Capítulo 27

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Daryl Lombardi

Abro los ojos, encontrándome con el perro delante de mí, mirándome fijamente. Mantiene su pata vendada en el aire, sin apoyarla en el suelo. Estiro mi brazo hacia él, tocando su cabeza antes de levantarme. Miro en el móvil la hora que es, soltando un suspiro al ver un mensaje de un número desconocido, reconozco que será de Marcus. Y otro mensaje pidiéndome perdón, que le pertenece a Trey.

Le envío la dirección de mi casa a Marcus e ignoro a Trey, decidiendo darme una ducha antes de contestarle. El perro me persigue hasta el cuarto de baño, esperándome en la puerta con su mirada clavada en mí. Sé que quiere dar un pequeño paseo por la ciudad para hacer sus necesidades, pero eso tendrá que esperar un poco.

Termino de ducharme, envolviendo la toalla alrededor de mi cintura. Dejo que mi cabello se seque por sí solo mientras continúo secando mi cuerpo con la toalla, preparándome para vestirme y dar una pequeña vuelta con el perro para que haga sus cosas y regrese a la casa a descansar. Marco a Trey por el camino, sosteniendo la correa del perro que todavía sigue sin nombre.

—Daryl, ayer me...

—Ayer te comportaste como un capullo —asiento.

—Lo sé, y perdón por eso.

—Ya.

—No esperaba que Marcus me traicionara así y lo pagué contigo. Créeme que Arlette ya me dio una gran charla por haberte dicho todo eso ayer, se enfadó conmigo y no me dirigió la palabra en toda la noche.

—Jódete.

Me salió del alma decirle esa palabra que expresa lo que realmente pienso. Desvío mi atención hacia el perro, camina pegado a mí, tratando de alejarse de las personas que pasan por nuestro lado. Continúo caminando con lentitud, yendo a su ritmo. Observo que se aleja un poco para hacer sus necesidades y vuelve a mi lado.

—No quiero estar mal con la persona que me está ayudando a averiguar quién quiere matarnos —admite.

—Habértelo pensado antes de atacarme por nada.

—Perdón —repite, soltando un suspiro—. ¿Una cerveza esta noche en mi casa y lo arreglamos?

—En la mía.

—Como quieras.

Le cuelgo antes de estamparme contra una farola por estar pendiente a él.

Reanudo el trayecto, volviendo a casa mientras mantengo mi vista en el móvil. Investigo un poco dónde queda la casa de esa señora, Helma, la madre de Cody Reed, y sí, está a unas cuantas horas de la ciudad. Cuatro horas aproximadamente. Podría ir a investigar con Trey, ya que esto se trata de un asunto suyo, no mío. Y si me involucro es para salvarles el culo sin tener remordimientos de consciencia por si les pasa algo. Si puedo detener cualquier posible ataque y saber quién está detrás de esto, mejor.

El tema de Archie sigue haciéndome ruido.

¿Por qué poner el nombre de Cody Reed y firmar por un muerto? Bueno, Cody Reed en teoría también está muerto.

¿Y si es la nueva identidad de Archie Joyce?

¿Y si en verdad son dos personas y no una, como creemos?

¿Y si detrás de todo esto hay más gente de la que pensamos? Porque si el móvil es la herencia, toda la familia o la mayor parte de ella podría estar involucrada.

Llego a mi casa, viendo un coche estacionado frente a ella. Esperando en el exterior del portal veo a Marcus, le hago un gesto con la cabeza para que me siga al interior de mi hogar. Hay algo con él que no me termina de cuadrar. Nunca me encajó que fuera él el traidor y viendo lo de ayer... a pesar de las pruebas... sigo dudando de ello.

La debilidad de Daryl ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora