Quackity bajó a desayunar,aunque si era sincero el desayuno se sentía extraño, Luzu estaba frente a él hablando con emoción contándole a Charlie lo que haría ese día, sus deberes de alcalde, los nuevos deberes de Charlie, pues el niño quiso acompañarlo a la oficina ese día, cosa que al alcalde le encantó, el niño podía verlo trabajar y pasarían tiempo de calidad padre - hijo mientras que él no dejaba de lado sus obligación, la idea parecía mas que increíble para ambos, Quackity no pudo evitar compararlos, el mismo rostro al reflejar su emoción, las mismas largas pestañas que había pasado horas admirando en ambos rostros, el cabello desordenado y castaño, siempre le pareció molesto que el pequeño heredó esas hebras castañas que le recordaban tanto a su padre, pero ahora no le parecía tan molesto, era algo tierno, saber que ambos compartían mas cosas en común de las que creían.
—¿qué opinas, Quackity?— preguntó Luzu viéndolo con ojos brillantes y una sonrisa gigante, el chico del binnie se había perdido en sus pensamientos cosa que el mayor entre los tres comprendió inmediatamente al ver el rostro de confusión del chico pato— ¿me prestas a Charlie para que vaya a la oficina hoy? Tal vez así puedes traerte a Rubius un rato a la casa
¿Estaba intentando comprarlo? Sabía que en parte intentaba convencerlo para que el menor lo acompañara al trabajo, sabia que desde que le confeso su paternidad, Luzu estaba loco por pasar tiempo con el pequeño, se notaba que lo amaba, lo bañaba en abrazos y amor, le hacia de desayunar, le compraba juguetes, se encelaba cuando Charlie quería pasar mas tiempo con otras personas, estaba intentando recuperar los cuatro años que perdió y en parte el chico del binnie se sentía culpable. Pero por otra parte sabia que Luzu intentaba darle su espacio, cosa que no comprendía del todo ¿no se supone que estaba en arresto? No había visto a ni un solo oficial pasar por la casa esa mañana, no vio a ninguno la noche anterior, no vio a ninguno en la oficina de Luzu cuando pasó el día completo ahí, no vio amenazas hacia el resto de su familia, no vio a nadie mas y, aunque le parecía extraño, agradecía que fuera así.
—si, no veo porque no, si Charlie promete comportarse — vio al niño asentir rápidamente de forma totalmente desesperada—esta bien, Charlie— se dirigió al menor quien lo veía con grandes ojitos brillantes, otra cosa que le recordaba a Luzu, aquellos ojos emocionados — promete que te portaras bien y le harás caso en todo lo que el señor Luzu te diga — y aunque Quackity quería decir papá Luzu, prefirió esperar
—lo prometo papi, le haré caso a todo lo que diga Luzu, menos si dice que me tire de un puente, yo no me quiero tirar de un puente...— el niño divagaba mientras le contestaba a su padre
El peli negro sonrió pues como todo padre mexicano ya había usado el clásico "y si tus amigos se tiran de un puente ¿tu también lo haces?" Le parecía tierno como su hijo lo recordaba en esas situaciones.
—bien, entonces todo esta decidido — mencionó Luzu con una gran sonrisa y deteniendo la conversación pues no comprendía lo del puente ¿por qué le diría el pequeño que se tirara de un puente? — vamos a tomar un baño y salimos en una hora más
—ven Charlie, vamos a darte un baño — le menciono Quackity tomando la mano del niño
—¿puedo acompañarlos?— susurro Luzu — nunca he bañado a un niño, me gustaría aprender a hacerlo para, ya sabes, cuando Charlie lo necesite y no puedas ayudarlo
Quackity se puso totalmente rojo, queria correr y abrazar a Luzu, que difícil era alejarlo de su corazón, cualquier cosa que tuviera que ver con su hijo lo volvía débil.
—primero tenemos que preparar su ropa, ya la tenía preparada, planeaba bañarlo después de desayunar— mencionó el pelinegro con simpleza
El alcalde parecía anotarlo mentalmente.
