Una noche más

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-Y te acordas la primera vez que fui a tu casa?- pregunto Exe con una sonrisa.

-Como olvidarme cuando te 'caiste' accidentalmente sobre la pizza esa noche- recordé con una sonrisa y el rodó los ojos.

-Momentos que me mantienen humilde- admitio asintiendo.

-La primera vez que te fui a ver jugar? Ya de novios?

-Si, te dedique el primer hack trick de mi carrera, estaba inspirado.

Me acomode en la cama, para poder ver mejor a mi pareja.

Eran las once, la noche era joven y nosotros aún más.

-Ya vengo- avise levantándome de la cama para ir al baño.

-Que estas haciendo?- pregunto mi pareja al asomarse por la puerta del baño.

-Deci que nada que no se pueda ver- rode los ojos- voy a hacer mi rutina de skin care.

-Skin que? Yo solo conozco las de minecraft.

Entro por la puerta y se puso al lado mio.

Acomode mi vincha y me lave la cara con agua fría primero.

-Vos también queres?- pregunte con una sonrisa, el frunció el ceño- dale amor.

Bufo- bueno, solo esta vez y ojo con lo que me pones Zoe.

Me puse feliz, busque entre mis cosas otra vincha, esta era celestita, le quedaba bien.

Me acerque a él para acomodarsela. Exequiel, ni lento ni perezoso, agarro mi cintura y acercó mi cadera a la suya.

Yo no dije nada, una vez termine con lo mío, me aleje para buscar que ponerle ahora.

-Bueno, lo primero es lavarte la cara- dije y el se acercó para hacerlo- ahora te voy a poner una crema exfoliante.

Me puse un poco en las manos y se la pasé a mi novio, Exe vio pote rosa confundido, leyendo las instrucciones o algo así, mientras yo pasaba la crema por su cara.

-Quieto, quieto- lo rete.

-Me va a entrar en el ojo boluda- trataba de moverse pero lo sujete de los hombros.

Negue con la cabeza y yo también me puse la crema, para después engañarme.

El hizo lo mismo y pase a la mascarilla.

-Para, esta es la mascarilla negra que se ponen todos los polleras que suben historias beboteando con sus novias?- pregunto mi novio con una ceja alzada, yo asenti- a bueno.

Pase la espongita cuidadosamente por su cara, apreciando cada detalle en su rostro.

-A ver, sonrei- pedí y el hizo caso- mi amor, esos hoyuelos, yo quiero que mis hijos salgan con esos hoyuelos.

-Cuando quieras empezamos- me guiño un ojo y yo sonreí- yo también puedo pedir?- asentí- quiero que si tenemos una hija, salga con tus ojos.

-Con los míos? No, mejor tus ojitos, me encantan, ojitos de cachorrito.

El nego- na, yo pedí los ojitos primero, vos los hoyuelos, si sale así, fua, alta bendi nos hacemos.

Me aleje de el y espere a que la mascarilla se seque.

-A enjuagar Zeballos- anuncie abriendo la llave del agua.

-No, para- se acercó al espejo y sacó el celu- quiero la foto.

-La de pollera?- pregunte y el asintió, bueno.

El sonrió y pasamos para la foto, me daba risa como salió mi novio, con la mascarilla y puso el típico filtro de instagram, luego la subió a historias.

-Para, esta no es la que se saca estirando no?

-No- negué y el suspiro abriendo el agua.

Busque entre mis cosas y sonreí cuando encontré lo que buscaba.

-Ahora esta amor.

El me miro y se sento en el inodoro, abrí el pote y le puse la mascarilla.

-'ta fria- hizo una mueca cuando el líquido hizo contacto con su rostro.

Esperamos a que se seque la mascarilla, una vez pasado el tiempo, Exequiel se acercó a la pileta.

-Amor- llame antes de que abra la llave, el me miro- esa no se lava.

El abrió los ojos.

-Me pusiste la mascarilla que te arranca la jeta?- yo asenti- que hija de puta, ahora que hago?

-Hay que pasacartela, o queres vivir con la cara dorada para siempre?

-Yyy, mientras no sufra, puedo acostumbrarme.

-No Exe- negué acercandome a el y sentandolo en el inodoro.

Aproveche este momento para grabarlo, a la gente le gustaría verlo.

-Bueno amor, sin miedo- dije refregandome las manos- si no sufris, no sos de Boca.

El me miro mal- maldita.

Me acerque a él y empeze a estirar.

O eso trate.

-No, Nono, deja, deja- agarro mis manos y las alejo de su cara.

-Exequiel no seas maricon.

-Que maricon? Ponete vos esta mierda y arrancante la mitad de la cara con esto.

-Si yo me pongo esto casi todas las semanas- le dije y el abrió los ojos- la belleza duele Exequiel- vamos a hacerlo o no?

-Bueno, dale- suspiro- hacelo ya.

Agarre su cara con una mano y con la otra la mascarilla, y la estire.

-Noooo, hija de puta- Exequiel se agarro la cara y se agacho, adolorido- ya terminaste?- pregunto con un hilo de voz.

-Exe, amor- me agache y tome su hombro- solo te saque el primer pedazito.

El lloriqueo y volvi a repetir el proceso.

Una vez termine, agarre el celu y apague la grabación. Agarre la mano de mi adolorido novio y lo lleve a la cama.

-Ahora con que me vas a hacer sufrir?

No dije nada, volví al baño y traje una mascarilla rosa para que se refresque la piel y no se queje más.

-Mejor?- pregunte al ponerle la mascarilla rosa, el asintió- viste que no fue tan malo?

-Si, la pija- dijo molesto y yo golpe su hombro- quiero dormir.

-Bueno, te ganaste una siestita.

Lo deje a mi novio durmiendo mientras yo baje a la cocina.

Busque algo para picar con el, encontré un pote de helado de oreo que habíamos comprado en otro día, bueno, ayer.

En el camino me encontré a mis hijos y los hice subir para ánimas a su papá.

-Milo, Batman, arriba- me senté en los pies y palmee el acolchado.

Ellos corrieron y saltaron hacia la cama, cayendo sobre las piernas de Exe, quien se quejo.

-Ay, malditos- se enderezó, aun con la mascarilla y acaricio a los animales- para mi?

-Para los dos nenes- hice montoncito u me sente a su lado.

El me agarro de la cintura y me subió a su regaso, yo le di una cucharita y empezamos a comer.

-Un pa' Milo- dijo exe.

-No amor, mira si le hace mal.

-Un poquito, mírale la carita, se está muriendo de hambre- exagero y agarro la cara del perro para mostrarmelo- miraloo.

-Bueno- suspire rendida- un poquito nomas.

El chico asintió y le dio un poco de su cuchara al perro, luego repitió su acción con Batman.

-A ver- me acerque a su cara y le saque la mascarilla- quedaste rojito amor.

-No me digas, genia- dijo de mala gana.

Sonreí y le di un beso, el me dejo ver sus hoyuelos.

Llamar tu atención | Exequiel ZeballosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora