CAPITULO 31

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- Goldheart querido un día me amaras- canturreaba la mujer-, y ese día conmigo bailarás.

Ya no había más lugares en donde rayar, en una de las esquinas de su habitación confinada estaba un montoncito de pulmones con tonalidades rosadas, hubo un pequeño fallo en la electricidad y ese microsegundo fue suficiente como para que entrara el visitante sin ser descubierto.

- Cecilia - la llamo-,¿cómo has estado?

La mujer, aunque molesta por como le habían llamado, volteó con una sonrisa enfermiza a ver al chico con la bolsa en la cabeza que la había ido a ver después de tanto tiempo, se acercó corriendo al plexiglás que la separaba de su viejo admirador y apoyo las manos en el, Flug no le correspondió, había entendido que Cecilia no era nada bueno para su vida, pero necesitaba hacer esto.

Se acercó un poco más a la barrera que los separaba, viendo con lástima a su ex amor.

- Kenny, que bueno que viniste a verme- decía emocionada la chica-, me vas a sacar de aquí, ¿verdad?

El villano suspiró, irónicamente, odiaba utilizar a las personas, pero era un mal necesario para su cometido.

- Si, voy a sacarte- la mirada de Amanda se iluminó-, pero necesito que hagas algo por mí primero.

La sonrisa de Heed se borró de su rostro y lo miró, molesta.

-¿Enserio vas a utilizarme?, nunca cambias Kenning, no haré nada por ti.

- Entonces es mejor que me vaya- Flug se alejó del Plexiglás, dándole la espalda a la prisionera.

"Va a cambiar de opinion", pensó el científico, "En tres...dos..."

-¡Espera!- exclamó la mujer.

"Lo sabia", Flug volteó a verla.

-¿Que necesitas de mi?- pregunto con ojos suplicantes.

-¿Que necesitas de mi?- pregunto con ojos suplicantes

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El Sol Negro //Kaleb x Lectora//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora