Un tiempo para reflexionar

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Qué crees que fue lo que desgastó su relación? ¿Los niños? ¿Sus respectivos trabajos? ¿O quizás la costumbre?.- preguntó Jessica mientras anotaba en su libreta.

Pensé unos segundos cuando mi psicóloga me ofreció un pañuelo, habían sido meses de mucho estrés y el cuerpo me estaba pasando factura.
Había comenzado la terapia a espaldas de Logan, no quería preocuparlo más de lo que ya estaba, tenía sus propios problemas con la nueva escudería y el hecho de que no estábamos bien desde hace un tiempo.
Pasaron dos años desde que volvimos a Italia, y desde que Liam nació, más allá de la felicidad que sentía toda la familia, algo había cambiado.
Con el paso de las semanas cada uno dormía en un sitio distinto de la casa, donde el trabajo lo llevara, si yo
estaba en la computadora trabajando, me quedaba dormida ahí. Si él se quedaba en la fábrica y era muy tarde, se quedaba a dormir ahí.
No coincidíamos en los desayunos, almuerzos y algunas veces ni siquiera en la cena.

Olivia, con 5 años ya cumplidos, volvía del colegio todos los días con Carlos, habíamos quedado en que nos turnaríamos para ir a buscarla, si uno no podía, iría el otro. Pero en el último mes era su padre quien la traía a casa.

Liam con dos años, pasaba la mitad del día con su niñera, Alison, una joven estudiante de periodismo que comenzó su pasantía en McLaren, y además salía con Lando

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Liam con dos años, pasaba la mitad del día con su niñera, Alison, una joven estudiante de periodismo que comenzó su pasantía en McLaren, y además salía con Lando.
Ella y yo nos hicimos buenas amigas, algunas veces se llevaba a Liam hasta la oficina, o salían con Lando y Lola al Parque.

 Ella y yo nos hicimos buenas amigas, algunas veces se llevaba a Liam hasta la oficina, o salían con Lando y Lola al Parque

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-Creo que un poco de todo...no recuerdo la última vez que nos miramos a los ojos con Logan. Nunca discutimos, porque realmente nunca hablamos.
Pero...hay un tema que, digamos, fue la última discusión que tuvimos hace un tiempo. Y no está feliz con ello.-

-¿El apellido de Olivia?.-

Asentí con la cabeza.

Tres meses atrás, cuando Carlos trajo a Olivia a casa desde el colegio, me dijo que quería hablar conmigo y Logan sobre darle a Olivia su apellido. Ellos tenían una excelente relación, ella lo adoraba y él no podía más de orgullo de ser su padre.
Creía que era tiempo de hablar con Olivia y plantearle que su papá biológico era él, quería que llevara su apellido, aunque sin sacarle mérito a Logan por los años que se encargó de criarla.
Tenía sentido lo que me pedía. Sus ojos mostraban una sinceridad y una emoción genuina.
Hablaría con Logan al respecto, no sería fácil, Olivia era la luz de sus ojos, la vio crecer desde bebé, y algo en mí consideraba que no era justo. Pero Carlos se había convertido en un padre ejemplar desde el día que la conoció, a pesar de mi negativa, se hizo cargo de la matrícula del colegio de Olivia por los próximos años hasta que culminara sus estudios. Siempre tenía tiempo para ella, no importa si era fin de semana, feriado o vacaciones. Todo el tiempo la incluía en sus planes, en verano se fueron a Marbella juntos, acompañados de los padres de Carlos. Olivia los quería muchísimo, y ellos a ella.
Carlos asistía a todas las reuniones del colegio, pidió unirse al grupo de WhatsApp de padres de la clase.
En cada cumpleaños, día del niño y Navidad, era él quien organizaba qué hacer o a dónde ir.
Carlos habría sido un imbécil como pareja, novio o como hombre. Pero era el mejor padre que podría tener Olivia.

Y me parecía injusto negarle que ella llevara su apellido.

-¿Qué sucedió cuando lo hablaste con Logan?.- Jessica volvió a tomar nota en su libreta.

-Como lo sospeché, no estuvo de acuerdo.-

-Desde el momento que tuve a Olivia en mis brazos, te dije que me haría cargo de ella, que sería tan hija mía como tuya. La vi crecer, amo a esa niña, no quiero que tenga el apellido del tío que no supo de su existencia hasta que cumplió 3 años, lo siento, pero no me parece  justo.-

-Bueno, pero si Carlos no supo de ella fue por decisión mía, estuve mal, debí decírselo antes, aunque eso no quita que ha sido un excelente padre en estos últimos dos años. Creo que podríamos...considerarlo.- crucé mis brazos sobre mi pecho mientras me apoyaba en el marco de la puerta.

Logan me miró desde el borde de la cama: -No quiero que Olivia lleve su apellido, es mi hija, me hice cargo de ella y así será por el resto de mi vida. Cuando sea mayor que ella decida si quiere mantener mi apellido o llevar el del tipo que embarazó a su madre y decidió casarse con otra.- su mirada era fría y dura como un témpano.

-Logan...no entres en eso ahora, las malas decisiones que hayamos tomado nosotros no son culpa de nuestra hija. Creo que lo correcto será hablar con Olivia, decirle...

-¿Decirle qué? ¿Que tiene que elegir entre dos padres? Por Dios, tiene 5 años...no puedes obligarla a tomar una decisión así siendo tan pequeña. Cuando sea mayor de dieciocho años, que decida.
Me voy a bañar.-

Pasó por mi lado antes de entrar al baño y cerrar la puerta. Suspiré con angustia, entendía la postura de Logan, pero por otro lado me ponía en el lugar de Carlos. Debía hablar con Olivia, ella era quien tenía que decidir. No me importaba lo que opinaran los demás. El bienestar y la felicidad de mi hija estaban primero.

-¿Y qué sucedió cuando hablaste con ella?.-

-Pues, le expliqué que aunque Logan había estado con ella desde que nació, su papá biológico era Carlos. Y que ella debía elegir qué apellido llevar, ambos seguirían siendo sus papás, ambos la amaban y nunca dejarían de hacerlo.
Al principio me miró confundida, después me dijo que ella los quería mucho a los dos, pero que Carlos era más cariñoso con ella desde que lo conoció, y que le agradaba la idea de que su apellido sea Sainz.-

-Es una niña muy madura, ¿y qué pasó después?.-

-Logan se enteró de nuestra charla, o más bien, encontró una carta donde Olivia le pedía a Carlos si podía llevar su apellido. Claramente la idea no había salido de ella, y me increpó a mi, culpándome de querer romper nuestra familia. También me dijo que desde que Carlos apareció en nuestras vidas, solo había complicado las cosas.-

-¿Y tú crees que eso es así?.-

-Claro que no, creo que Logan está celoso, y el hecho que Olivia considere a Carlos como su padre, lo vuelve más difícil.-

-¿Y tú? ¿Sigues enamorada de él?.-

-Claro que si, es mi esposo.-

-No habló de Logan, me refiero a Carlos.-

-No, me lastimó demasiado.-

-¿A ti te gustan las rosas?.-

-Sí, ¿pero que tiene que ver?.-

-¿Te has pinchado un dedo con una espina?.-

-Sí.-

-¿Y te han dejado de gustar?.-

-Pues no.-

-Entonces, ¿sigues enamorada de Carlos? ¿O sólo finges que no para que no vuelva a lastimarte o a decepcionarte?.-

No supe que responder. Jessica me alcanzó otro pañuelo.

-Piénsalo, me lo respondes la próxima semana.-

En tus ojos - Logan Sargeant/Carlos SainzDonde viven las historias. Descúbrelo ahora