La rosa escarlata

Capitulo 61

(traducido al español por las queridas Anneth y Nuria)

"Archie..." Dijo con un suspiro en el momento en que vio a su primo de pie, frente a ella.

"Por fin." La voz coincidía con su apariencia.

Enojada.

"¡Archie! ¿Por qué estás aquí?" Preguntó con voz abrupta y le dio la espalda. No había esperado una respuesta de él. No estaba de humor para ninguna de sus bromas o insinuaciones. Ciertamente no estaba de humor para pelear. No tenía ningún deseo de ver a nadie en ese momento.

"Bueno, discúlpame por querer ver a mi prima antes de irme a París. Fuiste toda una fiestera anoche..." Dijo mientras la seguía.

Eso sí, desde aquella peculiar visita mañanera de Christian a su casa, él tenía que estar pendiente de ella, a pesar de la falsa excusa que le dio. La forma en que ella lo dejó entrar a su casa avivó su curiosidad, que superó su molestia al llamar a su puerta varias veces sin obtener respuesta. Incluso había empezado a preocuparse, la verdad sea dicha. Se dio cuenta de la forma en que ella caminaba, arrastrando los pies con cansancio, en lugar de caminar de verdad, llevaba los hombros encorvados... Luego ella se giró.

"¡Te ves terrible!" Soltó y luego se arrepintió de esta reacción grosera y descuidada suya cuando realmente notó su apariencia. ¿Cómo no se dio cuenta cuando ella abrió la puerta?

Ojos inyectados en sangre, hinchados... luciendo demacrada y pálida, cabello desordenado. Seguía apretujando esa túnica sobre su cuerpo.

"¡Gracias Archie!" le respondió, sonando lastimada. Cruzó los brazos sobre su pecho. "Ahora que comprobaste cómo estoy puedes irte si quieres". Sus ojos verdes se agitaron. Se quedó allí, sin pedirle que se sentara, ni ofrecerle nada.

A pesar de su evidente deseo de no darle la bienvenida, mostrándolo tan claramente como la luz del día, fue igualmente algo muy inesperado y profundamente preocupante, tanto que la culpa se apoderó de él. "¡Oh, lo siento cariño!" Se apresuró a disculpar su tono anterior. "Me tomaste por sorpresa, eso es todo. No te ves bien, Candy".

Él siguió mirándola. Notó cómo su mirada estaba vacía de luz, como un cielo sin estrellas. Cómo la apariencia que intentaba mantener, aunque de manera breve, se derretía como pintura fresca bajo la lluvia. Esa lluvia que hacía brillar su mirada verde.

"¡¡Candy!!" Levantó la voz, preocupado por lo rápido que ella se estaba desmoronando frente a él. Le pidió que se sentara y se sentó a su lado. Observó los arroyos silenciosos que rodaban por sus mejillas. Le dio su pañuelo.

"¿Qué pasa? ¡Dime, por favor! ¿Por qué estas lágrimas?" Le preguntó después de permanecer en silencio por un tiempo, dudando en insistir, especialmente cuando estaba al tanto al menos de algunas.

Las palabras de Christian resonaron en su mente desde aquella mañana...

**

"¿Y cómo sé que una vez que te haya dado este informe desaparecerás?" Archie le preguntó.

"Pregúntale a Candy cuando la veas esta noche".

**

Parecía que Christian había dicho la verdad. Su relación con Candy había terminado. Por lo que estaba viendo frente a él, ella estaba realmente angustiada por ello. Sin embargo, decidió dejarla develar lo que tenía ganas de develar. Fingir que no sabía nada de lo que pasó.

Los arroyos se convirtieron en ríos. Ella estaba inmersa en aquello, arrastrada por la intensidad. ¿Qué podría decirle ella?

¿Qué Christian la dejó y ella no tenía idea de dónde estaba?