Justo como estaba previsto, Heeseung no llegó a clases aquel día. Sin embargo, la noche anterior había hablado con Jake por teléfono durante horas a modo de compensación, porque, claro, si él no estaba, era seguro que el menor pasaría el día solo.
Y así era justo ahora. Jake estaba estudiando ahora que estaban en recreo y tenía algunos minutos libres, en el mismo rincón de la azotea en la que solía estar con Heeseung.
Y en el mismo rincón que vigilaban los compañeros de Jihoon.
—¿Seguro de que quieres hacer esto? —se comunicaban por teléfono. El mayor estaba asegurándose de que todas las puertas estuvieran cerradas, de modo que nadie subiera a interrumpir.
—¡Por supuesto que sí! Detesto muchísimo a Lee Heeseung. —gruñó furioso. —Quiero... quiero que sufra. Y su punto débil es ese mocoso. Solo cállense y hagan lo que acordamos. —cortó, y luego de revisar la última puerta fue en busca del pequeño, que inocentemente estudiaba en su rincón, inmerso en su libro como para notar que algo raro sucedía.
—Hey, tú. —llamó su atención.
Sim levantó la vista.
—¿J-Jihoon? —se puso rápidamente a la defensiva, poniéndose de pie. —¿Qué es lo que quieres? —frunció el entrecejo.
—Algo bastante simple. Haz las cosas fáciles para todos y quédate quieto, ¿sí? —se acercó, acorralándole en aquel rincón.
—¿Qué haces? A-aléjate de mí. —dejó caer su libro en su intento de alejarse, pero de la nada salieron dos chicos que le impidieron el paso.
—No irás a ningún lado, conejito. —le tomó por la mandíbula para ponerlo contra la pared. Los demás sujetaron sus brazos.
—¿Por qué me haces esto? ¿Por qué me odias? —los ojitos del menor se llenaron de lágrimas de desesperación.
—No es a ti a quien odio. —comenzó a meter una mano por debajo de su ropa, haciéndole tensarse. —Es a Heeseung.
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𝗦𝗛𝗬 𝗕𝗢𝗬
Fiksi PenggemarLee Heeseung siempre lo había tenido todo. Dinero, chicas y cualquier cosa que se le antojara. Y estaba acostumbrado a ganar siempre y salirse con la suya. Tal vez por eso la llegada del tímido Sim Jake le causó tanta intriga. Aquel chico no hablaba...
