_ Lamento decirles esto, pero necesito que decidan si quieren que desconectemos a la paciente, o seguirán manteniéndola con vida gracias a las máquinas, ya de va a cumplir un año y se que es difícil pero cada día que pasa las esperanzas de que despierte son menos, así que es mejor que decidan que hacer -el médico lo dijo lo más comprensible posible.
En un mes se cumpliría un año desde lo sucedido, y Lisa no daba señales de recuperación, todo seguía igual, según los médicos las actividad cerebral de Lisa era muy poca y en cada examen que le hacían se reducía más.
Un año apunto de cumplirse donde Jennie casi no dormía, donde todas las noches lloraba junto a la cama de Lisa, le dolía el hecho de verla conectada a demasiadas máquinas, máquinas que aún la mantenían con vida, cada mañana al despertar tenía la esperanza de abrir los ojos y encontrarse con los de Lisa, y escuchar esa voz diciéndole que todo había sido un mal sueño y que todo iba a estar bien, pero cuando despertaba se encontraba con la cruda realidad, Lisa postrada una cama aunque pareciera estar dormida no lo estaba, estaba debatiéndose entre la vida y la muerte.
Todos al escuchar las palabras del doctor permanecieron en silencio, el ambiente se convirtió en nostálgico, Jennie con lágrimas en sus ojos observo a Lisa y luego salió rápidamente de la habitación, se negaba a dejar ir a Lisa, no soportaba el solo hecho de imaginarse una vida sin ella.
Jennie llegó a la azotea del hospital, se sentó en una de las varias bancas, miró al cielo con sus lágrimas corriendo por sus mejillas.
_ ¿Por qué?, ¡¿Por qué maldita sea?!, ¿Qué hice para estar pagando de esta forma?, ¡¿Qué hice?!
Jennie no soporto más, y le grito al hombre que hace llamarse Dios, le siguió gritando todo el dolor que tenía dentro, Jennie se puso de pie mientras gritaba al cielo.
_ ¡Solo te estoy pidiendo una sola cosa!, ¡una sola cosa!, ¡¿POR QUÉ NO ERES CAPAZ DE CUMPLIRMELA?!, ¿por qué? -susurro lo último cayendo de rodillas.
Sintió unos brazos rodeándola, Jennie se aferró al cuerpo que la abrazaba.
_ Te entiendo Jen, todos estamos en las mismas condiciones, pero se que a ti te afecta más.
_ Ya no se que hacer Irene, quiero desaparecer si llego a perder a Lisa, no quiero ni imaginármelo -dijo Jennie con voz sofocada.
Irene no sabia como decirle lo que anteriormente estuvieron hablando todas, junto con los padres de Jennie, se ofreció para hablar con Jennie.
_ Se que es difícil Jen, pero ya ha pasado mucho tiempo y como a ti nos cuesta aceptar la realidad, pero ya es momento de hacerlo, Lisa ya no despertará y es mejor hacer lo que es correcto y dejarla descansar, se que es difícil Jen pero ya es hora de aceptar la realidad.
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_ Tienen diez minutos para despedirse, vendremos luego para proceder -habló el médico, saliendo con las enfermeras.
Todos empezaron a despedir a Lisa, sus amigas, Irene y los padres de Jennie, siguió Lía.
