T4: III

1.3K 113 8
                                    

Quería decirle a Will muchas cosas más

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Quería decirle a Will muchas cosas más. Decirle en donde estaban escondidos los chicos, pero lo mejor era que nadie más lo supiera. Quería decirle de nuestro bebé, pero eso ahora no era una opción, no quería hacerlo enojar. Seguramente se molestaría mucho más y cometería una locura. Por ahora era mejor mantener a mi chico centrado en su trabajo. Y tal como habían dicho me tomaron para llevarme a esa prisión de máxima seguridad, totalmente aislada del mundo. Como si de una asesina serial se tratara. Me veían de esa forma, como un peligro para la sociedad y ciertamente quiero volverme peligrosa. Todo lo bueno que había en mi, mi gentileza, mi sonrisa se desvaneció en el momento que ellos decidieron destruir mi vida.

He perdido la cuenta de cuánto tiempo he llevado encerrada en este lugar. A diario venían distintos agentes a interrogarme, intentando sacarme respuestas que jamás obtendrían. Me negaba a hablar con ellos. Tenia unos cuantos libros en esos escasos metros cuadrados en los que me tenían confinada. Una hora a diario para salir a caminar por el patio para tomar aire fresco, aunque alejada del resto de la población penal. No soy una asesina como lo son la mayoría de los que están aquí, solo soy alguien que sigue siempre sus ideales y sin importar que cuidará de las personas que ama.

Una explosión lejana me saco de mi siesta. Abrí los ojos al escuchar las sirenas de la prisión activarse. No podía ver nada, después de todo seguía encerrada con apenas una ventana que no me permitía ver demasiado el exterior. Pero tenia un ligero presentimiento de que se trataba de mis amigos. Ya era hora que se acordaran de mi, esos chicos. Mi celda se abrió por si sola dándome paso a mi escape, era ahora o nunca. Tenia una sola oportunidad para escapar de ese lugar y poder estar nuevamente con mi familia o al menos estar en un espacio más amplio.

Me cruce en el camino con uno de los guardias de seguridad listo para atacarme. Había aprendido unos cuantos movimientos con Lennox y podía aprovecharlos en este momento. Me puse en posición de ataque lista para sacármelo de encima, un golpe en la quijada para despistarlo, un fuerte golpe en el costado de su estómago y un cabezazo en su nariz, lo suficientemente fuerte para romper esta y el golpe final un rodillazo en su entrepierna para terminar de hacerlo caer de rodillas frente a mí. Con una sonrisa en los labios tome el palo que este iba a usar para golpearme, un par de vueltas en el aire antes de golpear con fuerza su cabeza para noquearlo.

— Gracias por esto. – Dije antes de quitarle el arma de su cinturón junto con las llaves de las puertas.

No tenía mucho tiempo, si los chicos han venido por mí, seguramente no se quedarán sentados por mucho en el jardín tomando el té. Me abrí paso entre los demás reos que continuaban peleándose con los guardias hasta que logre llegar al patio principal donde efectivamente ellos estaban ahí listos para sacarme del embrollo en el que estaba metida. Hound, Drify y Crosshairs quienes ya tenían a casi todos sometidos, bueno no es como que los guardias de prisión estén muy armados, aun así teníamos poco tiempo. Seguramente ya habían avisado a los militares y estos no tardaran en darnos caza.

— Tardaron en venir. – Los regañe.

— Bueno chica tu esposo nos dio el aviso hace poco. Había que armar un plan.

— Si, gracias por venir chicos. Vámonos, no es seguro estar aquí.

— Sube Sami. – Dijo Drift antes de cambiar.

Sin esperar subí a este quien de inmediato se elevo por los aires para sacarme de ese maldito lugar en el que había estado. Incluso había perdido unos cuantos kilos gracias a la asquerosa comida que me llevaban a diario. Dios ya estoy hablando como un maldito delincuente, tan solo me faltan los tatuajes hechos en prisión para ser toda una bandida. Estoy haciéndolo de maravilla. Me relaje un poco al estar arriba en los aires, disfrutaba del paisaje a mi alrededor y de la hermosa vista. Agradecía a mi Lennox por haber enviado a los chicos y espero que eso no le haya causado problemas. No quiero que le pase algo por mi causa, no lo soportaría. Ya perdí a Sam, perderlo a él no seria lo mas sensato para mi ya dañada mente.

Un par de horas de viaje bastaron para llegar a nuestro destino. El desierto de Texas era el escondite perfecto para esconder las marcas de calor que emitían los chicos y lo que los hacia más fáciles de detectar. Esboce una sonrisa amplia al ver a Jazz aun con vida, no tarde mucho en correr a el lanzándome sobre su capo en un extraño pero necesitado abrazo, como necesitaba a mi amigo. Ratchet apareció desde un rincón ya recuperado, sus lesiones habían sido reparadas y se veía mucho mejor.

— Hola Ratch. Que gusto verte amigo.

— Sami, te arriesgaste por mí. No debiste ponerte en riesgo.

— Lo haría de nuevo, por cualquiera de ustedes. Se que es imposible, pero ¿No me trajeron algo de ropa? El naranja no me viene... - Solté entre risas para alivianar el ambiente. La puerta de Jazz se abrió dejando ver un bolso, supongo que mi esposo planeo todo con detalle.

Me aleje lo suficiente para cambiarme de ropa. Aunque lo que más necesito es una ducha y una buena hamburguesa. La ropa de prisión ahora se chamuscaba en un rincón y había sido reemplazada por un pantalón deportivo y una sudadera. Lo suficiente para estar más cómoda en caso de tener que salir corriendo de esos idiotas. Y un bonito par de lentes de sol que me hacían ver como una agente encubierto, agradeceré a mi esposo por eso luego.

— ¡Ya es hora! – Golpee el capo de Jazz indicándole a los demás que era hora de moverse. Supongo que por ahora estoy a cargo antes de que el gran jefe tome el mando. – Vamos amigo.

— Claro Sami. A acabar con esos bastardos. – Grito mi querido amigo antes de poner una canción. I don't care de Fall out boy. Dios como amo a mi auto, sabe siempre que canción poner. Subí el volumen antes de presionar el acelerador para dirigirnos hacia el punto de encuentro. 

¡Nuevo capítulo disponible! 

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

¡Nuevo capítulo disponible! 

Hoy capítulo doble por superar las 23 mil lecturas.

Witwicky TwinsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora