EL TIEMPO A TU LADO - TPN • NORRAY •

♡|CAPITULO 11 - SOLO|♡

Justo cuando Ray abría los ojos se percató de que la luz del día ya pasaba a través de la ventana. Se quedó unos momentos recostado, tallo sus ojos un momento y se quedo mirando al suelo. 

«No puedo recordar nada, estoy mareado y... ¿Cómo diablos llegue a casa?»

Después de meditar por unos segundos se levanto en la cama, sentia tanto calor que no dudo en quitarse la camisa, estaba sudando y justo a su lado habia un paño humedo algo caliente. Después miro al frente, hacía su escritorio, viendo encima el saco de Norman 

—Supongo que sigue aqui. 

...{💮}...

Norman estaba justo en la cocina, estaba de espaldas haciendo el desayuno. El aroma a comida recién hecha estaba por todas partes, 

—Buenos dias— Norman escucho su voz, aun asi no volteo —¿Quieres ayuda?

—Toma asiento, ya estoy por terminar 

Ray solo lo miro, estaba en la entrada de la cocina, lo veia pero habia algo raro en el ambiente, podia sentir la tension entre ambos, solo suspiro, puso la mesa y fue hasta el refrigerador, lo abrió y solo tomo una botella de agua. Norman servia los platos con comida y se le quedo mirando. 

Sus ojos pasaban de arriba abajo viendo el torso de Ray desnudo, su pantalon solo llegaba a su cadera y aun asi resbalaba levemente de sus caderas por lo levemente grande que le quedaba. Por su garganta se veia como pasaba el agua y como por los lados de sus labios caia una gota que llegaba hasta su barbilla, sus ojos cerrados le daban un toque algo erotico, Norman no pudo hacer nada mas que dejar las cosas en la mesa, se acerco a el lentamente mientras se quitaba la camisa. 

—Norman...— los ojos de Ray miraban a Norman quien lo habia apricionado  contra el refrigerador —Yo... lo siento...— Norman no despegaba los ojos de el, se acercaba poco a poco a su cara —Esta algo frío.

Norman lo vio cerrar los ojos y volvio en si, se alejo un momento, Ray estaba algo asustado, su corazón latía a mil por hora y sentia que su pecho empezaba a presionarse.

—Anoche tuviste fiebre, no es bueno que te expongas tanto al frio— Norman solo le puso encima de los hombros la camisa que se habia quitado hace unos segundos —Hay que comer, asi te sentiras mejor— Norman solo se separó de el y cerro la puerta del refrigerador, Ray todavia sentia como su corazón latía, respiraba agitadamente y solo tomo la camisa de Norman y se tapo con ella, camino hasta la mesa y se sento justo al frente de el.

—Gracias por la comida— Ray miraba el plato, tomo su cubierto y empezo a pasar la comida de un lado a otro, miro a Norman quien no lo veia solo comía.

«Es la primera vez que alguien exterior a los trabajadores de la casa me prepara algo de comer...»

Suspiro y tomo un bocado llevandoselo a la boca, por un segundo penso en escupirlo ya que no estaba tan acostumbrado a la comida, pero al ver a Norman comer como si nada simplemente mastico y trago mas a la fuerza que por ganas, pero una parte de el sabia que lo hacia por otras razones.

«Hacia tanto que...»

Por un momento sintió que las lagrimas saldrían de sus ojos.

—Oye, ¿Por qué no me cuentas algo de ti?— pero al escuchar las palabras de Norman sus pensamientos comenzaron a volverse mas fuertes recordando todo su pasado y en vez de ese apetito que empezaba a despertar en su estómago, más bien ahora se convertía en nauseas. 

—¿Algo de mi?— Ray bajo la mirada, no queria o mas bien, no podia salir palabra alguna de el, todos los recuerdos de su pasado y sobre quien era lo atormentaban y entonces recordó algo que ocurrió la noche anterior —Oye...— pero a pesar de que Norman le pregutaba con una sonrisa en su cara se podia seguir sintiendo la tension que habia entre ambos y el ya sabia por que —¿Dije algo malo anoche? 

Norman tomo su cubierto y dio un bocado mas a su comida, iba a repetir la accion pero simplemente su apetito desapareció e incluso se empezaba a sentir un aroma algo fuerte que incrementaba y hacia doler la cabeza de Ray levemente. 

—¿No fue asi?— Ray se sentia mareado, tomo su cabeza y fue entonces que Norman se dio cuenta de lo que ocurría —Norman...

—Lo siento— Norman se levanto, tomo la mano de Ray quien aun veia hacia el suelo y tomaba su cabeza con la otra mano —Yo... Yo solo... 

El olor desaparecía poco a poco y Ray solo empezo a reir.

—Estoy bien, tranquilo— Ray seguía riendo pero Norman estaba preocupado, jamas habia dejado salir sus feromonas de esa manera.

—Lo siento, Ray— Ray solo suspiro, Norman se volvio a sentar y cuando Ray lo miro, Norman solo bajo la cabeza, suspiro y después dejo salir su preocupación —Emma. 

Ray se tenso al escucharlo, solo bajo la cabeza y sonrió, Norman veia sus ojos y juraba que en cualquier momento Ray dejaría salir sus lagrimas 

—Jamas debi decir eso, yo...— Ray miro a Norman y se dio cuenta de que no sabia por que iba a disculparse, no era como si ambos tuvieran una relación o algo parecido, su padre le habia contado de pequeño que solo podia estar con aquel que se ganará su confianza y que solo con esa persona tenia permitido el darse besos e incluso tomarse de las manos juntos —Yo... 

—¿Tienes planes para esta tarde?— Norman habia notado lo tenso que Ray se veia con el tema de conversacion, asi que no dudo en cambiarlo y que mejor que evadir sus pensamientos y responsabilidades que organizando una salida —Si no estas ocupado, ¿Te gustaría salir? 

—¿No debes ir a donde la empresa?

Norman no respondió, se quedo callado sonriendo, aun asi Ray no entendía, pero Norman sabia que ir a la empresa significaría tener que volver a casa, volver a enfrentar su futuro aterrador y sobre todo, volver a enfrentarse a James. 

—Bueno, puedo tomarme un dia o dos de vez en cuando— Ray lo miro confundido pero Norman seguía sonriendo ya que sabia que si cambiaba esa sonrisa una cara de preocupación y miedo seria la que se mostraría frente a el —No es necesario que lo hagas si no estas comodo, si quieres puedo ayudarte a acomodar todo lo de tu mudanza y asi pasar la tarde— Ray miro todas las cajas que estaban regadas en la sala de estar y en los demás rincones de la casa —O si necesitas privacidad puedo irme y dejarte solo 

«Solo…»

—¡No!— Ray se puso de pie y tomo la mano de Norman rapidamente aferrandose a el, cuando se movió, rapidamente Norman pudo sentir el olor de Ray que picaba en su garganta —¡No te vayas, por favor!