Con tu amor

Capitulo 57: Juntas

Liliana estaba acostada en su cama bajo una cobija y al lado a su pequeña mascota, realmente había sido un duro golpe para su corazón, sabía que era lo mejor para ambas, pero simplemente su corazón sangraba, su llanto fue interrumpido por un llamado a la puerta, se levantó para abrir y ahí vio a sus compañeras que se habían vuelto sus mejores amigas durante un año, al verlas se les fue encima abrazándolas, ellas solo pudieron consolarla en ese momento.

Pasaron al apartamento y se sentaron en la sala, Liliana no paraba de llorar y por más que quiso contenerse no pudo hacerlo, Ilse y Mayte le dieron su espacio para que se desahogara sin dejar de abrazarla, en un determinado momento las lágrimas cesaron, ya había sacado todo lo que debía, tomo un pañuelo y se seco los ojos.

Liliana: Agradezco que estén aquí – sonrió débilmente.

Mayte: No tienes nada que agradecer somos amigas.

Ilse: ¿quieres hablar? – Liliana negó.

Liliana: No hay nada que hablar Ilse, ya todo está claro, sabes ahora te entiendo es difícil dejar ir al ser amado, pero duele más vivir en una mentira, pero díganme mejor ¿Qué las trajo aquí?

Ilse: Bueno eso, sé que no será el mejor momento, pero estoy aquí para saber si quieres estar en lo del grupo musical.

Liliana: Ha eso – sonrió – la verdad no, en un principio si te puedo decir que estaba entusiasmada, pero esto me hizo ir a mi trabajo y pedir un cambio, me fue otorgado, en poco tiempo me iré, de verdad lo lamento.

Mayte: Tranquila Lili no hay ningún problema, esperemos que te vaya bien.

Liliana: Yo espero saber de ustedes muy pronto, que sean la nueva sensación en estos años.

Ilse: Dala por hecho.

La pareja dejo a Liliana totalmente dormida, en el camino la lluvia las agarro a ambas por lo que ambas terminaron empapadas ya que no fue una simple lluvia por lo que en determinado momento ya nada les importo y Mayte tomo a Ilse de ambas manos y giraron bajo la lluvia, la güera, aunque se desconcertó en un principio luego rio, risa que fue tan contagiosa para que su novia se le uniera, rieron tanto que se detuvieron solo necesitaban recuperar el aliento, siguieron su camino a su casa pues a pesar de querer quedarse ahí debían ir trabajar.

Por otro lado, Fernanda jugaba con Matis hasta que alguien llamo a su puerta y era su mejor amiga que estaba llorando desconsolada por lo que se le abalanzo a sus brazos, la morena desconcertada solo la consoló ya cuando estuvo un poco tranquila trato de indaga sobre lo que pasaba.

Fernanda: Mimi, ¿Qué sucede?

Mimi: Por favor Fer vamos a regresar a Madrid.

Fernanda: Haber ¿Qué está pasando? Tu estabas más feliz aquí.

Mimi: Lo sé, pero no quiero estar más aquí y más después de lo que hice – lloro más – si tan solo tú la hubieras visto...

Fernanda: Haber tranquila, vamos a tomar un té y me cuentas con mas calma lo que sucede – Mimi se sentó en el sillón.

Ilse, Mayte e Isabel ya estaban en su camerino hablando como todas las noches en el caso de Isabel comía algo que traía en un tóper pues realmente no le daba tiempo de cenar, por lo mientras en la charla llego alguien tocando la puerta, pensaron que podría ser Fernanda, pero al abrir la puerta vieron a la pelinegra, Mayte quien abrió la puerta miro a Ilse pues realmente la pelinegra no se veía bien.

Ilse: Ivo ¿Qué sucede?

Ivonne: ¿Podemos hablar?

Ilse: Si claro – volteo con las chicas – ahora vuelvo – las hermanas solo asintieron.