Luz de mi vida

Parte sin título 108

Comenzó la pelea y Denis fue el primero en atacar, Arthur supo defenderse bien, se protegió de los ataques de Denis, pero él no se rendía, atacaba de forma rápida a Arthur y no lo dejaba defenderse, Arthur se encontraba algo emocionado con la pelea, luego de esperar ser atacado comenzó su contraataque, y no se lo dejo fácil a Denis, la pelea era muy emocionante.

Todas las personas estaban emocionadas con la pelea, ese fue un gran espectáculo, pero como era de esperarse Arthur gano el duelo, Micaela se puso muy feliz con la noticia y fue a saludar a Arthur, el rey solo lo saludo de manera cortes, Arthur por primera vez fue reconocido por el rey como ganador, su sonrisa no se podía ocultar, la sonrisa que dejaba a muchas mujeres sonrojadas.

Entre el público también estaba Elisa y Mitzy.

- Mira cómo se emocionan esas chicas con ver a Arthur, quien diría que antes lo ignoraban. –decía Mitzy

- Es verdad, seguro se deben de estar arrepintiendo por eso.

- Sí, pero tú no le ibas a dar algo a Arthur hoy. –preguntaba Mitzy.

- No solo se lo iba a dar a él, también hice uno para ti y Denis, son pequeñas bolsas de tela, con yerbas aromáticas y algunas flores. –decía Elisa mientras entregaba una Mitzy

- Muchas gracias, es tan bonita. –decía Mitzy alegremente

Elisa solo asintió y siguió observando a Arthur.

Mientras tanto Arthur entrego su premio a Micaela

- Esto es para ti madre, el próximo torneo que gane se lo daré a mi hermana. –decía Arthur mientras cargaba a Luz.

- Estoy tan feliz, al fin demostraste lo que eras capaz de hacer, te lo mereces hijo. –decía Micaela emocionada.

- Lo has hecho bien. –dijo el duque.

- Solo dirás eso. –decían al mismo tiempo la duquesa Dafont y Micaela

- Qué más quieren que diga. –decía el duque indignado

Micaela comenzó a reírse con la respuesta de Miguel.

Después de las peleas el tiempo que quedaba lo usaban para socializar, Micaela comenzó a conversar con algunas damas nobles, Miguel dejo por un momento a Micaela y se fue a buscar a su tío, cuando lo vio conversando.

- Que sorpresa verte por acá Miguel, hace mucho que no te vemos, espero que sigas practicando con la espada. –decía un señor

- Aun practico, pero no es muy seguido, tengo otras cosas que hacer.

- No debes descuidarte, sería bueno que vinieras a Brant para poder ver cómo están tus habilidades.

- Pero eso se puede arreglar, porque no practicamos un poco antes de que se marchen, pueden venir a mi casa, tengo un campo especial para peleas.

- Entonces está arreglado, antes de irnos nos despediremos con una pelea. –decía el señor.

Mientras Miguel acompañaba a los señores para su casa, se puso a buscar a Micaela y sus hijos, pero se incomodó con lo que vio, un joven estaba hablando muy de cerca con Micaela, aunque Micaela parecía evitarlo el joven seguía insistiendo, Miguel no soporto eso y se acercó de manera apresurada.

- Porque estás sola, donde están los niños. –decía Miguel mientras abrazaba por detrás a Micaela

Micaela solo se sonrojo con lo sucedido.

- Así que está casada, pero no importa, en mi reino está permitido que tengas varias parejas y no soy celoso, mientras no te olvides de mí.

Con solo escuchar esas palabras, Miguel quería cortarle el cuello al joven, Micaela se percató del enojo de Miguel.

- El problema es que no siento nada por usted, es muy joven y seguro en el futuro encontrara a una mujer que de verdad lo merezca. –decía Micaela

- No creo que la encuentre, y menos con sus atributos. –decía el joven mientras miraba el pecho de Micaela.

Al notar la mirada del joven Micaela se puso roja y Miguel ya no tenía paciencia para soportar más, cuando de pronto Lili apareció con Ema y Bruno.

- Si aprecia su vida será mejor que se retire, aun es joven.

- No me voy a rendir tan fácil. –reprochaba el joven

- Entonces no hay otra opción, Ema has el campo de energía. –decía Lili firmemente

Y en el acto Ema hizo un campo de energía que cubría a su mamá, Micaela y Miguel, botando lejos al joven.

- Pero como es posible. –decía el joven sorprendido- creo que aún es joven, pero puedo esperar a que la pequeña crezca.

De pronto el joven sintió un fuerte dolor en su hombro, Harold estaba apretándolo fuertemente.

- Mi hija aún es muy joven, así que por favor retírate, lo digo por tu bien.

- Siendo su hija, eso explica porque es tan fuerte, sería un honor casarme con ella, pero supongo que usted no me aceptara, entonces por esta vez me retirare. –decía algo triste el joven

Micaela se sorprendió por el campo de energía.

- Guau, Ema eres muy capaz. –decía Micaela mientras acariciaba la cabeza de Ema.

Ema solo se rio, cuando Harold llamo a su hija y Ema desactivo el campo y agito sus manos a su padre.

- Que niña tan obediente tengo. - decía Harold felizmente mientras se acercaba para cargarla

- A mí también se me acercaron algunos jóvenes, pero Ema los alejo. –decía Lili mientras cargaba a Bruno

Micaela solo asintió, luego vio como Arthur regresaba con Luz y Esteban cargaba a Mateo

- Espero que también se hayan divertido mis lindos hijos. –decía Micaela mientras los besaba

- Si madre, pero creo que es momento de regresar. - decía Arthur

- Es verdad, además tenemos que preparar algo en la casa. –decía Micaela mientras agarraba la mano de Miguel.