Iguales

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#Hannigram #Iguales #OneShot #R18 

Hannibal Lecter era todo lo que cualquier hombre quisiera ser, millonario, atlético, creativo, inteligente y... Guapo.

Por eso era un misterio que a sus cuarenta años aún siguiera soltero.

— Uhmm... Delicioso. - Dijo al dar el último bocado a su tartar de corazón.

Extrañaría tanto Italia le gustaba pero era peligroso estar mucho tiempo en el país, después de todo en esta ciudad, Florencia es que él había renacido.

Siempre se había sentido incomprendido aún cuando todos pensaba que lo tenía todo, se convirtió en cirujano siendo muy joven, había escrito varios libros y cuando se cansó de todo simplemente lo dejó y se convirtió en psiquiatra, fue vigorizante pero al final lo terminó aburriendo.

Ahora finalmente se sentía completo había mezclado su dos pasiones la gastronomía y el arte.

Se mantenía viviendo de ciudad en ciudad con una máxima estadía de un mes así nadie podría atraparlo.

Terminó de comer y recogió toda su mesa antes de ir a ver sus dibujos. Anthony Dimmond era el precioso joven al que había pintado una última vez. Era fácil atraer chicos jóvenes y necesitados para ser pintados sin saber que sería la última vez que serían visto.

Al menos debía agradecer en la obra de arte que lo había convertido. Un corazón humano. Irónicamente, Hannibal solo uso su corazón para la preparación.

Dejo de ver los dibujos que había hecho de Anthony para ahora enfocar su mirada en el boleto de avión que a la mañana siguiente lo llevaría a América, esperaba que ese país le diera unas buenas musas que pintar.

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Will Graham era... Era todo lo que una persona de veinte años es se había independizado recientemente por lo que estaba viviendo a base de sopas instantánea, la universidad absorbía poco a poco todas sus energía y por si fuera poco debía trabajar en al menos dos trabajos para poder costear sus gastos... Él sólo quería ser el mejor perfilador del FBI y poder comprarse una casita en algún lugar lejano de todos y tener un montón de perros a los que amar y bueno... Si a eso podía añadirle una compañera de vida o un compañero no se quejaría, siempre y cuando se amaran el uno al otro, él sería feliz. Sabía que se tardaría, aún era demasiado joven pero.. se valía soñar ¿no?.

Como todas las mañanas revisó los anuncios del periódico con suerte encontraría un mejor trabajo y...

— Oh por dios... - se sorprendió al ver el anunció que solicitaba a un modeló para pintar, la paga era un monto exorbitante y él puede que sea una especie de ermitaño pero si había algo que Will Graham sabía era que... Era muy guapo no es que quería presumir pero puede que dios no le haya dado el privilegio de haber nacido en una familia funcional en cambio lo había privilegiado con una estructura ósea perfecta.

Marcó el número que tenía el anuncio y una voz varonil le contestó.

— Ehmm.. Estoy llamando por el anuncio en dónde requieren un modelo.

El hombre a través del teléfono se presentó como Hannibal Lecter, le dijo que le enviaría su ubicación por WhatsApp y que lo estaría esperando. A Will le gusto la voz del hombre.

Se despidieron y Will quedo en ir después de clases.

Cuando terminó su última clase, Will se fue directo a la dirección enviada. No le sorprendió encontrar una casa un tanto excéntrica en un barrio de ricos.

Tocó la puerta un par de veces antes de que la abriera, tuvo que reprimir una sonrisa al ver la expresión de sorpresa en el hombre que seguramente sería su nuevo jefe, porque si no se equivocaba y pocas veces lo hacia con el lenguaje corporal a simple vista estaba contratado.

Recopilación de Cortos HannigramDonde viven las historias. Descúbrelo ahora