Fernando
Estoy más nervioso que la chucha.
Hoy me iba a juntar con la Valentina, después de hablar mucho tiempo por chat llegamos a la conclusión de que nos juntáramos para conocernos más.
La estaba esperando en el paradero en el que habíamos quedado, mientras me veía en la cámara del celular para ver si me veía decente o no.
Me veo rico.
—Hola. —saludaron a mis espaldas.
Los nervios empezaron a crecer al darme cuenta y la realidad me sacó la chucha al ver a la mujer que tenía en frente. Era más baja que yo, tenía muchos lunares por el rostro y ojitos cafés que con el sol se volvían más claros.
—Hola. —le dije y me acerqué a darle un beso en la mejilla. —Pensé que veniai en la micro que estaba por llegar.
Negó y miró sus pies, nerviosa. —Preferí venirme caminando.
Me reí y la volví a mirar fijamente.
Demasiado hermosa.
—¿Vamos? —le pregunté antes de empezar a caminar. Ella asintió y se posicionó a mi lado.
—¿Te tinca si vamos a comprar unos helados primero?
Asentí. —Dale.
Supongo que era normal que ella estuviera tan callada porque bueno, a pesar de que hablábamos todos los días, era primera vez que nos conocíamos en persona y no sabía cuál de los estaba más nervioso.
El celular me vibró y lo alcé para ver quien me había escrito.
El Luciano.
Lucianoperkin:
COMO TE FUE
SUCEDIÓ ACCIÓN O NO
CUÉNTAME TODO😘😘Me reí y lo guardé.
—Mi amigo es hueón. —le dije y la miré para que no pensara...No sé, cualquier huea que la pudiera hacer sentir mal. —Me escribió para preguntarme si ya te había visto.
—El Franco o el Luciano? —preguntó sonriendo.
—El Luciano. —le dije, mirando la calle para cruzar. —El Franco debe estar con la Keyla.
—¿Ellos se quieren mucho? —me preguntó.
Suspiré.
—Supongo que sí. —le dije y ella me miró extrañada. —O sea sí en verdad, se quieren harto.
—Que lindo. —me dijo. —Por lo que he visto en el insta de la Keyla, lo quiere muchísimo.
—Están enamorados. —le dije tratando de acercarme más a ella para romper con la vergüenza que aún nos invadía. —Es lindo ver a la gente quererse tanto.
—Lo mismo opino. —respondió. —Creo que el amor es lo más lindo que podemos tener.
La quedé mirando, mientras esperábamos el semáforo ponerse en verde para cruzar.
—¿Tengo algo? —me preguntó urgida.
Negué. —Eres preciosa Valentina.
Se me salió en verdad, solamente solté lo que mi mente pensaba sin procedarla tanto, sin pensar si sería incorrecto o muy intenso.

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¿Escapémonos?
Teen FictionUn capricho para él y una ilusión para ella, hasta que el capricho se convirtió en su más grande debilidad, mientras que para ella su ilusión se transformaba en realidad sin llegar a imaginar las consecuencias que tendría. ¿Que chucha podría salir...