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   La graduación fue una ceremonia singular. Los saludos, las felicitaciones, todo me parecía muy falso. Mucha gente. Profesores y representantes del ministerio se acercaban a preguntarme por mi futuro. Me parecía descarado de su parte, a ellos qué les importaba.

   Los señores Black no asistieron, mis padres sí. Fue duro hablar con ellos tras tanto tiempo, casi un año entero. Querían saber si pensaba volver a casa en verano, si había cambiado de planes. Me entraron ganas de llorar, yo solo quería un abrazo de mi madre. Les dije que me quedaría en Londres. No apoyaron mi decisión, pero me ayudaron a encontrar un buen lugar.

   Ethan fue el primero en suscribirse a las filas de Dumbeldor. Su familia se lo celebró como un héroe. Alphie prestaba sus servicios como médico y únicamente como médico, lo dejó muy claro. Shopie se unió al mismo tiempo que Alphie, lista para luchar.

   Yo tardé un poco más de tiempo en unirme. Me mudé a un pequeño piso en el centro de Londres. Viví unos meses, todo el verano y un poco más, organizando una fiesta cada semana con mis antiguos compañeros. No tenía prisa por endeudar mi vida a la causa. Regulus se quedaba a dormir muchos días. Cuando teníamos fiestas se transformaba en un gato, que mis amigos habían bautizado como Jony, por John Lennon. Comíamos, bebíamos, follábamos y dormíamos.

   Un viernes llegué al piso con la compra. Regulus estaba sentado en el sofá, mirando la televisión con mudo entusiasmo, viendo Candy Candy, creo. Me senté a su lado.

      -Mi madre se puso en contacto conmigo esta mañana. Creo que voy a volver a casa una temporada. No quiero que te pase nada-    me dijo sin apartar la vista de la tele. Tuve que tomar aire antes de contestar.

      -Esta mañana hablé con Ethan. Estoy dentro del ejército de Dumbeldor-    tartamudeé al decir el nombre. Me hubiera gustado poder ser lineal y decir todo bien a la primera, dar fuerza al mensaje. Regulus se levantó y me gritó qué si no estábamos bien así. Claro que estamos bien, estamos ignorando todo, contesté    -Tienes que entender que no puedo no hacer nada mientras mis amigos arriesgan su vida cada día-    traté de explicarle manteniendo la calma    -Esta guerra se tiene que librar, y yo no pienso quedarme fuera-.

      -Eres tan estúpido. Cualquiera se cambiaría por ti sin dudarlo-.

      -Que tú te cambiarás por mi no significa que todos lo hagan-.

      -¿Y todo lo que íbamos a hacer?¿Todo lo que teníamos pensado?-.

      -¡Joder!¡Me acabas de decir que ibas a volver a casa para que tú madre no sospechará nada!¡Cómo de gilipollas somos?-.

      -¡Sabes que eso es complicado!-.

      -¡Pero esa es tu escusa!¡No la mía!-.

      -Estas siendo un ególatra-    escupió las palabras con mucho odio. Me volví a sentir aquél niño de primero asustado y enfadado. 

      -No te atrevas a insultarme tu a mí-    sentía un gran calor por todo mi cuerpo debido a la ira, un odio muy reprimido se me estaba escapando    -Yo no soy el que dice una cosa y hace otra. Yo he sido franco desde el principio. No soy un cobarde, no le tengo miedo a mi familia. No soy tú-.

   Se quedó callado mirándome. Me miraba mal, enfadado pero triste. Sin embargo su rostro se torció en una mueca irónica, y me sentí muy insultado antes de que dijera nada.

      -¿Y tú que sabrás? Tan noble, tan valiente...-    me respondió sarcástico    -No has tenido una puta responsabilidad en toda tu vida. ¡Tu familia te rechaza y te compra un piso!¡Dame más lecciones de vida Canna!¡Explícame cómo ser tan cretino como tú!-.

SOUL LOVE [RegulusxOC]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora