Recopilación de Cortos Hannigram

San Valentin

#Hannigram #Corto #SanValentine

— En serio vas a seguir enojado...

— ...

— Hannibal, ya te dije que siento mucho haber olvidado el día de San Valentin. - dijo Will mientras veía a su pareja.

— Puedo pasar el que no me hayas regalado nada, pero es que ni siquiera un mensaje de texto... - Hannibal decía mientras hacía puchero con sus labios.

— Bueno, pero ya me disculpe y... Si no quitas esa trompita que tienes no voy a darte la sorpresa que te tengo.

Hannibal levantó la ceja con curiosidad y vio a Will.

— No voy a perdonarte tan facil.

— ¿Pero me dejaras intentarlo..?

— Esta bien.

*
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— ¿Era necesario venir al consultorio?

— Ya, deja de quejarte Hannibal, ven... Necesito que te sientes en tu silla de escritorio y cuando llame a la puerta sólo vas a decir: Pase.

— Uhmm... Okay.

Will salió del consultorio y Hannibal se quedo esperando, primero paso cinco minutos y luego diez, cuando casi llegaba a veinte minutos, Hannibal empezaba a sospechar que Will se había ido y lo había dejado ahí... Si era ese el caso, William tendría mucho de que hablar con su bisturí.

Sus divagaciones se esfumaron cuando escucho dos leves golpes a la puerta.

— Pase.

Will entró vestido de maid con una bandeja.

— Buenas tardes, Dr. Lecter, es la hora de su té.

— ¿Wi..Will? - La voz a Hannibal le tartamudeo.

Will se acerco moviendo sus caderas con sensualidad y colocó una taza en el escritorio y empezó a llenarla con la tetera.

Hannibal no podía dejar de ver las piernas de Will, enfundadas en pantimedias blancas, sintió su ingle dar un tirón.

— Dr. Lecter, mi rostro esta más arriba.  - Will habló mientras se mordía el labio.

— Disculpa.

— Bien... ¿Le gustaría algo más al doctor?

Hannibal sonrió.

— Me gustaría muchas cosas...

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Will se sostenía de los hombros de su novio, su respiración totalmente agitada.

Hannibal sostenía sus piernas que estaban alrededor de la cintura del mayor, Will agradecía eso porque sus piernas estaban totalmente débil.

Se acerco y le dio un pecho al pecho de Hannibal, se le habían desabotanado tres botones y se veía el pelo de su pecho a Will le encantaba.

— Te amo, Hannibal.

— Eres la luz de mi vida Will, no lo olvides.

Will sonrió contra el pecho de Hannibal y dejo un montón de besos antes de hablar nuevamente.

— Ahora si... ¿Me perdonas?

— ¿Por todo esto? Seguramente voy a perdonar este San Valentin y cualquier otro que puedas olvidar.