Capítulo 18.Todos en mi contra.

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Capítulo 18.

Todos en mi contra.

Al llevar a mi madre a su casa ya nos estaban esperando con la cena, así que me senté a cenar con mi familia. 

Hablamos sobre lo planeado en el hospital y los sucesos de este día alocado con la "enfermerita" desnudista del día de hoy, como el mal humor y los arranques que tuvo del demonio de los días pasados, esperando apoyo familiar masculino, ya que, del lado femenino no lo conseguía. 

 Mientras relataba lo sucedido, tuvimos que hacer tres pausas de relato y cena porque mi madre de tanto reírse se atoró dos veces con la comida y una vez con el agua, aunque, mi hermano y mi padre estaban tan serios e indignados como yo por el relato.

 Al finalizar la conversación y cuando conseguiiiimos calmar a mi madre, ella fue quien empezó a hablar y a contar que era lo que Alexia había hecho, como había ido desesperada a calmar a mi hija sin importarle nada, como le había cantado y lo que se vio desde su punto de vista el hecho de que yo la estuviera mirando. 

 Y fue ahí donde aparte de ser "el idiota" también pase a ser un chiste, porque hasta el personal doméstico que estaba a nuestro alrededor comenzó a reírse. 

 ¡No puede ser, no hay respeto alguno hacia mi persona!Lo terminé de perder todo por el bonsái hospitalario y la ira vuelve a mí. Ahora no sólo a mi madre le cae bien Alexia, sino también a mi hermano y a mi padre quien me dice que una mujer así no debo perderla mientras mi hermano me pide que le presente a Satán en miniatura. 

 Finalizada la cena ya es tarde, igualmente decido irme a mi departamento para no tener que soportar las burlas de mi familia, lo que queda de la noche y mañana porque mi madre todavía, de la nada, tiene ataques de risa. 

 Llego en mi departamento, tomo una ducha que me ayude a sacar mi mal humor y me acuesto pensando en todo lo que paso hoy y en la charla con mi madre. 

Empiezo a ver toda la secuencia en mi cabeza cuando Alexia se quita la ropa donde me percato de que no sólo es bonita mujer, sino que tiene un cuerpo de infarto que siempre que la veo, está tapado por la ropa diaria que utiliza como por el uniforme del hospital que no la favorecen en nada. 

 Si bien, no tiene un abdomen plano, va acorde con su cuerpo porque tiene un busto exuberante, que creo, me faltaría mano para poderlo sostener, y un trasero redondo que por más que lleve pantalones holgados se destaca inclusive con la ropa larga con la que trata de taparse. 

 ¿Por qué se tapa?, ¿Por qué no se muestra?, ¿Por qué ese carácter horrible?, ¿Por qué estoy pensando esto?, ¿A mí qué me importa?Es muy bonita, quizás el novio o el esposo no la dejan, pero anillo no tiene, ni de compromiso ni de matrimonio, yo ya la hubiera sacado de circulación. 

 Me golpeo solo por estar pensando en ella, debería estar durmiendo, mañana será un día agotador porque mi padre me pidió que haga algunas entregas, así que me doy vuelta e intento dormir, cuando me llega a la mente el recuerdo de como cantaba y besaba a mi hija, la devoción con la que la miraba como si Sofy fuera su todo. 

Como la miro yo, todo para reconfortarla y hacerla sentir mejor. También, cuando me miró con cara de pocos amigos y me sacó el dedo medio y de la nada aparece una sonrisa en mi rostro, digo la palabra "cabrona" me doy vuelta y así me duermo. 

 Al día siguiente nos volvemos a reunir mi padre, Walter, Jhonatan y yo.Me explican que mañana comenzaran la remodelación de la habitación para Sofy, que aparentemente Bustamante, fue visto en una disco en una ciudad a unas doce horas de aquí. Ya están mis hombres viajando hacia allí, tanto a él como Sipriano, son ratas que estoy seguro de que cuando los atrape con un pequeño susto vomitarán todo sobre los Morano, aunque sea el comienzo de todo lo que pienso cobrarme por su traición.

 También me pasaron la información del resto del personal del hospital, no hay nada de que preocuparse por ninguno; sin embargo, van a ser vigilados por un tiempo, pero de quien más interesa saber, no hay nada por hora y es peor, porque ahora estoy más interesado que antes, es como si quisiera ser invisible. 

 De Alexia tendré que ocuparme personalmente, no sé quién es ésta mujer que se acerca a mi hija, no aparenta ser peligrosa para ella, sólo para mí cuando me la cruzo, pero de igual manera debo saber quién es.

Siempre SofyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora