Parte sin título 71

873 90 1
                                    


Jhon le dio al duque una capa negra para cubrirse, todos vestían capas negras, su rostro estaba tapado por una pañoleta negra pero con letras rojas escritas en un idioma poco común, algunos de los soldados usaron pelucas o se maquillaron un poco para aparentar tener cicatrices, hay también estaba la escolta blanca, todos cabalgaron con la guía de Daniel

Una vez estuvieron cerca dejaron los caballos alejados y comenzaron el ataque, fue una gran emboscada, nadie se esperaba el ataque, pero Daniel ya le había contado algo a sus amigos más cercanos, ellos también estaban preparados, cuando comenzó el ataque ya sabían hacia donde huir y ayudaban en lo que podían, lo único que podían hacer ahora es no ser un estorbo.

La lucha fue muy sangrienta ya que los caballeros de Sartel tenían órdenes de matar, solo el duque diría quien queda con vida, no había nadie que estuviera al nivel del duque o de su tío, mientras tanto Sindy ( jefa de la guardia blanca), entro a las tiendas que encontraba para buscar a aquel hombre con cicatriz que la ataco aquella vez, para su suerte lo encontró pero ver aquella escena le genero repugnancia, aquel maldito que mato a sus amigas estaba violando a una niña pequeña, sin pensar nada y con toda la furia que sentía lo apuñalo, el hombre reacciono a tiempo y la empujo.

Sindy seguía luchando con aquel hombre, el hombre solo le sonrió.

- ¿Por qué tan agresiva en nuestro segundo encuentro?, pensé que habías muerto como tus otras amigas, quien diría que siguieras viva.

Sindy no le respondió y atacaba, la lucha estaba igual, cuando el hombre decidió apuntar a la niña, Sindy se sorprendió mucho por lo que vio, ya que aquel hombre mato sin dudar a la niña

- Lloraba mucho, pero tengo que admitir que estaba apretada como me gustan. –decía con malicia el hombre.

- CIERRA TU MALDITA BOCA DE UNA PUTA VEZ. –gritaba enojada Sindy

El duque al escuchar el grito de Sindy se dirigió para ver qué pasaba y se dio cuenta de que ese hombre era el que ataco a Micaela, era tal cual lo describió Arthur, es ese momento el duque ataco sin pensarlo, aquel hombre no era nada para el duque, y justo cuando lo iba a matar, solo le corto el rostro.

- Amarren a este hombre y llévenlo al túnel. –dijo el duque tratando de calmarse.

En ese momento Harold ato al hombre y lo puso en un caballo, pero noto al duque muy enfurecido.

- Matándolo no ganas nada, además si lo matas se lo dejas muy fácil, déjalo vivir y tortúralo todo el tiempo que quieras, que pague todo lo que hizo.

El duque asintió e intento calmarse, la lucha solo duro un poco más y luego acabo, Jhon se acercó para hablar con el duque.

- Hemos reunido a los pocos sobrevivientes, dejare que algunos soldados se los lleven a las cabañas preparadas, ¿Qué quiere que hagamos con los cuerpos?

- ¿A qué te refieres con pocos? No se logró salvar a la mayoría. –preguntaba el duque algo confundido

- Lamento decir esto, pero cuando comenzamos el ataque no dudaron en matar a cualquiera de su clan, mataron a la mayoría de mujeres, que eran niñas, algunas eran tan pequeñas, a los que veían que se defendían o protegían también los mataron.

- Entiendo-decía el duque decepcionado- los cuerpos de los inocentes entiérralos y el de los otros, córtales su cabeza a cada uno y ponlas en un gran baúl, dile que lo dejen en el domo, no te olvides poner la pañoleta.

Jhon asintió a lo que dijo el duque, mientras el duque intentaba limpiarse de la sangre que tenía, no pudo evitar ver aquel escenario en llamas, aunque él estuviera acostumbrado a la guerra y a matar no se sentía bien hacerlo, mientras caminaba vio a Sindy que estaba sin su capa y cargaba algo.

- ¿Lo que llevas es..........-decía con tristeza el duque

- Lo es, es el cuerpo de una niña, que fue violada y asesinada, porque no la pude salvar, solo observé como sucedía, lo que sentí cuando lo vi, como puede haber gente tan maldita en el mundo. –decía Sindy con lagrimas

- Lo hay y siempre habrán esa clase de personas, por eso nosotros debemos proteger a nuestros seres queridos, para que nunca sufran de ese modo, esperemos que la pequeña al menos descanse ahora.

Sindy asentía, con lágrimas llevo el cuerpo de la niña a un carruaje para después enterrarlo. El duque tenía que mantener su compostura ante tal situación, pero en eso llego Harold.

- Ocurría mucho esto en la guerra, porque no vas a descansar con tu familia, te veré en la inauguración, se cómo lidiar con lo demás, tengo más experiencia que tú.

Miguel asintió y se marchó, lo primero que hizo al llegar fue limpiarse toda la sangre, busco agua suficiente y se lavó varias veces, mientras caminaba para llegar a su cuarto Esteban se le acerco.

- ¿Por qué estas despierto? –preguntaba desconcertado el duque

- A esta hora siempre tomo agua y escuché pasos, así que te vi, espero que hayas ganado padre. –decía Esteban con una sonrisa

- Lo hice, ahora descansa, te llevare a tu cama.

Esteban asintió y el duque lo cargo hasta su cama, lo dejo descansar y siguió su camino hasta su cuarto, mientras caminaba pensaba en la sensación de cargar a su hijo, como lo pudo hacer con sus manos manchadas de sangre, al darse cuenta ya había llegado a su cuarto, abrió la puerta con cuidado y vio a Micaela descansar.


Luz de mi vidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora