♡|CAPITULO 25 - HASTA NUNCA|♡

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El asiento del frente era lo único que Norman veia, había entrado a la limosina más por obligación que por ganas por que la verdad es que no le gustaba encarar a su hermano, no le gustaba cuando estaba enojado, más bien todo de el le desagradaba, pero solo lo toleraba por qué desde siempre su mamá le habia pedido tanto a él como a Anna que se llevarán bien con James y Peter.

—Ha pasado un tiempo desde que nos vimos...— el auto empezó a moverse y con el la mirada de Norman se fijó en la puerta principal —... Solos ¿Verdad?

Norman trago saliva, estaba tan nervioso y asustado que podía jurar que su aroma salía, sin embargo el hecho de que eso pasara significaría que se estaba dejando llevar por el miedo y James lo vería solo como una presa fácil.

—No es bueno que yo esté aquí...

—¿Por qué no? ¿Acaso piensas que te hare daño?— james sonrió, estaba en el asiento al frente de Norman, pero poco a poco se iba acercando hacia donde Norman estaba. No había un lugar después de dónde el estaba, así que estaba arrinconado —Pero mi pequeño, somos hermanos, ¿O que no? ¿No me consideras tu hermano?

James ya estaba justo a un lado de Norman, su voz lo hacía estremecerse del miedo y con sus manos apretaba fuertemente el colchón del asiento haciendo que rechinara.

—¿Norman, que ocurre?— Norman aparto la mirada, seguía mirando la puerta y solo esperaba a que el auto se detuviera para poder saltar de el y salir huyendo lo más lejos posible —¿Pasa algo?— y así fue, el auto llegó a un embotellamiento y este se detuvo, pero antes de poder ponerse de pie o algo James tomo el mentón de Norman haciendo que lo mirara fijamente —¿Acaso me odias?

—¿O... Odi... Odiarte?

La voz de Norman temblaba, sus manos apretaban más fuerte el cojín y se espalda se recargo por completo en el respaldo tratando de tomar algo de distancia.

—Yo... Yo no... Yo te...

—O vamos, eres adorable— James sonrió, acaricio la mejilla de Norman quien al sentir el tacto se aparto un poco de el —Sabes Norman, he estado pensando en algo desde hace tiempo.

James se acercó aún más a Norman quien seguía acorralado y su última oportunidad de escapar se fue cuando el auto empezó a avanzar.

—¿Recuerdas la última voluntad de papá?— Norman se estremeció al escucharlo —A el le hubiera encantado que heredaras la empresa, yo no estoy para esto ya que también estoy con la empresa de mi difunta madre y con lo de Peter...— al escuchar ese nombre Norman miro detenidamente a James a los ojos —... Pues es obvio que no hay otra persona más capacitada que tú, después de todo solamente han habido alfas en los altos mandos de la empresa, ¿No quieres que esa tradición continúe? ¿No quieres tener todo ese poder?

La mano de James se acercó hasta Norman acariciando su pierna subiendo poco a poco

—Anna no es una alfa, es una... Beta, asi que si ella llegara a tomar la presidencia de la empresa todo se vendrá a abajo, ella no puede controlar todo ese poder, toda esa presión, pero tu, tu estás más que preparado para eso— Norman no respondía, solo se quedó mirando en shock a James quien al ver su reacción sonrió y tomo las mejillas de Norman —Pensalo, hazlo por ti, por mi, también por Peter, por papá...— James se comenzó a acercar cada vez más a Norman, tanto que podía sentir su aliento justo en su cara —... Por mamá.

La mirada de ambos chocaron, James se iba acercando cada vez más mientras acariciaba los labios de Norman y poco a poco subía su otra mano por su pierna.

—Basta, James.

Pero la voz grave que salió de las cuerdas vocales de Norman hicieron a James estremecerse, tanto que retrocedió de golpe de su lugar alejándose al otro extremo del asiento.

—Norman...

—James, ya no soy aquel niño pequeño el cual podías manipular por sus sentimientos así que te pido de la manera más respetuosa que mantengas tu distancia y no menciones el nombre de mi hermano o el de mi madre en vano.

James jamás había visto a Norman de esa forma, si, habían veces en las que se peleaban, en las que Norman hacía una rabieta e incluso lo acusaba con Anna y ellos peleaban, pero fueron esas mismas peleas las cuales hicieron a Norman tomar responsabilidad por sus rabietas pero nunca le había hablado de tal manera a James, siempre había sido sutil y blando con el, no ponía peros, pero está vez había llegado a su límite así que los papeles se invirtieron y ahora era James el asustado y confundido.

—Al igual que deja de hablar de Anna de esa manera.

James se le quedó mirando en su lugar, no sabía ni que decir.

—Pare el auto, bajaré aquí— el auto se detuvo, estaban a tan solo unas cuadras de la casa de James y Norman se alegraba de haber salido de ahí antes de que algo malo e inapropiado ocurriera —Tambien te pido el favor de que me dejes en paz, ya que apartir de ahora tomaré el apellido de soltera de mi madre y así ya no tendremos parentesco familiar para absolutamente nada, así que déjame vivir tranquilo y alejate de mi.

Norman tomo la manija de la puerta y salió, miro a James una última vez quien seguía en su lugar, su mirada de furia asustaba a Norman pero no podía flaquear en ese momento, debía demostrar que ya no era un niño.

—Buen día y hasta nunca.

La puerta se cerró, la respiración de Norman era agitada, dió unos dos pasos hacia atrás y después empezó a caminar en dirección contraria lo más rápido que pudo y justo al dar vuelta en la calle no dudo y comenzó a correr por las calles para alejarse.

Estaba a tan solo veinte minutos de dónde vivía con Ray, aún así el no dejo de correr debido a la adrenalina y el miedo que recorría su cuerpo.

—¿Norman?

Y al fin, después de ese tormento llegaba a casa donde se quedó recargado en la puerta mientras jadeaba y trataba de respirar.

—¿Que ocurrió? ¿Está todo bien?

Norman no pudo responder, solo miro a Ray quien estaba al frente de el mirándolo con confusión.

—No...

Norman al fin pudo hablar.

—Tengo... Tengo miedo...

Y se dejó caer al suelo mientras empezaba a llorar y Ray corría para auxiliarlo.

EL TIEMPO A TU LADO - TPN • NORRAY •Donde viven las historias. Descúbrelo ahora