pantalones puestos pero tampoco tenía apuro de quitarlos, en cambio ella si.

Joseph: No seas impaciente - agarre sus menos llevándolas arriba de su cabeza para inmovilizarla.

Nuevamente me acerque hasta su cuello y volvi a besarlo pero está vez suavemente. Mí erección se frotaba contra su vagina produciendo unos dulces sonidos que salían de su boca.

Lily: Joseph... te necesito - gimió en mí oído.

No resistí más y baje mí mano hasta su intimidad, lleve mis dedos hasta su agujero y subí recolectando todos sus jugos, me los lleve la boca y los lamí. Ella me miraba con sus ojos llenos de lujuria y fuego, lo estaba disfrutando. Su dulce sabor nubló mis sentidos queriendo probar más de ella, y eso hice, baje lentamente soltando sus manos y me dirigí hacia el botón hinchado. Lo escupí y luego pase mí lengua, se aferró a las sábanas de la cama y tiró su cabeza hacia atrás.

Joseph: ¿Eso te gusta, darling? - pregunté y ella asintió - Habla, pequeña - demande y lamí nuevamente.

Lily: ¡Si joseph! - gritó de placer.

Me encanta tenerla así, verla retorcerse debajo mío, sentir placer con cada lamida que daba. Que apretara las sábanas fuertemente para no correrse, me gusta dominarla, poseerla y darle placer. Decidí meter lentamente dos dedos en su cavidad, estaba demasiado apretada lo que me indicaba que no aguantaría mucho más.

Narra Lily:

Sentía todo mí cuerpo obnubilado por el placer que me estaba haciendo sentir Joe, era un experto y sabía lo que hacía. Estaba llegando al orgasmo, a punto de explotar sobre su boca y él se dio cuenta acelerado los movimientos con sus dedos y lengua.

Joseph: Vamos, dame lo que quiero, darling - no fue suficiente nada más ya que con esas palabras senti cómo me mojaba.

Él lo recibió gustoso y lo trago todo, me miró con una sonrisa y pude ver su barbilla llena de mis jugos. Subió hasta mí boca y me beso desesperadamente mientras desabrochaba su pantalón. Pude sentir mí sabor en sus labios pero no me desagrado en lo absoluto.

Se arrodilló frente a mí para bajar sus pantalones junto con su bóxer. Su pene saltó ya bastante erecto y nuevamente sentí nervios por el tamaño. Se paró en el suelo para poder sacarse todo lo que quedaba de su ropa mientras que yo agarré un preservativo.

Lily: ¿Te lo puedo colocar? - pregunté tímidamente con el paquete plateado en mí mano.

Joseph: Claro - abrí el envoltorio y me arrodille en la cama para estar más cómoda, coloque de la forma adecuada el profiláctico - Ponte de espaldas - hablo con voz firme y le hice caso al instante -Que bonita vista - acaricio mí trasero antes de marcar una mano en el.

Colocó su mano en mí espalda haciéndome bajar para que quedará en cuatro. Me encanta su lado dominante, me asusta un poco pero el placer hace que me olvidé. Siguió dándome nalgas y yo gemia en respuesta.

«Mañana mí trasero va a ser morado»

Me saco de mis pensamientos agarrándome de las muñecas haciendo que caiga de cara hacia el colchón.

Joseph: Te ves más bonita así - dijo admirando mí cuerpo.

Lily: Tonto - susurré creyendo que no había escuchado.

Joseph: ¿Que dijiste? - soltó mis muñecas y agarró mí cabello tirando de el hacia atrás.

Lily: N...nada - dije con dificultad al sentir su respiración en mí oído.

Joseph: A mí me pareció escuchar otra cosa - acomodó su miembro en mí vagina y entro de una sola estocada haciéndome gritar - Espero que aprendas - susurro de manera sinica y comenzó con un ritmo lento.

Sentía demasiado placer ya que en esta posición se sentía mucho mejor, nuevamente agarró mis muñecas dejándome inmóvil, aproveché para hundir mí rostro en la almohada y que no se escucharan los gemidos descontrolados que salían de mí boca.

Joseph: Quiero escucharte - agarró mí cuello para que levantará mí cabeza.

Poco a poco aceleró el ritmo haciendo que unas lagrimas corran por mis mejillas al sentir el placer. Sentía que en cualquier comentó me correría. Sus manos sujetaron con fuerza las mías y aceleró su ritmo a uno descontrolado. Ambos llegamos al clímax, soltó mis manos y acarició mis glúteos saliendo lentamente.

Caí rendida en la cama por el cansancio y luego me dirigí al baño para limpiarme, él también entró conmigo y me propuso que nos duchemos juntos y eso hicimos.

Luego del baño él secó mí cabello mientras yo me hacia mí rutina facial para la noche, era muy tierno verlo por el espejo con su cara de concentración y la punta de su lengua en el labio superior.

Terminamos y nos fuimos a acostar, me acurruque en su pecho y él me cubrió con la colcha, acaricio mí cabello y depósito un beso en mí frente.

Joseph: Te quiero - dijo con voz somnolienta.

Levante mí cabeza y ya tenía sus ojos cerrados.

Lily: Yo también - respondí antes de caer en un profundo sueño...




































Protección ante todo!. Que tengan linda noche <33

𝑴𝒚 𝑫𝒂𝒓𝒍𝒊𝒏𝒈  - 𝑱𝒐𝒔𝒆𝒑𝒉 𝑸𝒖𝒊𝒏𝒏 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora