El pueblo karmaliense
En cuanto el alcalde salió de las instalaciones la directora corrió a contarle a una de las maestras todo lo que había sucedido en su oficina apenas unos minutos antes, claro que corría con la carpeta llena de información del menor en mano, quién le creería sin aquella valiosa información, llegó a uno de los salones en los que la maestra apenas preparaba la clase, un lindo Salon de color azul con blanco, algo sencillo, seguro Charlie lo amaría, la maestra acomodaba algunas bancas que habían quedado desacomodadas el día anterior, organizaba plastilinas por colores, tiraba los marcadores secos, guardaba tijeras o colores que encontraba tirados por el piso, un día normal para una maestra.
—tengo que contarte algo— la directora entró corriendo al acogedor Salon y tomó asiento en una de las sillas para los estudiantes, se removió incomoda, claramente esas sillas eran muy pequeñas pero estaba dispuesta a soportarlo por la información que ya quemaba por salir de sus labios — vino el alcalde hace un momento
Escuchó la risa de la maestra, era una risa con burla, de esos tipos de risa que solo con escucharla te parecen molestas, te cambian el humor y logran enfadarte en un par de segundos, pero la directora no se movió, no sentía nada, comprendía lo casi imposible que sonaba aquella oración, ella misma lo había creído imposible cuando la secretaria le dijo que el alcalde pasaría a su oficina en un momento.
— esta bien que estamos algo aburridas últimamente, vamos, trabajar con niños no es fácil pero tampoco necesitamos inventarnos mas problemas de los que ya tenemos— la maestra continuo con la limpieza del aula, no le interesaba lo que la contraria tuviera que decir, mentiras era lo que menos necesitaba en su vida
—te estoy diciendo en serio— se levantó con dificultad del pequeño asiento para darle la carpeta a la maestra quien con algo de duda lo tomó y lo abrió, la primera hoja era el acta de nacimiento de Charlie, un pequeño niño de apenas cuatro años ¿ese era el sujeto del que discutían? No podía creer como la directora había caído tan bajo — el alcalde estuvo aquí hace unos minutos porque quiere inscribir a su hijo — murmuró mientras repetía mentalmente la información que estaba por recitar casi a la perfección — el niño tiene 4 años, se llama Charlie, es hijo de...— hizo una pausa al ver el rostro de la maestra cambiar, ese niño no era cualquier niño, por algo la directora estaba tan desesperada por contarlo — el héroe Quackity y el alcalde Luzu, vamos que el niño es una extraña combinación que no creí que existiera jamás — dejó salir una risa burlesca — en fin, quieren inscribir al niño en la escuela ¿crees que debería aceptarlo
—es un niño, merece la seguridad que tienen todos los demás niños — la maestra se sentía algo molesta pero igualmente estaba sorprendida ¿un hijo del alcalde? Y no solo eso, de Quackity— sigue siendo un niño, el niño no es enemigo de nadie y no tiene la culpa de lo que hagan sus padres
— jamás dije que él tenia la culpa de nada, en fin ¿cuánto crees que esté dispuesto a pagar el diario de Karmalan por esta información?— preguntaba distraída tomando nuevamente la carpeta y hojeando la nuevamente
—no harías eso, te estas metiendo con personas peligrosas — le advirtió, no solo hablaban del mayor homicida en la historia de karmaland, también hablaban del alcalde, ambos tenían el poder de desaparecer a quien quisieran en segundos, un chasquido y toda su vida se volvería un infierno
— y no solo eso— continuó como si no hubiera sido recientemente amenazada por la maestra — en sus contactos que pueden recogerlo si sus padres no están o sale antes están el héroe Rubius, el héroe Alexby, Cochi y Beni, no sé quienes son esos — admitió con un rostro de confusión — y el juez Vegetta, criminales y un juez, deberíamos verlo en la comisaria, no creo que ellos piensen que sea muy ético dejar al niño con esas personas
— deja de meterte en esas cosas, puede terminar muy mal
—¿a qué hora abren las oficinas del diario de Karmaland? Creo que esta información definitivamente les puede interesar
La directora y la maestra continuaron hablando por unos minutos mas, aunque mas que platica era un constante regaño por parte de la maestra y un sinsentido por parte de la directora.
Por otro lado, Quackity y Charlie apenas despertaron llamaron al alcalde para pedirle que regresara a la casa, el niño quería que pasaran el día viendo películas los tres juntos y aunque el pelinegro le hizo caras de asco en cuanto menciono a Luzu, el también deseaba que el castaño regresara a casa para pasar el día juntos
—bien, pero solo es por hoy — mencionó el alcalde, estaba corriendo a casa, en cuanto escuchó la voz del niño supo que tenia que estar en aquella casa en dos segundos, mimar a Charlie y, si es que este se dejaba, también mimar a Quackity — dime qué película quieres ver, voy por algunos dulces, pero primero vamos a desayunar algo ¿crees que tu papi quiera chileladas?
—enchiladas, papá— hubo un silencio corto en la línea, Charlie se sentía avergonzado, acaba de decirle papá al alcalde— perdón, Luzu — susurró con su pequeña voz con un pequeño tinte de tristeza, incluso parecía que estaba a punto de llorar
— puedes decirme papá, Charlie— le susurró y escuchó una risa silenciada del otro lado, podía jurar que el menor estaba cubriendo su boquita mientras reía como solía hacerlo cuando lo regañaban y se equivocaban en alguna palabra, ese niño definitivamente era hijo de su Quacks— te veo un en un momento en casa, dile a tu papi que te ayude a poner la película
Escuchó un rápido "mhum, bye" y colgó, Luzu tenia una gran sonrisa en sus labios, todo le estaba saliendo bien ese día, Charlie pronto iría a la escuela, hoy verían una película, tenia a Quackity de nuevo en su vida y el niño acaba de llamarlo papá.
Que lastima que los finales felices no duran para siempre como en los libros y películas.
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¿Es mi hijo? [Luckity]
Fiksi PenggemarDespués de 5 años, una alcaldía robada, una revolución y muchos amigos perdidos, Luzu conoce a un pequeño niño mientras Quackity no puede encontrar a su hijo. - ¿cómo que perdieron al chamaco? ¿Qué vamos a hacer si Luzu lo ve? - no lo hará primo, co...