Llegaron a casa del rubio realmente temprano, luego de ducharse y sin siquiera haber desayunado. Mentirían si dijeran que no estaban nerviosos; después de todo era martes por la mañana y deberían estar alistándose para ir a clases.
Además de eso, Heeseung no conocía al señor Sim, y Jake, por el contrario, lo conocía lo suficiente como para saber cómo podía llegar a ponerse cuando estaba enojado.
Había motivos de sobra para tener miedo.
Bajaron del auto, con inquietud en las facciones, y miraron hacia la puerta.
—Bien, repasemos. —se miraron. —Me quedé en tu casa para un maratón de series y simplemente perdimos la noción del tiempo hasta que se hizo de madrugada, ¿correcto?
—Así es. No pasó nada más. —asintió el mayor. —Por cierto, si pregunta por qué caminas raro, le diré que te caíste de la cama por la noche y tu trasero amortiguó el impacto. —sonrió divertido, reprimiendo una carcajada.
—Espera, ¿en serio se me nota al caminar? —se sonrojó viéndose la retaguardia. ¿Se le habían descuadrado las caderas? Imposible, no lo habían hecho tan fuerte... ¿o sí?
—Uh... solo un poco. Lo siento por eso. —rascó su nuca con un leve sonrojo.
—Y-ya no importa, solo entremos. —se dio unas palmaditas en las mejillas y ambos avanzaron para tocar la puerta.
Unos pasos apresurados se oyeron del otro lado, y ni dos segundos después, el señor Sim apareció del otro lado del umbral, con una expresión que pasó de la preocupación al alivio.
—¡Jake! ¿Dónde demonios te habías metido? No tienes idea de lo preocupado que estaba. —ahora se mostraba molesto.
—Lo siento, papá. E-es que...
—Fue mi culpa, señor. —Heeseung intervino. —Oh, es verdad. No nos hemos presentado. —se acercó. —Lee Heeseung. Es un gusto. —le extendió la mano con una brillante sonrisa.
El hombre la estrechó alzando una ceja.
—Ah, así que tú eres Heeseung. El mejor amigo de Jake, ¿no? —ambos asintieron, todo como habían acordado. El señor Sim soltó un largo suspiro. —Será mejor que entren. Ni siquiera han desayunado, ¿no?
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𝗦𝗛𝗬 𝗕𝗢𝗬
FanfictionLee Heeseung siempre lo había tenido todo. Dinero, chicas y cualquier cosa que se le antojara. Y estaba acostumbrado a ganar siempre y salirse con la suya. Tal vez por eso la llegada del tímido Sim Jake le causó tanta intriga. Aquel chico no hablaba...