Con una sonrisa llena de cariño, Luzu y Quackity se preparan para bañar a su preciado niño, Charlie. Con cuidado, llenan la bañera con agua tibia, asegurándose de que esté a la temperatura perfecta para el pequeño. Juntos, se acercan a la bañera, tomando a Charlie en sus brazos con ternura. Sus risas contagiosas llenan el ambiente, creando una atmósfera de pura felicidad ¿cómo es posible enamorarse de un ser humano que no conocías hasta hace poco tiempo? Se preguntaba Luzu mientras veía al niño jugar con el agua.
Lentamente, sumergen a Charlie en el agua, que lo envuelve suavemente, y el niño se relaja, confiando plenamente en sus papás. Mientras lo bañan, cantan suavemente canciones de cuna, llenando el momento con dulces melodías. Los juguetes de baño flotan a su alrededor, y Charlie los agarra emocionado, haciendo que Luzu y Quackity rían a carcajadas.
—¿cuándo aparecieron estos juguetes de baño?— pregunto Luzu con una sonrisa brillante
—me los traje de casa, conozco a mi hijo, él jamás se baña sin juguetes de baño, ese patito azul es su favorito
Se turnan para enjabonar y masajear a su pequeño, asegurándose de no dejar ningún rincón sin limpiar. Charlie les regala miradas llenas de amor, y los papás le devuelven gestos cariñosos y tiernas palabras. Es un momento íntimo y especial que fortalece el vínculo entre ellos como una familia amorosa y unida.
Casi se podían sentir como una familia de verdad, el corazón de los mayores latió al unísono.Una vez que el baño ha terminado, envuelven a Charlie en una suave toalla, abrazándolo con calidez. Lo acunan en sus brazos, disfrutando de la suavidad de su piel y el aroma a bebé. Mientras lo secan, le susurran palabras de amor y admiración, asegurándole que siempre estarán allí para él.
Quackity quería llorar, escuchar a Luzu susurrar lo mucho que amaba al pequeño, escucharlo asegurarle que siempre estaría ahí para él, que jugarían juntos en cuanto llegaran a la oficina, que podían comer lo que quisieran, que amaba el dibujo que le regaló esa mañana, aun cuando el pelinegro no sabía que su hijo le había hecho un dibujo al castaño mayor, todo eso ablandó el corazón de un pelinegro haciendo que las primeras lágrimas comenzaran a salir de sus ojos, "lo siento" pensó mientras los veía jugar "lo siento tanto" no podía dejar de repetirlo mentalmente mientras veía a Luzu cambiar al niño
—¿Rubius vendrá?— preguntó el alcalde cuando estuvo seguro de estar totalmente listos para salir, cargaba con una gran mochila en la que llevaba todos los juguetes de Charlie
—no necesitas llevar tantas cosas, solo pídele que decida que dos cosas llevar, estoy 100% seguro que no necesita todo esto— el padre más experimentado tenia la razón pero el padre primerizo se negaba a dejar algo ¿qué tal si Charlie lo pedia y él lo había dejado? Lo odiaría para toda la vida — y si, Rubius llega en una hora mas
—está bien, cuídate, si necesitas algo llámame a la oficina, avisa que eres tu si llamas a recepción, saben que tienen que pasarme la llamada de inmediato— le afirmo mientras tomaba la mano del mas pequeño y salían ambos por aquella gran puerta dejando de nuevo solo a Quackity— de todas formas si no estoy o estoy en una junta puedes pedirle a los secuaces lo que necesites, ellos están a tu servicio las 24 horas del día
Un Quackity sumamente confundido y con el corazón al mil ¿era tan importante como para pedirle a todo el mundo que estuviera al pendiente de él? "No" negó con la cabeza, "solo quieren que no escape" pensó intentando detener a su acelerado corazón, necesitaba que Rubius llegara lo antes posible
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¿Es mi hijo? [Luckity]
FanfictionDespués de 5 años, una alcaldía robada, una revolución y muchos amigos perdidos, Luzu conoce a un pequeño niño mientras Quackity no puede encontrar a su hijo. - ¿cómo que perdieron al chamaco? ¿Qué vamos a hacer si Luzu lo ve? - no lo hará primo, co...