Izuku: Reglas de la Naturaleza

Capítulo 4: primer encuentro con un imperio criminal

Izuku sabía que la había fastidiado. Ahora la policía sabía de su existencia y de su forma de actuar. Y sin embargo no mató a los dos policías aquellos, incluso aun estando hambriento. Se suponía que no volvería a velar por nadie más aparte de sí mismo, pero las ambiciones de héroe que sus asquerosos padres le inculcaron antes de mostrar su verdadera naturaleza no parecían haberse apartado de él tal y como esperaba. Trató de excusarse con la idea de que si hubiese matado a los policías se hubiese vuelto enemigo público de las fuerzas de la ley, entre los cuales destacaban los héroes más poderosos y peligrosos de todos, y si lo descubrían, capturaban y metían en la cárcel, no quería saber lo que su madre aún viva haría con sus vínculos con los héroes con tal de fastidiar su existencia en prisión. Definitivamente lo mataría... y no podía permitir eso. No iba a permitir que nadie lo matara. Eso era. Trataba de evitar ser descubierto por los héroes precisamente porque no podía hacerlos desaparecer y esperar a que nadie lo notara. Lo de los policías fue sólo porque lo hubiesen fichado con un rango de peligrosidad que le hubiese puesto una enorme diana en la espalda la cual todavía no era lo suficientemente fuerte como para soportar.

Ahora solamente trataba de buscar comida en los contenedores de comida rápida por las noches, ya que generaban desechos "comestibles" mucho más rápido que las otras cadenas convencionales. En algunas ocasiones llegaban trabajadores de las cadenas para tirar la basura, y siempre se ocultaba a tiempo mimetizándose con la oscuridad para evitar ser visto. Era simple, sencillo, e incluso humillante, pero lo mantenía con vida, que era más de lo que podía decir de su "vida" con sus padres. Aun así, igual sentía que le faltaba algo... algo de emoción, más allá del pánico constante de la idea de cruzarse con alguien que pudiese matarlo. Ahora se dedicaba a evitar a la ley, ¿pero no es eso lo que hacen las presas? ¿No quería volverse fuerte para no tener ese sentimiento de debilidad nunca más? ¿Por qué cuanto más comía más pensaba en estas cosas? ¿No se suponía que no tenía que pensar nada, no dudar nunca ni arrepentirse, y simplemente actuar por instinto?

Una de estas noches, mientras devoraba todo alimento de la basura que no oliese o supiese a mierda total, su instinto le dijo que se escondiese, a lo que rápidamente se introdujo de cabeza en el contenedor en el que rebuscaba, mientras de fondo escuchaba un par de voces femeninas pasar por la entrada del callejón.

???1: de verdad, no entiendo el punto de hacerme tirar la basura de tu local.

???2: así dejas de pedir triple ración de pollo frito, que luego no te terminas comiendo y lo tengo que acabar tirando cuando te vas. Si te hago que tires lo que no te comes, empezarás a pedir menos y así aprenderás el valor de la humildad. Lo leí en una revista de psicología y de tortura psicológica.

??1: no fastidies, ¿y qué andas haciendo leyendo esas cosas? Ni que fueses a torturar psicológicamente a alguien.

???2: de hecho, me llegó un nuevo paquete de criminales enemistados con nuestro imperio, así que, de hecho, sí voy a hacer eso. Desde luego el miedo que infunde el nuevo vigilante en el subsuelo es lo más conveniente que nos podría haber sucedido en las últimas semanas. Las bandas menores no dejan de cometer errores desesperados por no desaparecer misteriosamente por su mano. Imagínate mi sorpresa al enterarme de que sólo es un niño perdido en la calle sin saber qué hacer.

Esas dos mujeres... ¿estaban hablando de él? Y aún peor, ¿formaban parte de un imperio criminal secreto? No, aún peor, ¡¿cómo sabía que era un niño?! Los únicos que lo habían visto y podían relacionarlo con el nuevo rumor del bajo mundo eran... oh. No había oído hablar nunca de tales organizaciones, pero de nuevo, como niño pequeño sólo conocía a los villanos que salían en televisión y en noticieros. ¿Acaso estas organizaciones eran capaces de introducir sus miembros de encubierto en la policía? Definitivamente su vida corría peligro si por su estupidez ahora estaba en la mira de un reino de villanos, especialmente si son tan fuertes y hábiles como los héroes, pero con la diferencia de no contenerse para no matar.