one shots; formula one ㅡㅡ esp. 🏎️🔥

𝙋𝙞𝙚𝙧𝙧𝙚 𝙂𝙖𝙨𝙡𝙮 [𝙎]

✨️ french lesson ✨️

▄▀▄▀▄▀▄▀▄▀▄▀▄▀▄▀▄▀▄▀▄▀▄▀▄▀▄▀▄▀▄▀▄▀▄▀▄▀▄▀▄▀▄

   Mientras subía hacia el piso del apartamento de Pierre, revisaba que tuviera todo lo que necesitaba llevarle aquel día. Quién diría que a él le encanta leer, y yo puedo conseguirle todos los libros que él quiera.

   El ascensor marcó el séptimo piso y con una marcha algo nerviosa, caminé hasta el final del pasillo para golpear su puerta con mis nudillos.

— ¡Está abierto! —oí su voz desde adentro, así que simplemente pasé.

— Hola Pierre —saludé a la distancia mientras colgaba mi abrigo en la entrada. Me acerqué hacia él y le di un pequeño beso en su mejilla como solíamos saludarnos.

   Estaba vestido con una bata azul, los bordes eran rojos. Estaba parado frente a la tetera, haciendo un poco de té.

— ¿Quieres? —dijo, ofreciéndome una taza. Yo estaba congelada, por lo que no me pude negar.

— Gracias —me senté en la mesa y saqué varios libros de mi bolso—. Bueno, logré conseguir todos los que me pediste. No sabía bien qué editorial te gustaría más así que simplemente traje todos los que encontré.

— Aw, qué bonito de tu parte —se sentó frente a mí, con su taza entre sus manos y se puso a revisarlos uno por uno—. Disculpa la ignorancia pero, una editorial tiene un diseño en específico que suele usar para todos los títulos, ¿verdad?

— Sip, así es.

— Entonces me quedo con estos —sonrió, apilándolos a su lado—. Mil gracias, linda. En verdad, no tendrías por qué haber venido hoy. Llegarás tarde a casa, está oscuro y lluvioso.

   No puedo mentir, me sonrojé por cómo me habló. Sin embargo, apenas me estaba pasando el frío con el té, y lo disimulaba un poco.

— Oh, no te preocupes. Paso mucho tiempo sola en casa y es aburrido. Traerte los libros es salir un poco de la rutina aburrida de estos días.

— ¿No estabas compartiendo piso con Esteban? —preguntó desconcertado.

— Él pasa días sin volver, ni siquiera sé a dónde va —reí.

— Ah, ya veo. Creí que ustedes dos tenían algo.

— Bueno... teníamos sexo de vez en cuando. Éramos buenos amigos, pero le estoy perdiendo un poco el rastro.

   Pierre sonrió al oírlo. No imaginaba que fuera a tener esa clase de relación con Esteban, aunque siendo francos, éramos solo follamigos. Nos teníamos únicamente para desahogarnos del día a día.

   Le di un sorbo a mi taza de té. Mis mejillas aún seguían rosadas por lo fuerte que estaba el frío afuera. Pierre pareció notarlo.

— ¿Y qué hay de ti? ¿Te estás adaptando bien con el idioma en la ciudad? —me pregunta, con su vista clavada en mi rostro.

— Es frustrante, casi nadie habla inglés aquí. Y cuando me hablan en francés, lo hacen tan rápido que apenas entiendo un "bonjour".

— Ni hablar del slang, ¿verdad? —comentó en burla.

— Ni lo menciones. Pero... al final del día he aprendido más que antes y, creo que me defiendo muy bien estando sola.

— Siempre estoy aquí por si necesitas unas lecciones —soltó, con una mirada que a mi parecer, era desafiante—. O por si necesitas cualquier tipo de ayuda. Ya sabes, como un favor por los libros.