Arquitecto de la vida
Era una mañana fresca, todavía no eran ni las 7. El sol apenas empezaba a romper la oscuridad en el cielo, cuando salió para comenzar con el plan. Su amante también había hecho su parte, por lo que la celosa Nanao no iba a venir para intervenir en su "negociación". Con carta en mano y corazón desbocado tocó a la puerta. Por el día y la hora no había secretaria, solo el caballero.
- ¡Buenos días! ¿Quién es...? - dijo la voz desde detrás de la puerta
- ¡Buenos días señor Kyokaru...! Soy Inoue Orihime. El señor Kuchiki me ha mandado para revisar los arreglos de la nueva propiedad qué me ha entregado... - dijo la chica
En ese momento se abrió la puerta. Era un hombre un poco mayor que Byakuya, con barba, cabello castaño, pero con un atuendo notoriamente más llamativo qué el de cualquier otro caballero qué hubiera conocido.
- Algo me comentó mi buen amigo, pero nunca dijo que fuera una niña tan joven y hermosa... adelante señorita Inoue... - dijo el de casa
La mujer respiró hondo, pasó saliva antes de entrar.
- Gracias... se que tiene poco tiempo así que seré breve y directa señor Kyokaru... - dijo la chica ingresando
- Por aquí señorita... ¿gusta una taza de té...? - dijo el caballero con rubor en las mejillas y una mirada lasciva
- Es muy amable... pero no le quiero causar problemas... - comentó desconfiada la pelirroja
- ¡Imaginó lo que debió decirle mi buen amigo...! Lo que pasa es que Byakuya se toma todo demasiado en serio... yo en cambio disfrutó de la vida... Dios hizo hermosas a las mujeres, ¿qué debo hacer más amarlas... aunque soy hombre no tonto... sé que hay quienes se aprovechan de esa debilidad... - se explicó el castaño jalando una silla para que la invitada pudiera tomar asiento
Esto le dio una idea a la inteligente adolescente.
- No le voy a mentir señor Kyokaru... yo soy una prostituta... simplemente estoy aquí para obtener algo a cambio de mi servicio... de mi compañía... incluso de mi cariño... pero yo no pido dinero... soy más de algo que yo necesito y a ustedes les sobra... además yo no me rijo por el pecado... porque Dios nunca me dio una oportunidad de ser una aburrida esposa... por lo que... - dijo la dama dejando caer su abrigo, mostrando su impresionante físico
Caminó a gatas por la mesa dejando frente al rostro del hombre sus encantadores senos. Lo que de inmediato desbordó el deseo del casado.
- Yo solo quiero una linda casa donde vivir... así que sólo quiero que me ayude con los planos para la remo delación... además se que es el mejor... por eso tiene el capitorio a su cargo... - dijo seductora tomando el rostro del hombre
- Bueno señorita... llegó al lugar adecuado... solo dígame... ¿cuál es la casa...? - dijo nervioso el arquitecto
- Es la pobre casa del fondo de la calle 224... - dijo la chica pasando sus dedos por los labios del hombre
- Usted entenderá qué esa propiedad está en mal estado y que va a ser costosa la remo delación... - dijo el astuto caballero
- Y usted también debe recordar que mi cariño tiene un precio razonable... porque yo no lo voy a chantajear como esas zorras... pero si lo voy a complacer como su esposa nunca a podido... solo hay un deseo que no le puedo cumplir porque no estoy atada... y es el de darle un hijo... - dijo osada la joven retirando los botones de la camisa de Syunsui
ESTÁS LEYENDO
La prostituta de la calle 224
FanfictionSí, la vida es difícil, pero especialmente dura para Inoue Orihime. Quien ha visto lo peor de la humanidad, no a tenido muchas alternativas para sobrevivir, por lo que se vio forzada a venderse. Sin embargo se aferra a la vida, a lo único que vale...