𝘛𝘩𝘦 𝘊𝘶𝘳𝘪𝘰𝘶𝘴 𝘉𝘢𝘣𝘺 ─ 𝙉𝙊𝙈𝙄𝙉

𝘱𝘢𝘳𝘵𝘦 𝘥𝘦 𝘮𝘪 𝘱𝘢𝘴𝘢𝘥𝘰

Jisung estaba realmente contento, quería gritar a los cuatro vientos que tendría un hermanito —o hermanita—, pero era algo íntimo de la familia, algo que no se haría saber hasta que los trámites estén en su mayoría completos.

Cuando sus padres se lo contaron, lloró de la emoción, porque por fin se cumpliría uno de sus deseos y adoraba ver la felicidad que invadía a sus padres, era una alegría para toda la familia.

Jeno quería contarle la noticia a sus padres y tía, intentó invitar a su madre a la casa, pero ella insistió en preparar un gran almuerzo en su casa. La pareja moría de nervios ante dicha noticia, ambos habían dedicado semanas y semanas para reunir todo lo necesario para la adopción, junto a la ayuda de una abogada que los guiaba en el proceso.

—Espero que a mis abuelos les agrade la noticia —espetó Jisung, antes de que su padre detuviera el auto en la casa de su abuela.

—De eso estoy más que seguro —alegó Jeno.

Como cada vez que iban a casa de sus abuelos, la familia los recibía bien y con los brazos abiertos, con una sonrisa en el rostro y miles de besos disponibles por parte de Tiffany y Giselle.

Al ingresar al hogar, los recibió el aroma del almuerzo listo y la mesa ya estaba preparada.

Cada uno tomó su lugar en la mesa y Tiffany rezó como siempre solía hacerlo, le gustaba agradecer por los alimentos y por su familia, aunque Jeno y su familia no lo practicaban en casa, respetaban las creencias y costumbres de su madre.

—Espero que disfruten la comida, mis amores —dijo Tiffany con una dulce sonrisa en su rostro.

—Gracias, abuela.

—Me sorprende ver que Jisung no vino con su garrapata —comentó su tía, con un tono burlón.

Sus padres rieron ante el comentario.

—Hablas de Chenle. Él no es una pulga, es mi mejor amigo, tía.

—No lo sé, vive pegado a ti y siempre está mirándote —acotó nuevamente su abuela.

—Eso es porque seguramente está enamorado de nuestro Jisunggie.

—¿D-de qué hablan ustedes d-dos?

Jisung estaba rojo de pies a cabeza, mientras sus padres se miraban entre ellos con disimulo, e intentaban no aportar ningún extra.

—¿Te gusta ese niño, cariño? —el menor miró a su abuela como si tuviera dos cabezas.

—N-no, abuela. E-es mi mejor a-amigo.

—Está bien, cielo. De todas formas, no tiene nada de malo.

El menor quería esconderse debajo de la mesa o simplemente, desaparecer. Era de verdad vergonzoso hablar de aquello con su familia, nunca creyó ser tan obvio con sus sentimientos.

Jaemin sintió algo de pena por su niño, casi estaba temblando de la vergüenza y escondiendo su rostro sonrojado, así que, decidió cambiar de tema y darle un respiro al pobre Jisung.

—Esta vez, quisimos ser solo nosotros, estar en familia —miró a su esposo y este le tomó la mano por encima de la mesa—. Ya que tenemos algo importante que contarles.

Al oír aquello, incluso Jungmyeon dejó de comer para prestar atención. La familia conocía ese tipo de conversaciones, primero fue: "Somos novios". Luego: "Vamos a vivir juntos", y así, también se enteraron de que serían abuelos y que Jeno y Jaemin se iban a casar.

—¿Y qué es? —preguntó Giselle, inquieta como siempre.

—¿Se van a separar? —susurró Tiffany, mirando de reojo a su nieto.