𝘴𝘪𝘦𝘮𝘱𝘳𝘦 𝘦𝘴𝘵𝘢́ 𝘭𝘢 𝘧𝘢𝘮𝘪𝘭𝘪𝘢

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-¿Qué le sucede a papá Jae? -inquirió el menor.

Desde hacía unos días que su padre no se salía de su cuarto, mucho menos compartía las comidas con ellos, era sábado y siempre compartían un grato almuerzo juntos. Jeno se encargaba de preparar la comida y antes de sentarse a comer, preparó una bandeja con un plato para su padre y se la llevó.

Jeno lucía algo decaído, y era cierto que había estado evitando el tema con Jisung, Jaemin tampoco se encontraba en condiciones de tocar el tema.

-Hay algo de lo que debo hablar contigo, cariño.

Jisung se tensó en su lugar, su padre se notaba bastante tenso, e incluso nervioso, eso no parecía ser una buena noticia.

-Esto tendríamos que hablarlo los tres, pero tu papá no se encuentra bien en estos momentos -soltó el mayor, poniendo más nervioso al chico.

-¿Hice algo malo?, ¿papá está enfermo?

-No, cariño, no pienses eso, esto no tiene que ver contigo -Jeno tomó con suavidad la mano del menor-. Papá Jae, no va a tener al bebé, Jisung.

El saber que no estaba en problemas le alivió un poco, pero las palabras que su padre había soltado, le dejaron un amargo sabor en la boca y una extraña opresión en el pecho.

-¿P-por qué?

-Se hizo los estudios, y los resultados dicen que no hay bebé -los ojos del pelinegro se notaban brillantes ante las lágrimas acumuladas-. El doctor nos explicó que es algo que suele suceder, ante situaciones de estrés o cosas por el estilo y por supuesto, papá no se encuentra bien ante la noticia.

Jisung tenía una combinación extraña de sentimientos encontrados en su interior, estaba realmente triste ante la noticia, él anhelaba con tener un hermano o hermana, y era desconsolador saber que no lo tendría, pero lo que más lo ponía mal, era saber que su padre se sentía todavía peor. Podía sentir todavía la mano de su padre sobre la suya, sintiendo el cálido tacto que le reconfortaba.

El menor se levantó y se aproximó a su padre para abrazarlo, siendo correspondido al instante.

No hacía falta las palabras entre ellos, algo que era común en su relación, donde con simples actos lograban expresar lo que sentían.

Jisung se separó y corrió hasta la habitación de sus padres, siendo seguido por Jeno, que intentó detenerlo. El menor abrió la puerta de la habitación, encontrándose con la imagen de su progenitor hecho un ovillo entre las frazadas, su rostro estaba pálido y su nariz enrojecida. El rubio lo miró sorprendido, casi asustado de que su hijo lo viera en ese estado, pero eso era lo que menos le importaba a Jisung, corrió hasta su padre y lo abrazó con todas sus fuerzas.

-Lo siento mucho, papá -una lágrima resbaló por su mejilla, secándola con la camiseta de su padre-. Por favor, no te sientas culpable.

Jaemin quedó anonadado, correspondiendo el abrazo de su niño, mientras Jeno los veía preocupado desde el marco de la puerta, adentrándose a la habitación en silencio, para luego acercarse a su familia y envolverlos entre sus brazos.

El rubio se dejó consolar por la calidez de las dos personas que más amaba en el mundo, dejando de sentirse solo y desesperanzado.

...

Jaemin había aceptado las recomendaciones del doctor Kim e ir a terapia, aunque al principio tenía sus dudas y miedos, tenía muchas ideas equivocadas ante el concepto de tomar terapia, que fueron desechadas en su primera sesión, la doctora resultó ser una mujer muy agradable, logró hacerlo sentir cómodo y que le tuviera la confianza de hablar de sus temas privados, sin miedo a ser juzgado.

-Por lo que hemos venido hablando en estas pocas sesiones, y la razón por la que estás aquí, claramente, has venido experimentando situaciones de estrés, esto puede ser a causas de varios factores, quizás por el día a día, el trabajo o a veces situación equis -habló la mujer desde su lugar-. Pero también puedo notar un poco de ansiedad, usualmente esta se suele dar por un exceso de pensamientos, en su mayoría negativos y siempre ubicados en el futuro. Cosas que todavía no sucedieron, pero aun así, en el presente, te causan conflicto, ya sea, miedos o preocupaciones.

>¿Crees tener una idea de lo que lo pueda causar?, ¿hay algo que te atormente?, ¿tienes miedo de que algo suceda?

El rubio trató de procesar la información dada por la profesional. Luego sopesó las preguntas que le había planteado.

-Mmh, bueno, de tener miedos, tengo varios -sonrió nervioso, aclarando su garganta-. Pero miedos a cosas que podrían ocurrir... Pues, debo admitir que todavía permanece en mí, el miedo de tener otro bebé, lo que pasé con Jisung fue realmente horrible y es algo que no me gustaría volver a experimentar.

-Entiendo, Jae, eso es algo que, por supuesto, hay que trabajar, es la raíz de todo esto, ¿hay algo más?

-Jisung -contestó sin pensarlo demasiado.

-¿Qué hay con él?

-Como sabe, es mi primer y único hijo, casi lo pierdo, eso es algo que me perseguirá toda la vida y el solo pensar en lo grande que está, que en cualquier momento querrá hacer su vida y-

El rubio quedó con oración a medio terminar, interrumpido por sus propios pensamientos, que le revelaron algo que nunca antes se había dado el tiempo de analizar.

-¿Qué es lo que pasó por tu mente, Jaemin? -cuestionó la mujer.

-Me estoy convirtiendo en mi padre.





































































el finde pasado estuve medio inspirada y escribí dos capítulos, subiré este y veo si el otro lo subo este finde

𝘛𝘩𝘦 𝘊𝘶𝘳𝘪𝘰𝘶𝘴 𝘉𝘢𝘣𝘺 ─ 𝙉𝙊𝙈𝙄𝙉Donde viven las historias. Descúbrelo ahora